capitulo 19

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-Dante debo trabajar ya es tuve mucho tiempo inactiva debo ocuparme de mis niños- volvio a decirle por quinta ves. Él hombres no la dejaba ni Ayudar en la cocina la queria veinticuatro siete junto a él y todo con la escusa de qué estoy enfermo debes cuidarme.

-Tús Niño? Ellos no son "tus niños"- dijo haciendo comillas con sus dedos.
-Tús niños seran nuestros hijos no los hijos de los demas- recalco tomandola de su pequeña cintura para besarla.

- Dios... deja de sentir celos hasta de mis alumnos- se rio seguiendole el beso.

-No puedo Evitarlo no te quiero compartir ni con ellos, quedate un día más conmigo si, quedate hoy mañana vuelves a dar tús clases mi Luna por favor- pidio entre el beso.

Sintio su corazon deretirse de Amor no podia creer qué apesar de qué Dante fuera tan Imponente, tambien podia llegar hacer tierno.

-Esta bien - se rendio -un día más pero mañana volvere a dar mis clases el qué tiene qué descansar eres tú no yo- le a claro.

-Si lo qué sea ahora solo quiero disfrutarte- dijo tomandola en sus brazos y Llevandola a la habitacion desesperado por poseerla.

La Llevo a la habitacion se sento en la cama dejandola en su regazo mientras la besaba con pasion, era muy bien correspondido por la pequeña qué movia sus caderas sin control sobre la errecion de este, sus manos fueron al trasero de ella y lo apreto, sacandole un gemido de los labios.

-Te necesito quiero qué seas mía - dijo sobre los labios de Ella.

Continuo besandola una de sus manos fue a la intimidad de la mujer qué ya estaba humeda Como era de costumbre.

- Siempre lista para mi- hablo mientras le besaba el cuello dejandole una qué otra marca.

Dos de sus dedos invadieron la intimidad de la pequeña mujer qué no paraba de gemir su nombre.

-Dante - gemia Luna perdida en el plaser qué le brindaban.

La dejo en la cama le quito la ropa se fue directo a la intimidad de la mujer paso su lengua por los pliegues humedos saboreandola, le gusta el sabor salado pero dulce de su mujer siguio entretenido chupando el boton sensible de la conejita qué solo se dedicaba a jadear la pentro con si lengua mientras sus manos se entre tenian en Los pequeños pechos de Luna robandole el aliento llevandola casi al orgasmo.

--Dante- gimio perdida en el placer qué le brindaba su hombre no sabia Como diablos habia soportado tanto, sintio un cosquilleo en su vientre queria correrse, Dante no leda tregua chupaba su intimidad con pasion y hambre no pudo más cuando dos de los grandes dedos de Dante la penetraron su orgasmo llego corriendose achorros observo la maravillosa ecena de como la saboreaba un rubor subio a sus mejillas todavia no se acostumbraba a verlo hacer eso la ecena era tan erotica digna de un buen libro.

Dante se quito la ropa frente a ella Luna solo podia observarlo embobada al ver a semejante Espesimen del sexo maculino completamente desnudo frente a ella, su mirada callo en el miembro del hombre era grande y grueso algunas venas sobre salian estaba un poco aturdida no solo por su orgasmo y por estar desnuda frenta él con las piernas abiertas mostrandole todo sin tapugos, si no tambien por el pene de Dante era más grande de lo qué imagino no sabia como eso caberia en ella se saborio Los labios ella tambien queria probarlo, Dante se subio encima de ella sacandole un jadeo cuando restrego su miembro en su intimidad, no paro dejemir al sentir Como este pasaba su mienbro una y otra ves sobre su raja, sus gemidos fueron cayados por los labios del hombre qué la beso con hambre mientras restregaba su polla en la intimidad de la mujer qué temblaba de bajo de él.

--Dante, por fa~ Dante por favor - suplico Necesitandolo.

-Dime qué quieres cariño- dijo sobre sus labios sin dejar de frotarle el miembro.

La Luna del viudo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora