© SECRET LOVE || JK+18

DIEZ

— No, ella no irá a ningún lado contigo, y mucho menos así como estás. -me jaló más a su lado, chocando así con su pecho y rompiendo el agarre de JiMin.- Tú ve con los demás, yo la llevaré a su casa. -agarró mi mano y me jaló hacia la salida.-

Su mandíbula tan marcada lo decía todo. Estaba enfadado por verme aquí.

Toqué con mi mano libre mi hombro y no sentí de nuevo mi mochila.

— ¡Aguarda, me quitaron mis cosas, no sé en dónde están! -lo jalé de su brazo tratando regresar al lugar.-

En eso vi como una chica de estatura media se acercaba con mi mochila en mano. Lo iba a agarrar, en verdad que sí, pero JungKook lo tomó primero que yo y lo colgó a su espalda. Sólo me le quedé viendo, y al instante sentí un jalón de mi brazo para empezar a caminar hacia la salida.

Él aún no soltaba su agarre de mí mano y eso me dolía. Toda la gente, o la mayoría de ella, nos veía y sólo murmuraban.

— Tú. -apuntó al chico que me había aventado en la alberca.- Lárgate de la fiesta, ya no eres invitado. -le dio por último una de sus típicas miradas y se fue jalándome consigo.- Deberás que tú no tienes un límite, ¿Verdad? Te gusta meterte en problemas fácilmente. -me vio.- Trata de evitar el peligro, ¡¿Qué no te das cuenta que corres riesgo al estar aquí?! Te di una orden y la desobedeciste, ¿Acaso eres un bebé? -apretó de mi muñeca y su mandíbula se delineó muy bien de la presión.-

— Ya te dije que lo sentía. -me jaloneé de mi brazo.-

— Con un "Lo siento" no funciona esto, niña. Eres tan tonta que estás en la edad de querer experimentar, pero por meter la pata terminas afectándote a ti misma.

— ¡Oye... -me interrumpió.-

— Cállate y sólo sube a la motocicleta, que no tengo tu tiempo. -me soltó de su agarre. No tuve más remedio que subirme a su motocicleta y callar mi boca.-

Mientras que esperaba a Jungkook en la motocicleta él quitaba mi mochila y la dejaba a un lado suyo para después quitarse su chaqueta de cuero y extenderla.

— Póntelo, tendrás frío. -dijo con voz demandante. Me aventó su chaqueta de cuero, estampando en mi cara. Vi aquella chaqueta y con una decisión mental terminé por ponérmelo, olía a él y la chaqueta me quedaba un poco gran...-

Quedé tonta al ver tremendos brazos que cargaba, en su brazo derecho tenían tatuajes de todo tipo, no pasaba de su codo los tatuajes.

— Agárrate bien. -salí de mis pensamientos y rápidamente me sujeté de su pecho.-

Y cómo siempre yo rezando por mi vida, me agarraba fuertemente de su abdomen para no caerme, y del frío... Aunque tuviera su chaqueta tenía frío, ya que venía empapada.

Me maldigo porque nada de esto hubiera pasado si sólo me hubiera ido a casa.

°°°

Llegué a mi casa sana y salva y aunque me estaba muriendo de frío llegué salva. Me bajé de la motocicleta porque una, me estaba muriendo de frío; dos, no quería hablarle, y tres... No, no hay tres.

— Espera. -me atrapó con sus grandes manos atrayéndome hacia él, lo único que nos separaba eran esos pocos centímetros del otro, ¿Me iba a volver a besar? Yo creo que sí, porque su cercanía cada vez más y más me lo dice.-

Cerré mis ojos para poder así sentir mejor las mariposas en mi estómago, pero... El beso jamás llegó. Se estaba tardando mucho para ser pocos centímetro.

— YeoMin, mi chaqueta. -dijo con su gruesa voz y yo desperté de mi imaginación, abrí mis ojos y él ya estaba alejado de mí.-

— A-amh... Sí, sí... -me quité la chaqueta y se la di, él sólo asiento y se la volvió a poner. Yo tenía la cabeza agachada por pena. Cómo una tonta caí.-