Una Trabajo con ayuda extra

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Aunque me quise alejar de lo ilegal cuando llegue a esta ciudad, me fue imposible hacerlo porque una menor de edad sin padres,  no podía ser legal, vague por las calles unos días, hasta que me encontré con capitana que me ayudo o mejor dicho me reclutó a su grupo que en ese entonces era muy reducido eran unos 10 o 12 chicos entre ellos Elvia, nosotras éramos las que más años tienen en él grupo, creo que por eso somos las más raras, ambas tenemos  secretos muy oscuros para ser rebelados y que nos llevaron con la capitana, se diría que podríamos  ser amigas pero no, cuando ella me vio me lanzo literalmente una lámpara a la cabeza, y yo caí desmayada, nos odiamos yo más a ella por supuesto ¿Quién en su sano juicio le lanza una lámpara a alguien que recién conoce?

En fin, cuando iba camino al banco me acorde de la primera conversación con la capitana

-Hola, pequeña- me dijo sonriéndome una señora muy alta y con él pelo negro y unos músculos impresionantes, no me dio buena espina parecía una de las socias de mi padre y eso no me agradaba trague, ¿me abra encontrado?, palidecí- no te preocupes, no quiero hacerte daño, solo vengo a proponerte un trato, nada más- dijo volviéndome a sonreír, su cara era linda parecía un ángel, -asentí un poco desconfiada- ¿tienes hambre?- negué me había comprado una hamburguesa, con él dinero que le había robado a mi padre, sé que estaba sucio, pero lo necesitaba - ¿segura?- pregunto sin creerme, asentí con más énfasis- estaba bien, pero sabes algo yo si tengo hambre ¿me acompañarías a comer?- me pregunto amigablemente, me encogí de hombros, y la seguí caminado a su lado dudando de si hacia bien en confiar en ella.

Mientras ella comía me explico, lo que hacía con niños como yo, que no le importaba nuestro pasado, si habíamos escapado de casa, eres bienvenido en la casa, ¿mataste alguien?, también, creo que era lo único que me gustaba de la casa, aceptaba a todo niño y lo ayuda con la única excepción que tendría que robar para ellos y hacer uno que otro trabajillo, pero era mejor que vivir en la cárcel. Además no necesitaba de ningún papel para estar con ellos, así que acepte, con la única condición que me dejara ir al colegio, nunca me voy olvidar  de la cara que puso capitana al escucharme decir eso, fue muy graciosa, tenía los ojos abiertos como platos y se atraganto con su bebida porque se lo dije cundo estaba tomando un sorbo de vino, quería reírme pero me mantuve sería, porque mi petición era muy impórtatepara mí y lo sigue siendo, quiero recibirme de la escuela secundaria, romper el círculo vicioso de mi familia, ninguno se había recibido, porque cuando eras llamado, tu vida cambiaba pero yo no, yo lo iba a terminar cueste lo que cueste.

Llegue al banco, más importante de la ciudad, pero con él nivel más bajo de seguridad, me coloque mi pasa montañas, por las dudas y una mochila, tendría que llevar una gran cantidad para que Capitana no se enoje conmigo, tal vez unos 10 millones y no me daría castigo.

Entre por donde siempre, la puerta trasera, avance con paso silencioso y entre a la bóveda tranquilamente, como dije la seguridad era pésima, las cámaras no funcionaban gracias a que la habíamos intervenido hace un largo tiempo y aun no se daban cuenta. Ingresé la cuenta y abrí la puerta pesada, encontrándome con una gran sorpresa no era la única que quería robar él banco parece.

-Tíos ¿Qué hacen en mi banco?- pregunté divertida, ambos se sobresaltaron al escuchar mi voz, me reí

-Pero mira quien nos encontró por un momento pensé que era él de seguridad- dijo Harry con una mano en él corazón, fingiendo pánico, reí

-¿Y cómo que es tu banco?- pregunto Gary, elevando una ceja

-Es mío porque ya lo he robado tantas veces que…- me fui acercando a él y le arrebaté él fajo de billetes que tenía en la mano- me pertenece- dije mientras lo depositaba en mi mochila, necesitaría por lomenos otros 20 fajos más si quería salir viva.

