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Louis salió del hospital casi sin darse cuenta, sus piernas querían sacarlo de ahí. Se sentía horrible, Harry tenía su vida destruida por su culpa, Louis sabía que Harry estaría mal, pero no se imaginaba que llegara a ser capaz de algo así, cada renglón de aquella carta que recordaba se sentía cono un golpe en lo más profundo de si corazón, en lo más profundo de su ser. Literalmente  se sentía la peor persona, tenía claro que si algo le ocurría a aquel chico no se lo perdonaría jamás. Cuando se dio cuenta se encontraba  frente al bar que más frecuentaba  en Londres, entro y observó el ambiente, era muy tarde por lo que la mayoría de la gente estaba borracha, normalmente se habría ido porque no soportaba aguantar a gente ebria, pero en su situación solo quería olvidar al resto del mundo.

-Ponme una copa.-Louis se sentó en la primera silla que encontró y rápidamente apoyo todo el peso de su cuerpo sobre los codos, la barra estaba bastante sucia pero manchar su su chaqueta  en esos momentos era lo que menos le importaba. Se bebió la copa de un solo trago y acto seguido hizo una mueca por el ardor que eso le provocó en la garganta.-Ponme otra.-Dio un golpe en la barra para llamar la atención de la camarera.

Cuando la segunda copa recorrió su tráquea muchos recuerdos  invadieron su mente.

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-¡Lou!, vas a manchar la chaqueta de chocolate.-Dijo Harry entre risas.

-No pasa nada, se limpia.-Dijo Lou mientras intentaba manchar la nariz del rizado sin atinar del todo.

-Claro, como no limpias tú.-Rió Harry.

-Shh.-Louis se chupó el dedo donde tenía el chocolate para que así el ojiverde dejara de huir de el, se acercó a el y le besó, sintiendo la sonrisa de este bajo sus labios. Cuando em rizado estaba inmerso en el beso Louis aprovechó y manchó la nariz de Harry con el otro dedo en el que aun conservaba chocolate.

-¡Oye!.-Harry hizo un puchero mientras limpiaba el chocolate de su cara.

-Eres tan tierno éxitos.-Lou volvió a besar los labios del ojiverde.-Te amo.

-Y yo enano.-Se volvieron a besar.
 
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-Ponme otra.-La camarera se quedó unos segundos observando a Louis.

-Lleva usted dos copas seguidas, debería parar un poco.-Lou rió.

-Mire señorita, el amor de mi vida está en una camilla de hospital después de haberse intentado quitar la vida por mi culpa  esto de aquí.-Saco la carta de su bolsillo.-Es la carta que me escribió antes de tomarse un puto bote de ansiolíticos.-Louis respiró profundamente.-Asi que, no intente detenerme en la tercera copa porque mi fin hoy está bastante más lejos.

La cama suspiró y le sirvió la copa a Louis, guardó la botella y lo miro.

-Podra tomarse las que quiera, pero debería estar en aquella habitación junto a ella.-Lou ignoró el echo de que se había referido a Harry como "ella" porque no ganaría nada corrigiendola. Se tomo su copa pero esta vez más tranquilamente. Cuando iba por la quinta copa la camarera le advirtió que no lo serviría ninguna otra, puesto que ya le habían hecho efecto las otras no pudo replicar mucho, solo lloraba y repetía que lo amaba. Tras un buen rato  en el que la camarera le insistía en que debía ir a casa, por fin consiguió que Louis aceptara la oferta de llamar a un taxi que lo dejara directo en casa. Louis salio del bar acompañado de ma camarera que no se quedaría tranquila hasta dejar a el chico a buen recaudo. No lo conocía de nada pero había enpatizado con el, quizá al verlo tan destruido en aquella barra o quizá por la simple ternura que el ojiazul desprendía.-Mire, ahí viene uno.-La chica llamó al taxi que paró enfrente de ellos.

-A-a mi casa no, al hospital.-La chica asintió, abrió la puerta y ayudó a Louis a subirse.

-¿A dónde?.-El taxista le habló a ella al notar el estado de Louis.

-Al hospital, asegúrese de que llegue bien y, tenga, no creo que él esté en condiciones de pagarle.-Le tendió 20 libras puesto que no costaría mucho más que eso, el hospital estaba a unas cuantas manzanas.

Cuando llegaron al hospital el taxista observó como Louis entraba en el hospital y acto seguido se fue. Louis entró y se dirigió a ma recepción.

buenas noches.-Dijo arrastrando las palabras.-La habitación 28besta por ahí, ¿ve-verdad?.-Señalo hacia un pasillo, la chica de la recepción lo miro extrañada pero decidió no poner ninguna pega. 

Lou caminó por le pasillo hasta llegar a su destino, giro la manivela y tras la puerta descubrió a Harry rodeado de clabes y en un sueño profundo, las lágrimas brotaron de sus ojos ante aquella imagen, de acerco hacia el y se sentó en la silla que había justo al lado, cogió su mano y apoyo su cabeza e  el hueco de colchón que quedaba libre.

-Te a-amo ricos.-Susurro.-Espero que puedas perdonarme.-Dijo Lou mientras sus ojos se cerraban por el cansancio lentamente.

Holaa!! Perdonen si hay algo mal escrito es en cap pero lo escribí desde el movil y el auto corrector es bastante malo!!

Cuando te encuentre. (Larry Stylinson)Where stories live. Discover now