Capítulo 6 Sentimientos encontrados.

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La atmósfera se volvió extraña, mientras Xiao Xingchen y Xue Yang estaban comunicándose el lugar se volvió algo diferente, la cueva se llenó de un humo azul oscuro , nada se podía distinguir.

- Humanos imbéciles creen que pueden Invadir mi propiedad solo así como así? - una voz femenina sonó a través de las gruesas capas de humo.

Shuanghua que se encontraba en la espalda del Taoísta se desenfundó de improviso.
Xiao Xingchen la tomo entre sus manos y se dirigió a donde se concentraba la mayor cantidad de energía demoniaca.

- Como!? - se escuchó que pronunció la voz de la dama demonio, está dama demonio había tomado la forma del mismo humo que cubría todo el lugar, era casi imposible que alguien pudiera diferenciarla entre todo el humo que yacía en el lugar puesto que la diferencia entre la energía que desprendía esta dama demonio y el humo eran casi imperceptibles pero no imposible, un cultivador podría distinguirlo tomandole alrededor de 10 minutos distinguir el aura diferente; pero este Daozhang la descubrió en unos pocos segundos.

La Dama Demonio después de esquivar ese ataque volvió a su forma física - Tu !!... Como!? -

- De verdad quiere que me ponga a explicar cómo pude "adivinar" su ubicación cuando estamos a media pelea ? Jaja tonterías - después de tener este pensamiento Xiao Xingchen volvió a atacar.

Xue Yang empuñó a Jiangzai y fue encontra de todos los lacayos de esta dama demonio, esas criaturas venian de todas partes, era difícil verlos por lo pequeños que eran aunque por lo feos que estaban el delincuente estaba bien con que está niebla no le dejara ver a tan horribles criaturas.
Después de matar a más de 3 docenas por fin se dio el tiempo de mirar a Daozhang, estaba peleando contra esa demonio.
Esta mujer demonio se percató que Xue Yang iría ahora tras de ella, ya tenía dificultades con el taoísta por lo que estaría en graves problemas si uno más iría contra ella.

Todas las capas gruesas de ese humo azul comenzaron a reunirse en su cuerpo, lo absorbió todo en un par de segundos.
Xiao Xingchen y el delincuente no perdieron el tiempo y atacaron, la dama Demonio puso esquivar a Jiangzai que apuntaba a su cabeza pero no a Shuanghua que apuntaba a su pecho.

Cayó al piso dejando una gran grieta en el suelo, Xiao Xingchen se apresuró a dar el golpe final, Shuanghua se disparó hacia su cuerpo pero antes de llegar al cuerpo se detuvo y en su lugar comenzó a golpear a ciertos objetos que fueron lanzados como balas hacia todos lados, estás cosas tenían gran cantidad de energía demoniaca por qué Shuanghua fue tras de ellas, Xue Yang estaba a su lado y por inercia Xiao Xingchen se posó en frente de el para cubrirlo.

- Daozhang! - Xue Yang hablo, pero el Taoísta no contesto.

Esta era una forma protección que usaban algunos entes del mundo demoniaco, el demonio reúne toda su energía y la transforma en un arma dicha arma tendrian diversas características dependiendo del Nivel de poder del usuario, en este caso este arma creado por la dama demonio se transformaron el pequeños clavos en los cuales tenía almacenada un veneno letal para humanos y peligroso para cultivadores,esto con el fin de protegerse, aunque esto les costará la vida, un poco muy tonto a decir verdad, pero ellos preferían autodestruirse que morir en manos otro.

El taoísta había recibido un total de 8 de esos clavos envenenados, lo suficiente para mandar a la tumba a más de 20 personas normales pero Daozhang no era un simple humano, estos clavos lograrían tan solo un mareo intenso, alucinaciones o comportamiento extraño.

- Daozhang ! - Xue Yang sostuvo el cuerpo del Taoísta que cayó en sus brazos.

El Taoísta no dijo nada, con un poco de dificultad dio media vuelta para quedar de frente al delincuente, se acurrucó en su pecho.

Xue Yang le llamó una vez más - Daozhang ? - cuando el Taoísta pareció reaccionar a su llamado levantó su rostro el delincuente miro su rostro, estaba ruborizado, un tenue color rosado decoraba sus mejillas, Xiao Xingchen era un hombre justo, siempre elegante con un aura de superioridad pero ahora parecía la persona más indefensa del mundo.

Xue Yang no se dio cuenta de cuando la distancia de su rostro y la de Daozhang se había acordado a la mitad y de la mitad a solo unos pocos centímetros.
Podía sentir su respiración junto a la de Daozhang.

Y sus labios chocaron.

Xue Yang sintio los labios de Daozhang, esos labios húmedos, suaves, contra los suyos.
El delincuente tuvo poco tiempo para pensar en lo que estaba pasando, pues los labios de Daozhang comenzaron a moverse, esos labios seductores que el delincuente no podía dejar de ver cómo se abrían y cerraban.
No fue hasta que ambos necesitarían aire que se apartaron.
Las mejillas de Daozhang estaban más rojas que al principio.

Cayó nuevamente en los brazos de Xue Yang.

- Es ahora que decides dormir Daozhang? - Xue Yang dejo que descansará en su pecho por un momento luego puso al Taoísta en su espalda, dejando que siguiera descansando, tomo a Shuanghua en su mano izquierda, y emprendió camino.

Ya era hora de volver.


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