-Así que es verdad que vives con un grupo de aficionados- dijo divertida Trudy, al miré mal

-Un grupo de aficionados, tendría una capital de 50 millones de dólares al mes- dije indiferente, porque era la verdad a veces la superábamos y generalmente era por mí- y en blanco- dije finalizando y sus bocas no podía estar más abiertas porque él suelo se lo impedía, sonreí ante ellos mientras guardaba los últimos fajos en mi mochila y la cerraba.

-Pero eso es imposible, es decir no puede- comenzó a balbucear Trudy

-No, no es imposible- dijo Gary mirándome con determinación- y menos si en ese grupo se encuentra nuestra sobrina- dijo lo último con tono divertido

-Y es por eso que la necesitamos en nuestra familia- dijo Harry mirándome lleno de orgullo, si tan solo supieran que para mí esto era solo temporal, quería dejar esta vida, quería ser normal

-Bueno, lo mejor va a ser que me vaya chicos- dije disponiéndome a irme

-Espera, te llevamos- dijo Harry, me pare en seco, no podían llevarme

-No- dije secamente

-Wow, síque es serio él escondite- contesto divertido esté

Avance hacia la salida, cuando escuché un ruido que provenía del pasillo, junto con una luz, maldije y mis tíos venia riéndose genial él de seguridad avanzo más rápido hacia aquí, la salida estaba tan cerca, pero mi familia estaba dentro y tenía que ayudarla

-¡Idiotas!- susurre grite- ¡Cállense y escóndanse que él de seguridad se acerca!- ambos rápidamente hicieron silencio y se escondieron detrás de los estantes que estaban repletos de dinero. Los seguí y me escondí junto con ellos

-¿Quien anda ahí?- dijo una voz rasposa él de seguridad tenía más 100 años, no sé cómo podía mantenerse de pie aun.

 Al no obtener respuestas, carraspeó- debe ser otra vez los malditos ratones- en él momento que lo dijo como auto reflejo tape la boca de Gary, porque me acorde que les temía , desde pequeño, pude sentir como un quejido se logró escuchar, recé para que él viejo no se dé cuenta, pero la luz volvió a alumbrarnos y fue cuando la vi, una rata mirándome fijamente, Gary empezó a temblar, mierda no podía hacer ruido, él aciano comenzó a acercarse más nosotros

Genial tendría que sacrificarme por él grupo, sin quitar mi mano de la boca de mi tío me dirigísigilosamente hacia el raton quien me seguía mirando fijamente, era un poco aterrador pero igual la agarré y me cara hizo una mueca de asco, y  mi tío me mordió la mano para alejarse de mí, tirando unos billetes

-¡ladrones malditos salgan de su escondite!- gritó elanciano pero en vez de eso, yo solté el raton en su dirección, deseando que pensara que fue la rata

-Pero mira quien armo tanto escándalo- dijo él hombre enojado- mañana mismo voy a compra veneno para poder eliminarte de mi vida de una vez- dijo él hombre volviendo a cerrar la bóveda.

Un momento cerro la bóveda, por fuera, ¿¡cómo rayos íbamos a salir de aquí ahora?!. Pensé mientras me llevaba ambas manos a la cabeza, sintiendo como algo se subía a mi pierna, era la rata quien me hacía caricias, eso es raro, pero me pareció tierno a la vez tal vez me la lleve, la alce en mis brazos y la rata empezó a hacerme mimos en mis manos, era un poco mona, me la voy a quedar.

-¡Suelta ese horrible espécimen!- gritó susurro Gary, mirándome con asco

-No, creo que me la voy a quedar, ella me agrada y yo le agrado a ella además un baño y ella va a quedar limpia y lista para venir conmigo- dije mientras la depositaba en el bolsillo de mi chaqueta

-Estás completamente loca- dijo Gary con una gran mueca de asco, me reí, pero luego me acordé de la situación

-He chicos ¿cómo vamos a salir de aquí? si se cerraron la puerta- pregunté con escepticismo

-Por aquí- dijo Trudy que también me miraba mal, por el raton que llevaba en mi bolsillo- mira hicimos este poso que nos lleva directamente a la salida de la puerta trasera- los mire estupefactamientras veía él poso que había debajo de una baldosa, si no me lo hubiera mostrado no me hubiera dado cuenta de su existencia, estaba muy bien trabajado.

-pero, ¿cómo?, ¿Dónde?,¿cuándo?- mascullé sin entender

-Tenemos nuestros contactos- dijo sonriendo perversamente Harry, acariciando a mi rata, sonreí  ante ello

El Paraíso de FayraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora