𝓒𝓛𝓞𝓢𝓔𝓣⚜️KookMin⚜️[Adap]

⚜️20. Mentira.⚜️

Extraña era la definición perfecta para las últimas tres semanas que había vivido Jungkook. Después de haber regresado con Sunji, Jimin y él habían tenido la oportunidad de solidificar su relación. De vez en cuando, Jungkook visitaba al chico en su departamento y se quedaba hasta tarde viendo películas o follando como ninfómanos lunáticos, incluso, y pese a que lo había resistido tanto, Jungkook se había atrevido a confesarle al mayor lo adicto que era a sus gemidos y a su piel. Ambos disfrutaban de la compañía del otro al máximo, sin importar que.

Pero una de las cosas que más amaba Jungkook era que sus mejores amigos sabían de la relación que mantenía con el mayor y por tanto, tenía permitido besarlo o mimarlo enfrente de Yoongi o Hoseok, siempre y cuando Taehyung y Jin no estuvieran presentes.

Por otro lado, su relación con Sunji no iba a ninguna parte, procuraba llevarla al cine o a cualquier otra parte dos veces por semana, procurando besarla o mimarla por lo menos tres veces por día, para mantenerla estable. Lo único difícil que había experimentado Jungkook en todo ese tiempo era haberse negado a visitar la casa de la chica, pues al sentirse un completo traidor y una basura, no se podía permitir ver a los padres de la chica a los ojos. Lo mismo era cuando la joven quería visitarlo. No podía aceptar algo como eso, no cuando se estaba viendo con su primo a escondidas.

Sí, esas tres semanas habían sido extrañas, pero no habían sido malas, no cuando por fin había encontrado la forma de sobrellevar todo ese extraño cúmulo de sensaciones completamente nuevas y diferentes para él. Emociones que disfrutaba, aunque sabía que tarde o temprano terminarían por matarlo.

Y justamente ese día, terminaría por ser por completo su perdición.

Jungkook camino por el pasillo de la universidad con Yoongi a un lado, prestando especial atención a lo que su amigo le contaba, al parecer recientemente había peleado con Jin por haber salido a beber unas cuantas cervezas con Zico, Yoongi estaba demasiado indignado, pues según él, merecía toda la confianza de Jin.

Jungkook solamente se limitaba a asentir y a darle absoluta razón a su amigo, pues en realidad sus argumentos eran demasiado sólidos. Ambos jóvenes entraron en el aula encontrándose con un Hoseok demasiado feliz, incluso más feliz de lo que debería.

Yoongi puso los ojos en blanco en cuanto Hoseok le preguntó qué sucedía, preparándose de inmediato para contarle con detalle lo que pasaba por la mente de su adorado novio.

Jungkook se separó del par para acercarse a su querido novio y dedicarle la primera sonrisa del día.

— Hola bebé ¿Cómo estás? —Jungkook se sentó en su butaca y la aproximo a la de Jimin.

— Bien, pequeño, gracias ¿Y tú? — Jimin se encontraba leyendo Romeo y Julieta hasta que Jungkook se acercó a él para saludarlo, dejó el libro a un lado y se dispuso a disfrutar del pequeño momento que estaba teniendo con el joven.

— Ahora estoy mucho, mucho mejor. —Jungkook deseaba tomar las manos de Jimin entre las suyas y besar los dedos del joven con cariño, sin embargo, tuvo que abstenerse con todo el dolor de su corazón. Pues el aula ya estaba completamente repleta, faltando unos pocos alumnos.

Jimin sonrió y miró a su chico anonadado. —Eres demasiado cursi. —Sabía de antemano que tenía que disfrutar de aquel momento, pues probablemente no podría hablar con el menor hasta la noche, cuando de repente llegará a su casa dispuesto a pasar el fin de semana a su lado.

Jungkook intensificó su sonrisa. —¿Te molesta? —Espetó avergonzado.

— Sabes que no. — Musitó Jimin, nervioso.

Jungkook soltó una pequeña risita, cubriéndose la boca con la mano. Jimin lo miró una vez más, amaba cuando el menor hacía eso.

— ¿Qué te parece si hoy pasas la noche en mi casa? —Kook había invitado a Jimin antes a su casa, presentándolo como lo que era, el primo de su novia y con la firme excusa de que SunJi quería que ambos se llevaran bien, tal y como había hecho la chica con Taehyung un tiempo atrás. —Te tengo una sorpresa, vamos.