Heridas

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Entonces el Cactus le dijo a Globo:

- No tengas miedo, puedes confiar en mí, jamás sería capaz de hacerte daño

Se acabó, ya no estaré entre tus brazos, ni el calor de tu regazo cobijara mi piel desnuda, no existe duda alguna, tu amor es a corto plazo, tan solo quedan retazos de lo que llame fortuna...

Se acabó, solo hay furia en mi mirada, ya que al ser que adoraba solo era de ficción, tanta malversación de tiempo, despilfarraba, me sentía un rey y tan solo era un bufón...

Te espere justo allí donde me dejaste, cuando mi mano soltaste por un amor alternativo, tantos Te quiero colectivos, tantas cosas promesaste, y al final solo me entregaste estos puntos suspensivos...

¿Por qué no admites de una vez todo aquello que me ocultas?, así por fin me sepultas bajo tus frases de concreto, anhelaba una relación suficientemente adulta, pero ni siquiera pasamos la etapa de ser feto...

No eras mi media naranja, obviamente eras un limón, la acida decepción impregnando mis papilas, ahora mis pupilas segregan la aflicción y la ruda indignación de ver mi alma abatida...

Te agregare a mi arsenal de cicatrices y de oscuros matices que han teñido mi biografía, no daré riendas a tu alevosía, no dejare que pudras mis raíces, luego de que aterrice no habrá para ti amnistía...

Te pedí una corona y me la entregaste de espinas, me lanzaste al fuego como a un malvavisco, con tu lengua viperina me inyectaste tus toxinas, me golpeaste más que Mel Gibson en La Pasión De Cristo...

Tenías ganas de ver sangre y yo fui tu blanco perfecto, en efecto, solo fingías un falso afecto, que me afectó e infectó cada célula con defectos y ni Hefestos pudo forjar una armadura que me protegiese de tu desafecto...

Me hechizaba completamente tu mente y anatomía, eras la ambrosía que vitalizaba mi cuerpo, me robaban el aliento tus pensamientos y su simetría, yo fui tan Poesía y tu tan puro Cuento...

Con las mismas palabras con las que me diste vida, ahora me castigas, me asesinas y te vas, ya comprendo el dolor de una relación fallida, ahora eres la enemiga que me hostiga, nada más...

Me dijiste tantas veces que el cariño era sincero, único y verdadero, que era todo lo que esperabas, de que sirvió decirte que te amaba, tratarte cual caballero,  si este amor pasajero se baja en cualquier parada...

Tú jugabas conmigo, yo me la jugaba por ti con todo mi frenesí, ¿Entiendes la diferencia?, ahora en la sala de urgencia que me dicen lo que perdí, te dije donde dolía y allí me heriste con violencia...

Pero tranquila, estoy bien, solo duele cuando respiro, la vida me pego un giro, traslación de realidades, me rompiste las dorsales y solo solté suspiros mientras acuchillabas mis órganos vitales...

Tú, tres metros sobre el cielo, yo, dos metros bajo tierra, así concluyo esta guerra en la que luchaba sin saber, quise llevarte al cielo, pero mis intenciones quiebras y me derrumbas al suelo como a Torre de Babel...

Hice tantas cosas por amor, olvide que yo también las merecía, pero eras una arpía que absorbía mi esencia, me envolviste en tu elocuencia, pero sobre mi vertías el sedante que se esparcía causándome somnolencia...

Fuiste LCD provocando alucinaciones, nuestro universo no se superpone, esta es la culminación de esta férrea adicción que me lleno de ilusiones, no hubo un cupido con flechas, eras tú, con un arpón...

El amor es un arma con la que todos nos suicidamos, es como subir a un altiplano y aventarse hacia el vacío, ¿Por qué tan grande desafío?, solo soy un simple humano, siento que se me va de las manos este calvario sombrío...

Antes te tenia fe, pero ahora ni fu, ni fa, eres un ser sagaz con un instinto asesino, como cosa del destino colonizaste mi faz, hoy me siento como Morty, solo experimentabas conmigo...

Que ricas tus mentiras, casi me las como todas, solo fui un momento de moda, ahora me siegas con tu hoz, mi subconsciente y su voz haciendo que el dolor me carcoma, diciendome: "Había una vez, pero ya no"

Aún quedan tantas cosas que me gustaría decir, ¿Pero qué voy a conseguir con cuestionar mi caída?, ya no voy a fingir que aun te quiero a morir, cuando acabas de abrir una a una mis heridas...

Sin Flores No Hay PrimaveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora