Si hay algo en la vida que no entiendo, lo hago un problema enseguida. Pero a excepción que solo lo hago un problema para mí y si hay que resolverlo lo hago yo sola.
Pero este, donde está involucrada mi familia veo que yo no podre sola.
Y sola no es una palabra que me defina bien en este momento. Ya que a mi lado tengo a Alex observándome mientras yo solo le pongo la mayor de mis atenciones al café que tengo en mis manos.
-Ross-Rompe el silencio-Si quieres hablar me tienes aquí, y si no quieres también me tienes.
-Gracias Alex-le respondo-Pero ni yo sé cómo llegue aquí-digo sonriendo-Creo que mi cuerpo me atrae a los lugares donde no debería estar-Tomo un poco de café.
-¿No quieres estar aquí?-me pregunta asustado
-No jaja…no quise decir eso-más bien me gustaría estar junto a ti siempre (pienso)-solo que…olvídalo.
-Si es por mi estaría cada segundo junto a ti-dice en un tono suave que derrite a cualquiera.
-¿Por qué para ti es tan simple decir esas…-No sabía que palabra utilizar-¿Cosas?
-Tan solo no encuentro una razón para no decírtelas-dice, pensando bien cada palabra-Pero no es simple. Nada que tenga que ver contigo es simple Ross-me mira a los ojos-¿Para ti es simple esto?-se acerca y me besa
Nunca me cansare de sus labios. El sí sabe cómo subirme los ánimos. Pero enseguida me acuerdo de todo mi familia, Ric y que acabo de dejar sola a Jude en la casa del idiota.
-Perdón, no…no lo hagas-me separo de él y tomamos una gran distancia
-¿Qué pasa? Aun no me has dicho porque has venido-dice olvidando completamente lo anterior.
-¿Quieres escuchar algo loco?-le pregunto nerviosa
No sé si decirle sea la mejor de las opciones, pero me gustaría que él me viera como en verdad soy. No como una humana simple, si no como la hechicera que soy. Obviamente el miedo no falta, pero ahora me siento segura. Con él a mi lado es difícil no sentirme de esa forma.
-Todo lo que viene de ti es loco-me sonríe-
-Soy Bruja-Digo sin rodeos y segura.
Alex con cara de póker y sin saber que decir. No sabe si tomárselo enserio o reírse solo esta…impresionado.
-¿Bruja?-dice pregunta incrédulo-¿Estás jugando conmigo?-se levanta de mi lado y camina tratando de asimilar lo que acabo de contar.
-Lo digo enserio-me pongo junto a el-si quieres te lo puedo demostrar-le sonrió, para que se relaje aunque sea un poco.
-Demuéstramelo-me pide
Accediendo a lo que me pide. Separo sus pies del suelo y lo elevo. Lo que más me gusta de este hechizo es que no tiene su “palabra”. Ya que otros si la tienen y son muy raras prefiero los simples.
-O..oye ok te creo, ahora bájame-dice claramente asustado.
-¿Saldrás corriendo?-le pregunto
-¿Cómo? No, te creo y esto lo encuentro….-se queda sin palabras-….¿Fabuloso? La verdad no sé cómo expresarlo pero, no correré de ti nunca-dicho eso lo bajo
-Es una locura-digo nerviosa-Pero esta soy yo y solo espero que me entiendas. La verdad yo no pedí ser lo que soy pero es lo que me tocó vivir-le confieso
-Tranquila-se acerca-Eres hermosa, irradias una luz violeta que no podría explicarla, pero es fantástica-pasa su pulgar por mi mejilla y acerca sus labios a mi oído-Me gustas mucho Rosalía y ni esto ni nada me podrá separar de ti-me susurra para luego besarme como el solamente sabe hacerlo.
-¿No tienes miedo?-le pregunto separándome de él.
-¿A ti? Nunca y si esto de ser bruja eres tú, no me importa-me acerca más a el-Puedo vivir con eso-Vuelve a besarme.
Luego de largos y apasionados besos con Alex. Le pedí que me fuera a dejar a mi casa y el con todas las “ganas” del mundo accedió.
No todo es color de rosa, aún hay temas que resolver con la familia y verdades que descubrir.
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Soy tu perdición
FantasyRosalía creía que todo iría bien ese año, que no haría uso de la magia, pero algo, el destino o su mala suerte hace que no sea de esa forma y todo sea contrario a lo que ella deseaba.