Usualmente le temen más al calentamiento de la cerveza, que al frío invierno que se cuela en los labios de aquellos que se han desenamorado...
Aveces los besos intentan a gritos plantar bandera y proponer treguas para salvar la emoción del primer roce.
Pero así como se bebe a grandes sorbos la efervescencia de un vaso de cerveza, así se van helando los labios de dos personas que ya no se están amando.
Amy Beltrán