𝓒𝓛𝓞𝓢𝓔𝓣⚜️KookMin⚜️[Adap]

⚜️8.Hoseok y Taehyung⚜️

No era la primera vez que Hoseok visitaba la casa del menor, mucho menos su habitación. A el muchacho le gustaba tener compañía y Hoseok se sentía feliz de ser él a quien recurriera cuando se sentía solo.

Taehyung solía ser siempre muy ruidoso y muchas veces llegaba a desesperar a las personas, pero eso nunca le ocurría a Hobi, a él realmente le gustaba estar al lado de Taehyung, no solamente porque era lindo, sino porque el muchacho era demasiado guapo. Tanto, que no pasó mucho tiempo para que el pelinegro se diera cuenta de lo mucho que le gustaba, cosa que en su momento llegó a ser realmente preocupante, pues sabía que sus sentimientos no eran del todo correctos, eso sin contar lo mucho que le molestaba lo que pensaran sus amigos.

Ya mucho tiempo, se había debatido así mismo, sin saber qué hacer con lo que sentía, que no hacía otra cosa que crecer más y más. Todos los días eran buenos para descubrir cosas nuevas sobre Taehyung, cosa que le encantaban, pues encontrar motivos para estar enamorado, le parecía lo mejor que podía hacer con su vida. Y hasta ese momento, la única persona que lo había apoyado de alguna forma había sido su nuevo amigo Jimin.

Aunque se moría de ganas por gritarle al mundo lo que sentía por el castaño, no se atrevía en lo absoluto, pues pensar en lo que le llegaran a decir sus mejores amigos, casi hermanos, Jungkook y Yoongi, lo alteraban en sobre manera. Muchas veces los había escuchado quejarse sobre lo mal que se veían una pareja de hombres, y por miedo a perder su preciada amistad, no se había siquiera atrevido a pensar en decírselos.

Pero eso no le afectaba de ninguna forma, ser sólo amigo del anormal y agradable Taehyung lo tenía bastante contento, o por lo menos eso creía.

Últimamente el menor, no hacía otra cosa más que hablar de lo mucho que le gustaba Namjoon y de que tenía planeado invitarlo a salir en cualquier momento. Cosa que irritaba a Hoseok de muchas maneras inimaginables. A diferencia suya, Taehyung no tenía miedo a gritarle al mundo que le gustaban los hombres, aunque eso no siempre fuera cierto. Aquel chico era tan versátil, que un día decía estar locamente enamorado de una chica de bonita sonrisa y ojos soñadores, mientras que al otro quería comerse a un ardiente muchacho con un cuerpo de muerte. Cosa que gritaba abiertamente, pues su familia solía ser de mente demasiado abierta, tanto que muchas otras veces habían confundido al mismo Hoseok con el novio del pequeño principito de la familia. Y cuando eso llegaba a suceder, el muchacho no hacía otra cosa más que negarlo avergonzado, mientras su crush reía divertido, sin parar.

— ¿Crees que Namjoon acepte mis sentimientos Hobi? — La pregunta de Taehyung lo tomó por completo desprevenido, su corazón comenzó a latir y de repente sintió una oleada de dolor en su pecho.

— No lo sé, Tae tae. Tal vez a él le gusten las chicas. — Hoseok intentó disimular sus celos y le sonrió al menor, con ternura.

— Pero las personas cambian.— Taehyung esbozo un lastimero puchero, que le terminó de romper el corazón.

Le acarició la mejilla con ternura y aproximó el cuerpo del menor al suyo, para envolverlo en un tierno abrazo.

— Tal vez deberías de buscar a alguien más. — Le dijo, al tiempo que le acariciaba la cabeza con cariño.

— ¡No quiero! — Al parecer, Taehyung se había ofendido con lo que Hoseok había dicho. El muchacho esperaba un tipo de apoyo por parte del mayor, y lo que recibió fue un tipo de consejo, para rendirse. ¡Cómo no iba a molestarse!

Hoseok se puso nervioso, pues cuando el castaño se molestaba, no había mucho que se pudiera hacer. Tragó saliva e intentó reparar su error con todas sus fuerzas.

— Lo que quiero decir, es que tal vez, él no te merece. Tae tae. — Titubeo.

— ¡Estás diciendo que Namie es una basura! — Taehyung se ofendió aún más, tanto que infló sus lindos cachetes como si de un hámster se tratará. — ¡Hobi, idiota!

