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Nos dirigíamos a la reunión de los Kages cuando Karin ha logrado sentir el chakra de dos personas cerca de nosotros por lo que rápidamente hemos actuado.
—¿Qué...?
—¿Qué sucede, Karin?
—Ahora siento otro chakra, pero un poco más débil que el de los otros dos —informó—. Su chakra es algo siniestro... ¡Se están acercando!
—Yo me encargo de esto —dijo Suigetsu con seguridad al momento en que sostenía su arma—. Muy bien. ¿Quién intenta interceptarnos esta vez?
Aquellas tres personas que percibió Karin han aparecido por lo que Suigetsu rápidamente se lanzó a atacarlos. Sin embargo, la persona más pequeña detuvo su ataque sin problema y en eso he podido ver sus ojos, los cuales me han sorprendido.
—Byakugan... —musité—. Detente, Suigetsu.
—¿Qué? Pero si todavía no empezaba lo bueno.
—¿Qué hacen miembros del clan Hyuuga de Konoha en este lugar? —pregunté—. No. Tengo una mejor pregunta: ¿Dónde está Hyuuga ____?
—¿Por qué deberíamos de responder a eso? —preguntó la más pequeña sin despegar sus ojos de mí—. Por lo que hemos oído eres un ninja renegado y debemos...
—Eliminarme —dije interrumpiendo sus palabras. Algo que no le gustó demasiado—. ¿Creen que pueden vencerme?
—Somos miembros del clan Hyuuga. Nuestros ojos son mejores que los tuyos.
—Estás bastante segura de ello —solté una risa amarga—. ¿Por qué no probarlo?
He activado mi Sharingan a lo cual la pequeña muchacha activó su byakugan, pero antes de que pudiera hacer algo fue detenida por una de las personas que la acompañaba.
—Es suficiente, Hanabi – sama —mencionó y el oír su voz hizo que algo en mí se estremeciera. Hace mucho tiempo que no la había oído.
—Él todavía no menciona que es lo que quiere contigo, nee san.
—Supongo que me lo dirá a mí, ¿verdad? —preguntó mientras se quitaba aquella capucha y dejaba ver su rostro, donde he sentido una opresión en mi pecho al ver varias heridas en ella—. Ha pasado un tiempo, Sasuke.
—Eh, así que esta es la persona a la cual buscabas —dijo Suigetsu—. Y tú jurabas que no se trataba de una chica, Karin. ¿Qué se siente...?
—¡Cierra la boca!
Karin y Suigetsu habían comenzado a pelear por lo que he suspirado para luego comenzar a acercarme a ____. Sin embargo, Hanabi se interpuso en el camino mientras me miraba seriamente con su byakugan activado.
—No te acerques a ____ – nee san hasta que nos digas que es lo que quieres con ella —dijo con un tono hosco—. Dependiendo de lo que respondas veré si te dejo acercar.
