El chico de los cuervos.

Caminos lejanos

Nueva historia, espero les guste.
Disclaimer: los personajes pertenecen al manga/anime Naruto. La historia es de mi autoría.

-Sakura chan ¿De verdad estarás bien?
- Si Naruto, estaré bien. Solo me voy unos días.
- 3 meses no son unos días.- una semana atrás Naruto y Hinata habían anunciado su compromiso
- Naruto, tienes que organizar tu boda. Así que no lo notarás.
- pero...
- Me costó mucho convencer a kakashi sensei no me lo hagas más difícil.
- Yo tampoco quería dejarla ir pero es su decisión, Naruto ya déjala.- el sexto hokage hizo su aparición, frente a las puertas de konoha Sakura intentaba despedirse de Naruto, mientras un equipo médico de 10 personas la esperaba.
- ¿Vino a despedirse?
- Porsupuesto, como no despedirme de mi alumna favorita.
- Si como no, sé que vino a darme el permiso que pudo darme ayer pero quiere perder tiempo tanto como sea posible.- la pelirrosa se acercó a su sensei y tomó el pergamino de sus manos.

Unos minutos más tarde, solo se veían las siluetas alejarse.

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- Tojuro Kun tú nos indicarás la dirección, sinceramente no conozco esta zona. Pero tengo entendido que tú provienes de una de estas aldeas ¿Cierto?.- Sakura iba al frente pero al llegar a un río se paró y ahora le dejaba el comando de la ruta a un chunin.
- En efecto Sakura San, de las tres aldeas que visitaremos tres aldeas, la aldea de las colinas, la aldea del carbón y por último la aldea entre los valles. Yo soy de la primera.
- Perfecto entonces comamos algo y partamos después.

Ya en el camino Sakura se posicionó cerca de Tojuro y una conversación amena comenzaba a desarrollarse. Trás ellos un grupo de 9 ninjas, de los cuales 5 eran médicos avanzaban bastante animados de poder salir a prácticas de campo.
- ¿Por qué decidiste volverte ninja? No es tan común que salgan de sus aldeas propias cuando no conocen a alguien de fuera.
- Las tres son aldeas pequeñas y sinceramente son bastante pobres, sé que ya reviso sus archivos y esta consiente de lo que le digo pero verlo es muy diferente vivirlo. Aunque ser ninja no era mi sueño me permitía darle a mi familia una mejor calidad de vida, investigue pero hasta antes de la entrada del nuevo hokage esto no hubiera sido posible. Agradezco mucho la preocupación que tienen ahora las aldeas por las aldeas aledañas que han sido afectadas por la guerra.
Aunque...- los ojos de Tojuro se fijaron en el horizonte y su mirada tenía un gesto frío.-  a veces me preocupa que solo sea por eso.
- ¿Tú crees que las grandes aldeas realizan esta labor de asistencia social solo por culpa?.- la cara de Sakura se torno severa.
- No, no... Sakura San no me refiero a eso... Es solo que ...
- Es verdad.
- ¿Perdón?.- Tojuro estaba perplejo, por un momento creyó que sus días como ninja habían acabado, Sakura era ex alumna del actual hokage, ex alumna de la quinta hokage, amiga del héroe del mundo, ella misma era héroe de guerra y la lista seguía, un chasquido de sus manos y perdería su futuro.

Sakura vió la cara del ninja al lado de ella y cambio la expresión de su rostro por una más amable.
- Es verdad, sé que es extraño que yo lo diga pero tienes razón, generalmente los que tienen se preocupan solo por sus iguales. Y eso no se limita a la rivalidad entre naciones, también entre habitantes de una misma aldea eso pasa, peleas entre los clanes principales son... bueno eran muy comunes, la pelea por la supremacía de los que tiene  poder a veces termina arrastrando a otros que ni siquiera se benefician de eso.- Sakura suspiro, ella venía de un clan menor y a pesar de que los ninjas de su clan también eran enviados a la guerra nunca lograrían equipararse a otros, recordó también a Naruto quién hasta antes de convertirse en héroe la había pasado bastante mal.- Pero no pongas esa cara, también tiene sus ventajas. - Sakura giró su rostro un instante le regaló una sonrisa y siguió mirando hacia delante.

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Era una noche templada, Sakura se encontraba frente a un pequeño escritorio cerca de la ventana. Su informe debía ser llenado antes de partir a la última aldea, solo se había limitado a enviar reportes.
- Sakura san.
- Tojuro Kun ¿necesitas algo?
- Me preguntaba si podía quedarme un día más. Sé que hoy es el último día pero mañana es el cumpleaños de mi madre y de verdad me gustaría pasar este día con ella. Es más usted y los demás quisieran quedarse son bienvenidos.
- Muchas gracias, porsupuesto puedes quedarte un día más sin embargo me temo que no podemos quedarnos, ayer platique con un chico y me comentó que hay una señora muy enferma que requiere atención.- la cara del joven se tornó algo preocupada.
- Sakura san, pero ninguno sabe llegar ahí.
- No tienes de que preocuparte, está aldea queda más cerca, aunque es bueno contar con alguien que conozca el lugar finalmente somos ninjas con un mapa y algunas de tus recomendaciones llegaremos bien.- el chico relajó el rostro, era increíble como está mujer podía transmitir tanta seguridad.
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Al día siguiente Sakura partió a primera hora. El tiempo de traslado era de 6 horas aproximadamente. Sakura se preguntaba cómo funcionaria ese famoso tren que se estaba construyendo y que se decía acortaría muchísimo los tiempos de traslado aunque solo pasaría por las aldeas grandes era intrigante.

En contra de los pronósticos la lluvia caía a cántaros, Sakura estaba considerando pararse y armar un refugio temporal pero la aldea debía estar cerca y era mucho más factible llegar ahí.
- Capitán Yamato que estarás haciendo? Será que habrás perfeccionado los detalles de una casa?
- ¡Sakura San! Ya se ve.- y era cierto, el equipo se encontraba en lo alto de una colina y desde ahí se veía la pequeña aldea apenas unas 50 casas, solo había que bajar y podrían cubrirse de la lluvia.

Comenzaron a bajar la lluvia hacia un ruido estrepitoso pero había un ruido extraño, los sentidos de Sakura se pusieron en alerta máxima.
- ¡Oh no!. - un derrumbe.- rápido abajo ya.
- Los ninjas se apresuraron a bajar mientras a la par se desplazaban hacia el lado contrario del derrumbe. Entonces Sakura alcanzó a divisar una silueta, un hombre cerca de donde caerían las rocas.
- ¡Demonios!. - Sakura alcanzó apresuradamente hacia ahí.

La lluvia de rocas venía, estaba a tan solo un metro de él, salto y se paró frente a él, dándole la espalda. Destruiría la roca, el daño sería mucho menor que si le pegaba de golpe.
- ¡Shana- sintió un tirón, lo siguiente fue que se sintió un brazo rodearle la cintura y luego vió como el hombre saltaba hacia una pequeña meseta.

Las rocas se acumularon abajo de la colina, sin llegar siquiera hasta las casas, la gente había escuchado el ruido y comenzaba a salir de sus casa, sus compañeros de equipo se acercaban a dónde se encontraba la pareja fue cuando dió un pequeño saltito y volteó hacia el hombre.

Era un hombre alto de complexión media, su piel era clara, su cabello era negro y ondulado, sus rasgos eran finos pero no afilados y le daban un toque bastante agradable y algo infantil, tenía los ojos cerrados pero de momento esto no le interesó en realidad su figura se le hacía familiar, tenía que tener apenas algunos años más que ella.
- ¿Estás bien?.- el hombre se dirigió a ella
- ¿Huh? Ehm si... Esto... ¿Tú - la pelirrosa fue interrumpida por sus compañeros que preocupados iban hacia ella.
- Sakura San ¿Se encuentra bien?.- Sakura giró su rostro para responder a su grupo
- ¡Hikaru!.- un hombre mayor se acercaba a ellos, bueno parecía dirigirse al chico, cuando logró verlo el rostro del hombre se relajó.
- Hikaru...- dijo Sakura por lo bajo, se giró de nuevo hacia él
- ¿Estás bien?.-
- Si, perfectamente. Pero ¿Quién eres tú?
- ¿Yo? Soy Sakura Haruno
- Mucho gusto Sakura Haruno soy Hikaru Sato, tu voz no me suena conocida y tampoco la de ellos.- señaló hacia el grupo.- ¿Quiénes son?
- ¿Seguro que estás bien? Por qué no abres los ojos.
- Lo haría pero sinceramente no es una vista agradable, así que preferiría no hacerlo. Además tampoco es como que sirva de mucho.- Sakura estaba confundida
- ¿De que hablas? Si tienes algún problema yo lo puedo solucionar.
- Creo que no me entiende.
- Él es ciego, pero no es una enfermedad, él no tiene ojos.- una voz hablo detrás de ella, el hombre mayor había llegado hasta ellos y ahora respondía el cuestionamiento de Sakura.
- ¿Qué? Eso no es posible pero... pero... sus reflejos.- Sakura lo había visto, sus reflejos habían sido casi perfectos hace un momento, es más hasta podría decir que eran los reflejos de un ninja nivel chunnin o tal vez solo había sido la euforia del momento? No, él la había tomado de la cintura y la había llevado a la meseta.
- No sé sorprenda tanto señorita, él es un chico excepcional. No sé que habrá visto pero ciertamente a veces me pregunto quién es el que está faltó de vista.

- Perdón, no quise...- Sakura se inclino en señal de disculpa pero el chico le tomo del hombro y la enderezó.
- No tiene que disculparte, ahora te parece si bajamos de aquí.- colocó el dorso de su mano sobre la mejilla de Sakura.- estás helada supongo que tanto tú cómo tu equipo han estado mucho tiempo bajo la lluvia vamos a mi casa.- Sakura apenas había escuchado las últimas palabras, desde que su mano tocó su piel Sakura sintió como se sonrojaba.
- Es por aquí. - el hombre mayor comenzó a guiarlos

Sakura comenzó a bajar al lado de Hikaru, por instinto intentaba ayudarle pero el señor tenía razón, no lo necesitaba en lo más mínimo.

Cuando llegaron a las casas, Sakura vislumbro su rostro en una ventana, parecía tomate. Había dos opciones o estaba sonrojada por el chico a su lado que le tomaba de la mano o había pescado un resfriado y tenía fiebre. Para este caso prefería la segunda.