Narra Ocho...
Desperté al día siguiente y no hice ningún esfuerzo esta vez para salir, me dolía la cabeza y los brazos, y note que mi nariz otra vez sangraba un poco, me sentía débil ya que tampoco quise comer nada esos días...
Tocaron la puerta, levante la mirada para vez quien era, y lo vi era el, pero realmente no quería saber nada de él, me sentía traicionada...
-Tú...¿Que haces aquí?-dije confundida pero sobre todo enojada
-Vine a verte...¿Como estás, porqué tu nariz sangra?-preguntó preocupado
-¡Encerio te atreves a venir después de días y preguntar si estoy bien, cuando claramente no lo estoy! -dije gritando y con lágrimas en los ojos
-Y tus brazos...están vendados, vi lo que trataste de hacer _____, ¿Porqué lo hisiste?-dijo mientras que se acercaba a mi
-¡Eso no te importa, ya nada importa, yo ya no te importo!-dije alterada, se sentó a mi lado y comencé a golpearlo pero sin fuerzas ya que no estaba bien de los brazos, el solo los trato de tomar no con tanta fuerza para no lastimarme hasta que me calmara...
-Tranquila _____ aquí estoy ya nadie te hará daño-dijo entre lágrimas
-No tu me dejaste, me dejaste aquí sola y no te importo nada-dije gritando y llorando a la vez, mientras me trataba de safar de sus manos, me soltó poco a poco mientras me calmaba, pero fue en vano ya que me soltó y lo comencé a golpear de nuevo, hasta que me abrazo y yo seguía forcejeando...
-No Cinco no me toque, vete por favor-
-Ocho perdóname, lo hice por tu bien, por favor...perdóname-dijo entre lágrimas y abrazándome un poco fuerte para que no me soltara de entre sus brazos, hasta que deje de forcejear ya que me dolieron más los brazos y al final también lo abracé, pero no dejaba de llorar y el acariciaba mi cabello...
-Ya, ya estoy contigo y te juro con mi vida que jamas te volveré a dejar, esta vez lo hice por tu bien linda, te quiero, tranquila ya no te harán nada-dijo, se despegó de mi poco a poco y me miro a los ojos sonriendo, y con su dedo limpio la poca sangre que salía de mi nariz...
-Me duele mucho la cabeza, un doctor menciono algo de mis recuerdos pero todavía no entiendo por qué estoy aquí-
Abrieron la puerta y entró papá...
-Lo hice por qué necesitaba ver los recuerdos de tu familia biológica-dijo papá
-No, no te atrévas a acercarte a mi, tu me hiciste todo es...-estaba diciendo, hasta que de repente empecé a sentirme sin fuerzas y mareada
-¿Ocho?,¿qué te pasa?-preguntó asustado
-Yo...yo me siento mal, siento que mi cuerpo pierde fuerza-
-Traigan un doctor-ordenó papá
Hasta que empecé a ver todo borroso y me desmaye...
-¿Que le pasa?-pregunto cinco asustado
-No le ocurre nada grabe solo que no ha querido comer nada, y está débil por lo que le hicimos-explicó el doctor
-¿Estará bien?-preguntó
-Si claro que sí, despertará en un rato-
-Bien me quedaré aquí hasta que despierte-dijo cinco
-Esta bien, haré varias cosas mientras despierta, cuando despierte no vamos-dijo papá
Desperté después de un rato y Cinco estaba a lado mío...
-¿Que me pasó?-pregunté
-Estas débil no has comido, perdiste sangre cuando te cortaste y por lo que te hicieron-dijo acercandose a mi
-¿Estaré bien?-
-Claro que lo estarás-
-Bien-
En eso entró papá...
-Bien despertaste-dijo papá
-No aléjate-dije a papá
-Tranquila, tiene una explicación-dijo Cinco
Yo estaba confundida ya que no sabía nada...
-¿Que explicación?-
Me contaron todo lo que sucedió y solté en lágrimas de nuevo
-Entonces eres mi padre biológico y Grace es mi madre-dije abrazando a papá
-Así es y también eres Zero-
-¿Zero?-pregunté
-Si ya que eres tú sobre todas las cosas para mí como para tu madre-dijo papá
-Ouu, que cursi-dije riendo
-Pero igual seguirás siendo Ocho para tus hermanos, no te preocupes-
-Bien, pero hay una cosa que sigo sin entender, ¿Porqué cuando le cante la canción a Cinco quedó inconsciente?-
-Aa si sobre eso, desarrollaste un segundo poder que al cantar la canción al oído de alguien, este quedará inconsciente-
-Eso...eso es genial-dijo Cinco
-Si eso creo-dije
-Bien hora de irnos a la academia, en un momento vendrán a cambiar tus vendas de los brazos y a quitarte el suero, para que después te cambies-dijo por último papá
-Esta bien-dije
Papá se retiro de la habitación...
-¿te duelen mucho?-preguntó Cinco
-No...un poco-
Cinco me tomo un brazo cuidadosamente e hice un quejido...
-Si claro solo un poco-dijo sarcásticamente
Cinco se acercó más a mí y me volvió a abrazar dándome un beso en la cabeza...
-Por dios linda, perdón por dejarte sola y dejar que hicieras esto-
-No te preocupes al final de cuentas no es tu culpa-
En eso llegaron un doctor y me hizo sentarme en la camilla de nuevo, me desvendo los brazos y se podía ver dos cortadas algo grandes en ellos, podía ver la cara de frustración de Cinco, me quito la aguja del suero, volvió a vendar los brazos y se marchó...
Cinco se acercó a mí y me tomó de la cara...
-Jamas vuelvas a hacer eso ______, te juro que me siento culpable por esto, ¿Como pude permitirlo?-dijo enojado
-Perdón, tenía que hacerlo, estaba desesperada por saber como estabas-
-Prometeme que jamás volverás hacer esto por mi ¿si?-
-Lo prometo-
-Aquí esta tu ropa, te dejo para que te vistas-dijo y salio de la habitación
Tomé el uniforme y me cambié rápido para salir de ahí lo más rápido posible, salí Cinco y papá estaban esperándome, salimos y Cinco me abrazo por los hombros todo el camino de regreso a la academia, después de un rato nos quedamos dormidos por unas cuantas horas, ya que estábamos lejos.
ESTÁS LEYENDO
𝐸𝑥𝑡𝑟𝑎 𝐼𝑛𝑢𝑠𝑢𝑎𝑙, 𝑀𝑖 𝑣𝑖𝑑𝑎 𝑐𝑜𝑚𝑜 𝑛𝑢́𝑚𝑒𝑟𝑜 𝑜𝑐𝒉𝑜.
RomantiekLa historia de los hermanos Hargreeves cambió cuando al principio una chica entró a la academia, llamada por su padre como Número 8, pero eso no era todo ya que hay algo sobre su pasado que la vincula con la historia de amor de Reginald y Grace, y s...