¿Qué clase de conclusión era esa? Hoseok soltó una carcajada y se echó para atrás provocando que el malestar en Taehyung creciera. El menor se lanzó encima de suyo y comenzó a golpearlo con una almohada.

— Tae, para. — Dijo entre risas.

Sin embargo, el castaño no prestó atención a lo que su amigo le decía y continuó golpeándolo, levemente.

— Cuando Namie sea mi novio, bailaré alrededor de una fogata y cantaré "Hobi es un tonto" mientras arrojo arroz.

— ¿Qué? — Hoseok soltó una carcajada aún más fuerte que la anterior. No sabía qué hacer, y realmente no le interesaba mucho. Bufo las veces que fueron necesarias. Porque esa misma rareza era lo que amaba de Taehyung. Sin embargo, se sintió celoso al no ser él quien fuera el motivo de su baile alrededor de la fogata.

Por lo que se vio obligado a seguir a sus impulsos. Tomó a Taehyung por la cintura y sonrió al darse cuenta de lo pequeña que era, ignoró por completo la sorpresa del chico y sin detenerse a pensar un poco en sus acciones, besó a Taehyung, dejando escapar todo el amor que le tenía al chico desde hace ya mucho tiempo.

Vaya que sorprendió al darse cuenta que Taehyung le seguía el beso como si nada. Aprovecho la oportunidad y comenzó acariciar la espalda del menor con ternura. No pasó mucho tiempo para que el menor pasará sus manos y dedos entre el cabello de Hoseok, provocando que el pene del mayor vibrará inconscientemente, por aquella acción tan inocente. Que pedazo de pervertido era nuestro Hobi. Deslizó su mano por el interior de la camiseta de Taehyung y comenzó a acariciar su espalda, mientras que, por otro lado, comenzaba a morder los labios del menor, para poder meter su lengua en el interior de la boca del chico.

Se estremeció cuando Taehyung gimió. Eso había sido todo para que el pene de Hoseok se levantará de un solo golpe. Quería comerse a Taehyung y sin duda, esa era la oportunidad perfecta.

Comenzaron con aquel juego de caricias, que para ambos suponía un delirio, no habían dejado de besarse en ningún momento y Hoseok se sintió completamente feliz cuando sintió el gran pene de Taehyung rozar con su entrepierna ¿Él había provocado eso?

Estaba a punto de subir de nivel el juego, cuando escucho a la madre de Tae gritarle desde la parte de abajo de la casa.

Taehyung se despegó de aquel ardiente beso en cuanto escuchó la voz de su madre y miró a Hoseok un tanto avergonzado.

— ¡Qué sucede mamá! — Taehyung se levantó y comenzó a acomodarse un poco la ropa, pues con aquel poco tiempo, Hoseok, sí que había dejado estragos.

— ¿Quieres que arregle eso? — Hoseok señaló la erección de Taehyung al tiempo que le guiñaba un ojo.

Sonrió al notar lo colorado que se ponía el menor, ante su reciente comentario. Se mordió el labio y a gatas comenzó a acercarse de nuevo al menor.

— Hyung... — Tae lo miró expectante, en espera de su siguiente movimiento.

— ¡Namjoon está acá abajo! — La voz de la señora Kim no pudo ser más inoportuna.

El rostro de Taehyung se había iluminado por completo, esbozó una gran sonrisa, que para Hoseok representó el fin del mundo. Sin embargo, se obligó a seguir intentando.

— Tae tae, estábamos ocupados. Dile que vuelva en otro momento. — Hoseok dijo aquello un tanto nervioso. Esperando la reacción que Taehyung pudiera tener.

— Lo siento Hobi, pero es Namie. — Taehyung lo miró con lástima, cosa que no le gusto a Hoseok de ninguna manera.

Se levantó del suelo, tomó sus cosas y salió de la habitación con las lágrimas listas para desbordarse. Taehyung lo siguió escaleras abajo, mientras gritaba su nombre incontables veces. Pero Hoseok no regresó, tenía el corazón roto, porque por una vez se había atrevido y lo único que habían hecho era burlarse de él. Cual payaso de circo. Salió de la casa, no sin antes cruzar miradas con Namjoon, corrió por la cuadra, hasta que dejó de ver la casa de Taehyung y se tumbó a llorar en un árbol cerca al parque.

Nunca le había dolido tanto el corazón. Perder a su primer amor de una forma tan patética había sido desalentador.

Esta cortito. Espero lo disfruten.

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