CORAZONES INVENCIBLES

LA RECONCILIACIÓN

POV ANASTASIA STEELE
La despedida fue difícil sobre todo con Mercurio quien fue mi única amiga adentro de aquí, prometí visitarla y es una promesa que cumpliré.
Las puertas del penal se abren dejándome ver mi libertad. Enfrente ahí un auto color negro donde me esperan Mía, Analidia y Gia la prometida de Elliot. Mía baja del auto y yo camino hacia ella dando un abrazo.

-Gracias Mía por estar en lo complicado- Le susurro

-No hay de que- Susurra -Bien sube al auto que mis sobrinos esperan a su madre en el escala

-Espera- La sujeto por el brazo -Christian está ahí

-¿No te lo dijo?- Pregunta

-Decirme que cosa

-Christian se va del país definitivamente de echo dejo esto para ti- Me da un sobre

Tomo el sobre y lo abro.

Querida Ana.

Tal vez cuando leas esto yo ya esté a varios kilómetros de distancia pero solo quiero cumplir con lo último que me pediste, que me mantuviera lejos de ti pero aveces me preguntó si realmente puedo cumplir con ello sin embargo valdrá la pena intentar por amor.
También te escribo para que sepas que te daré el divorcio y no quiero que piense que voy a hacerme el desentendido con mis hijos por el contrario iré a verlos frecuentemente pero ya no voy a perseguirte ni mucho menos a ser es loco enamorado trataré de no verte porque aunque lo dudes tu también me haces daño, esta carta no es para expresar odio ni mucho menos, simplemente es mejor cortar por lo sano algo que en su momento fue bellísimo.
Adiós para siempre mi amada Anastasia la mujer que tiene un alma y un corazón invencible ante la adversidad.

PD: Me da gusto tu libertad y pues te amo te veré cuando deje de amarte mientras tanto solo veré a mis hijos.

♥️.

-Pues si se quiere ir no lo voy a detener al contrario es como dice en la carta es mejor cortar por lo sano- Arrugó la carta

-Segura que tú estas bien

-Jamas estuve mejor- Parpadeo un par de veces -Llevame con mis hijos- Subo al auto

-Hermana- Murmura Analidia -Disculparas la prenda de salida pero no podías salir con ese vestido lleno de sangre

-Es cierto- Sonríe Gia -Feliz libertad Anastasia

Miro de reojo mi ropa, unos jeans azules con una blusa lisa negra con unos tenis blancos.

-La ropa es lo menos que importa- Les comento con una sonrisa -Gracias Gia me da gusto verte

-Y que ya te reconciliaste con Christian- Me dice Gia

-Digamos que este es el final de aquel amor

-Pero porque- Abre los ojos

-No es grosería Gia pero no quiero hablar de él estoy algo dolida

-Lo entiendo pero no comprendo cómo es que lo vas a dejar ir

-El no me ama ni hizo nada por mi el no es más que un maldito que me a roto el corazón más de una ocasión y si lo preguntas no sé cómo haré para dejar de amar a ese empresario megalomano- Le digo con tristeza dentro del auto