EL ZORRO DE UN OJO

CAPITULO 10

-Gohul!!- fue el pensamiento que recorrió la mente de Naruto, poniendose alerta a cualquier cosa que la persona frente a el podía intentar hacerle, aunque por alguna razón, el hombre frente a el no mostró algún signo de amenaza a pesar de tener sus ojos como los de un gohul, como si fuero de lo mas normal.

-oh hola, no te había oído entrar, tal parece que estaba demasiado concentrado jeje- respondió el joven de apariencia peculiar- ¿que se te ofrece niño?- terminó preguntando.

Aun en alerta Naruto respondió- quiero que modifiques mi máscara - dijo el rubio canoso mientras sacaba de su mochila la máscara y se la daba al hombre- me gustaría que le parches el ojo derecho y que la adaptes mi cabeza- nuestro protagonista mencionó los detalles.

-Oh valla, se ve que es de muy buena calidad, es táctica y hecha para situaciones complicadas, de buenos materiales y resistente- dijo el hombre analizando la máscara que el niño frente a el le dio- esta bien, comenzaré ahora- dijo sorprendiendo al rubio, pues parecía que antes de el ya estaba haciendo otro trabajo.

-¿no estabas haciendo otra cosa antes de que llegara?- preguntó Naruto.

-tranquilo, no es tan importante- contesto el pelinegro con una mirada extraña hacia el niño.

Fue así que el pelinegro hizo a Naruto sentarse en un banco y comenzó a tomar las medidas de su rostro, pero lo raro inicio cuando el pelinegro comenzó a hacerle preguntas extrañas al rubio, tales como con que mano escribía, que comida le gustaba, o si le gustaban algunas cosas en particular, el hombre argumento que esos detalles también servían para confeccionar una máscara perfecta, dejando confundido al rubio, quién seguÍa preguntándose quien era este hombre, estaba casi seguro de que era un Gohul , no solo por los ojos, sino también por la ligera similitud en el olor que ambos tenían.

Todo siguió lo mas normal posible, el pelinegro iba a comenzar con su trabajo y como cortesía le ofreció algo al niño, una taza de café.

Naruto tragó saliva ante esto, seguramente el sabor seria horrible como todo lo demás , pero no tenía opción, debía beberlo si quería pasar desapercibido y aunque se había negado el hombre le insistía.

AsÍ que Naruto bebió y se preparo para lo peor, pero algo paso, le gustó. Casi sintió ganas de llorar, después de tantos tiempo de alimentarse de carne humana, sentir un sabor diferente y tan delicioso lo hizo sentir vivo, lo hizo recordar a antes de Orochimaru, a su familia, a los Uchiha, lo hizo sentir humano aunque sea por unos segundos.

El pelinegro al observar la expresión del rubio sonrió, como si lo hubiera esperado. Pero luego de ese pequeño momento Naruto volvió a la realidad, y miro seriamente al hombre- ¿que me diste? - le pregunto Naruto con seriedad.

-¿es raro verdad? El café es lo único que los humanos pueden compartir con los Gohuls- dijo el pelinegro, poniéndose al descubierto frente a Naruto que activó su kagune.

-lo sabía, tu eres también un Gohul- dijo el rubio amenazante.

-tranquilo, yo no quiero pelear, si quisiera hacerte algo ya lo hubiera hecho, solo quiero ayudar a un "hermano" - dijo el pelinegro con algo de gracia, mientras que Naruto guardó su kagune pero siguió alerta- Me llamo Uta, y ayudo a los Gohuls a pasar desapercibidos, es lo que hago- se explicó el recién conocido como Uta.

-bien, entonces prosigue- dijo Naruto aun con desconfianza, pero Uta no lo culpaba, el sabia que los Gohuls no eran muchos y eran temidos y repudiados en las naciones, el no sabía por lo que Naruto había pasado.

-eres interesante, había oído de los Gohul de un solo ojo, pero jamas vi uno. En fin, seguiré con mi trabajo (su aroma me recuerda a Rize... Bah ahora no importa)- dijo Uta yendose a su mesa de trabajo mientras Naruto se sentó en una silla por ahí.

Un par de horas después, Uta llegó con la máscara de Naruto, la pintura de la máscara fue algo oscurecida, fue ligeramente agrandada, una parche cuadrado yacía sobre su ojo derecho, y Uta también le había puesto una peluca peliblanca en la cabeza, y un detalle interesante fue que le había puesto un cierre en la boca. Cuando nuestro protagonista preguntó por esto, el pelinegro respondió que así podría comer con la máscara puesta. Lo raro fue que Uta no le cobró pero el rubio igualmente agradeció y ya estaba yéndose. Debía buscar un lugar en el cual dormir para mañana buscar su traje de combate y seguir con su travesía.

-¿cual es tu nombre niño?- fue la pregunta de Uta deteniendo al rubio que estaba a punto de irse- me llamo Naruto, adiós Uta_san- y nuestro protagonista se fue.

Uta dio una pequeña risa- Adiós Naruto_kun- y volvió a su trabajo.

EN KONOHA- AL DIA SIGUIENTE

Eran las 6 de la mañana en la aldea de Konoha, nos encontramos en la entrada de la misma aldea, en donde varias figuras podian divisarse.

Minato el cuarto Hokage era una de esas figuras, seguido de su unico alumno vivo, Kakashi Hatake, y de sus hijos.

-¿esta seguro de hacer esto sensei?, puede dejarmelo a mi y a un escuadron para que lo busquemos, usted es el Hokage, tiene toda una aldea que cuidar- dijo el peliplata casi suplicando.

Minato se encontraba con ojeras, parecía que ni siquiera había dormido, llevaba su atuendo de jounin y su sombrero de Hokage y estaba de espaldas hacia Kakashi y sus hijos- ya tomé mi decisión Kakashi, y que clase de Hokage soy... Ni siquiera pude proteger a mi hijo, cometí una terrible atrocidad como padre, y ahora Naruto esta pagando el precio- dijo Minato al borde de las lágrimas- pero la aldea no se quedará sin un Hokage- eso sorprendió a los presentes ¿a que se refería?, lentamente Minato tomo su sombrero y a paso lento se acercó a Kakashi que miraba en shock a su sensei mientras que Haise y Hinami también quedaron con la boca abierta, y al final, fue Kakashi el que tenía el sombrero del Hokage.

-sen...sei- dijo el peliplata aun shockeado, pero cuando iba a decir algo mas fue interrumpido por Minato.

-estoy seguro de mi decisión Kakashi, serás un gran Lider, ¿me lo prometes?- dijo Minato con su rostro aun serio, pero se notaba la confianza en sus palabras y en su mirada.

Kakashi al ver eso solo dijo- se lo prometo sensei- con toda su seguridad.

Por otro lado Minato se arrodilló para quedar a la altura de sus hijos- traeré a su hermano y enmendaré mis errores, cuiden a su madre- dijo Minato abrazando a ambos- los amo, adios- y Minato se levantó para tomar su camino fuera de la aldea.

-¡Trae a Naruto de vuelta Oto_san!- alentó Hinami, mientras que Haise no hizo nada.

FIN DE CAPITULO