Camino difícil

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Capítulo 3: Unión de una nube defectuosa, conociendo un sol energético.

Termino el primer día con cansancio, comió ocultándose de sus matones, solo probó un poco de la comida china que había hecho Fon, por lo que solo vio, entre los Arcobalenos, los únicos que sabían cocinar eran Reborn y Fon, entre los presentes que ahora vivían en la casa, siempre era observador por alguno de ellos, al principio le era incomodo pero al sentir sus buenas intenciones, los tomo como una rutina, miro a la nada pensativo, era raro para él tener alguien que no tuviera malas intenciones hacia su existencia, era un nuevo ambiente que claramente no estaba acostumbrado, pero no negaba que era agradable ese cambio, sonrió un poco, comió lo que podía para después guardarlo, no sabía si sus cuidadores estaban cerca, aunque algo le decía que si, aun no le preguntaba nada a Reborn sobre esa "enseñanza mafiosa" ¿Que tenía él que ver en eso?, miro el lugar actual que estaba, era un salón desocupado, cerca del gimnasio y de los clubes de boxeo y kendo, suspiro acurrucándose en el pequeño cueco que llamaba "refugio" siempre escuchaba a veces una voz energética, animada, siempre pensó como sería él si su vida fuera diferente a lo que era, más que nada lo hacía sonar como un deseo.

"Sin embargo es un deseo inalcanzable" pensó para sí mismo, se levantó, intuía que las clases ya comenzarían, aunque aún no tocaba el timbre, salió de la sala chocando con alguien, que obviamente le haría caer al ser más bajo y débil que cualquier alumno en ese lugar, pensó lo habitual, le dejarían tirado en el piso, él era insignificante para el mundo, sin embargo, se sorprendió al ver una mano vendado en frente él, Tsuna levanto la mirada sorprendida, notando unos ojos grises y cabello blanco que le sonreía.

-Hey lo siento extremadamente.-se disculpó el chico.

Tomo la mano que le levanto sin ninguna dificultad, Tsunayoshi busco su libreta y escribió rápidamente, cosa que el mayor miraba curioso esa acción.-/¡Gracias! Aunque yo fui el causante de que chocáramos, me disculpó/.-hizo una reverencia sin mover la libreta para dejarlo leer.

El de ojos grises parpadeo más confundido.-¿No puedes hablar?.-trataba de no gritar, algo le decía que era mala idea, esa sensación que había sentido antes volvió a surgir, también le ponía más animado por extraño que le pareciera.

Negando con la cabeza algo sonrojado, era extraño, el chico frente él no se estaba burlando por ser Dame-Tsuna, se sobresaltó al escuchar el timbre, miro al chico nuevamente.-/Lo siento nuevamente por el problema/.

Sin dejarle responder se alejó de allí para ir a su salón a tiempo, ignorando la mirada proveniente de atrás.

Ryohei Sasagawa siguió mirando la huía del chico, el castaño era un enigma, pero algo le hacía sentir que debía ir y cuidar al chico, paso su mano por su cabello confundido por los sentimientos que albergaba en ese día, en el segundo receso fue encontrado por su hermana menor y Hana.

-Oh Kyoko ¿necesitas algo?.-preguntó aun pensativo.

La nombrada miro a su hermano mayor antes de sonreír.-Ah sí, Oni-san hoy iré a la casa de Hana-chan así que me iré primero.-aviso animada.

-¡Entendido! Diviértanse al extremo!.-grito.

-Tks deja de gritar mono.-dijo Hana cruzándose de brazos.-Eres como el contrario de Sawada.

Ante la mención del castaño la castaña rió divertida.-Si lo vemos de esa manera, Tsuna-kun es el lado opuesto de Oni-san.

Alzo una ceja por ello.-¿Quién es ese Sawada?.-dijo deteniendo sus movimiento interesado por la conversación.

Hana bufo.-Quizás hayas oído de 'Dame-Tsuna'.-al ver el desconcierto del chico quiso golpearlo.-Se llama Sawada Tsunayoshi, es castaño y ojos marrones.-se encogió de hombros por su vaga descripción.-Ah y es mudo.