las heridas prevalecen

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al llegar la mañana al fin despertamos y con algo de inquietud salimos para ver a las dos mujeres dándose un beso en los labios, ambas nos sonrojamos pero ya nada nos puede sorprender además se ve que se aman o se quieren, aunque no se nada de eso por la crianza que tuve mientras viví con mis padre juntos, sakura solo me miro ya que ella vivió sola con su madre hasta que ella comenzó a tener una relación con el que es su padrastro, ella tampoco vio ni la mas mínima fracción de cariño entre ellos, y bueno esto es nuevo para mi amiga o casi hermana y para mi, solo bajamos haciendo notar nuestras presencias para verlas, ellas nos sonrieron y enseguida la rubia trajo dos platos de desayuno, en los ojos jade de sakura casi salen lagrimas ya que después de ese intento de cena que nos dio mi madre antes de morir, no hemos comido nada decente, mientras que yo contuve aquella emoción para solo agradecer y tomar asiento al lado de sakura y al fin comer algo cálido y sin estar entre los desperdicios, ellas también desayunaron, al finalizar ellas nos llevaron a su sala y ambas tomamos asiento tomadas de la mano, bajo la mirada de ambas adultas, quien nos miro con cariño y tomo la palabra fue aquella castaña - ¿de donde son y donde están sus padres?- ambas nos miramos para solo bajar la mirada y ser yo quien tomara la palabra ya que sakura no sabia ¿si hacíamos bien al mentirles a estas buenas mujeres? - verán somos hermanas nuestra madre se llamaba hana, pero ella fue abusada por cuatro adolescentes que no solo la violaron, también mataron frente a nosotras y si estamos ahora vivas es porque nuestra madre nos escondió y ella callo nuestra presencia hasta su ultimo aliento, su apellido en realidad no lo recordamos ya que ahora todo a sido remplazado por aquellas escenas que vimos, venimos de lejos eso es una gran verdad pero no sabemos su nombre de aquel lugar, además de que nuestra madre era una mujer sola y sin familia ya que había deshonrado a sus padres la corrieron y nunca supimos si tenemos mas familia o no, mi hermana y yo hemos estado en situación de calle por tres semanas, acercarnos a un policía nos aterro ya que nos separarían ya que somos mellizas, yo saque los ojos de mi madre y al parecer mi hermana saco los ojos de mi padre, el cual no sabemos nada ya que el jamás se hizo cargo de nosotras solo nuestra madre y venimos con ella en búsqueda de un mejor futuro ya que ella no tenia estudios y a nosotras nos los quería dar y nos enseño lo mas que pudo, o mejor dicho lo que sabia ya que ella era de una familia muy pobre como para pagar las cosas de un colegio, es lo único que sabemos mi nombre es hinata y el de ella es sakura - ellas nos miraron con terror para enseguida mirarse la una a la otra, la rubia camino en circulo en aquella estancia para ver a la castaña - niñas nosotras queremos hijos, pero al ser una pareja de mujeres y con las miles de complicaciones que hay para obtener una adopción no hemos logrado nuestro cometido, y por lo que han dicho están solas en este mundo y no podemos dejarlas ¿díganme les gustaría ser nuestras hijas?- ambas nos miramos un segundo para verlas y asentir al mismo tiempo, ellas se abrazaron con cariño para enseguida hacer una llamada, nos miraron con una sonrisa radiante, mas no quisimos ser mas sinvergüenzas de lo que ya estábamos siendo al mentir sobre nuestro origen, pero por dentro sentí un alivio de ver que al fin estaríamos en un lugar seguro, sakura solo me tomo de la mano para darme fuerza y no decir la verdad ya que mentir nunca a sido algo que se me de, asique con ese simple gesto calle toda la verdad y en el primer momento de descuido nos desairamos de aquellos papeles que nos dan los apellidos de nuestro origen, después de un rato tocaron a la puerta era un señor serio con su cabello largo y detrás de el venia un niño o un chico mas grande que nosotras, el nos miro con desconcierto pero solo decidimos ver lo que hacían los adultos, sakura se acerco mas para escuchar y enseguida volvió con una sonrisa que me confundió, el chico me miro con suma atencion para enseguida tomar asiento en el sillón donde antes estábamos sentadas, nosotras solo lo miramos con indiferencia a pesar de ser su mirada insistente, paso un rato cuando ellas vinieron a nosotras para mostrarnos los que serian nuestros nombres oficiales a partir de ahora, sakura senju y hinata senju , el hombre camino hasta vernos y solo tocar nuestro pelo lo cual nos dio un escalofrió lo cual no es en vano o no después de todo lo que hemos vivido a nuestros solo 10 años de edad, el miro de nuevo a las que ahora son nuestras madres para darle un golpe a su hijo en la cabeza por ser mal educado. el chico lo miro  - sasuke saluda a la señoras senju y niñas el tramite es lento pero al no tener familia esto será legal lo mas pronto posible para que puedan entrar a estudiar o estudien en casa, eso lo decidirán sus madres al final cuando sean sus madres legales - ambas le hicimos una reverencia al señor en agradecimiento mientras volvía a reprender a su hijo - despídete sasuke - el niño nos miro con suma atención pero se enfoco al final en ellas - a sido un gusto verlas, me despido - ellas solo revolvieron el cabello azabache de el para enseguida salir de la casa la rubia de nombre tsunade nos miro feliz - pronto tendrán clases en casa para que puedan ponerse al corriente y puedan entrar a un colegio normal, además de que las llevaremos a terapia ¿solo si ustedes quieren? nuestro plan no es imponernos ante ustedes, queremos ser sus madres y cuidarlas pero sobre todo que confíen en nosotras - aquellas palabras solo me hicieron sentir mal ya que estamos mintiendo en ciertas partes de nuestra historia, ellas emocionadas nos miraron y en unísono hablaron - hijas vayan a cambiarse que vamos a comprarles ropa - se vieron y rieron mientras se daban un beso mas, no sabemos quien es la mama o el papa, pero no es algo de gran relevancia mientras nos mantengan seguras y lejos de esos verdugos que dejamos en aquel pueblo - si mamas vamos a cambiarnos - ella casi lloran de la emoción por la forma en que las he nombrado, creo que es lo mínimo que puedo hacer por ellas ahora, subimos para enseguida tomar los papeles de nuestro origen y doblar cada papel de forma tan pequeña que cupiera en nuestras bolsas de nuestros pantalones, ya que solo pudimos sacar tres mudas de ropa y una pijama junto a nuestro abrigo que ahora esta sucio y deteriorado, tomamos los zapatos para bajar y verlas a las dos relucientes y con una ropa menos formal o menos sensual de la que traían en la madrugada, solo las seguimos de nuevo al auto para subir he ir al lugar que ellas habían escogido para hacer las compras, en realidad sakura y yo estábamos muy emocionadas por todo lo que nos estaban comprando, ropa, zapatos, pijamas y algunos accesorios innecesarios pero que ellas querían que tuviéramos, al final nos llevaron a un restaurante de pizzas donde comimos de nuevo felices, ambas al terminar pedimos ir al baño y fuimos solo para hacer cachitos nuestros papeles y tirarlos al retrete, sentimos culpa por mentir y mas a ellas que nos están dando su confianza y apoyo de forma incondicional, mas no tenemos forma de retroceder y nos queda suplicar que no estén buscando a alguna de las dos o eso nos llevaría a nuestro punto inicial lleno de tormentos, solo salimos del baño tranquilas para verlas y retirarnos de aquel local.

corrompidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora