A travez de un juego (Rusper)

Conociendo el lugar

Perú aterrizó en la isla de Alemania. Ella buscó con la mirada al jugador que Rusia pidió que le entregue su mensaje.

Perú: donde está?

Perú volteo y sintió una navaja en su cuello.

Perú: Chile... cuanto tiempo.

Chile: Perú? Qué haces aquí? Deberías estar con tu dueño.

Perú: vengo entregar un mensaje. Mi amo pide una alianza con el tuyo.

Alemania: -camina hacia las chicas- Chile suéltala.

Chile: lo siento amo. -quita la navaja del cuello de Perú-

Perú soltó una suspiro de alivio para luego acercarse a Alemania. Ella se arrodilló frente a él en modo de respeto.

Perú: -con la cabeza abajo- señor. Mi amo le pide una alianza.

Alemania: Claro. Me encantaría hablar de alianzas. Informarle que la alianza se realizará en el centro de la isla principal mañana.

Perú: - se levanta- entendido. -alza vuelo y se va-

Rusia estaba viendo el paisaje. Él aún tenía la pregunta de si quedarse o irse. Le daría una oportunidad a aquel lugar. Tal vez una semana. Al menos lo suficiente para olvidar sus problemas.

Perú: -aterriza y automáticamente se arrodilla- mi amo. El jugador de la plataforma 43 aceptó su invitación. Él dice que harán el trato en el centro de la isla principal mañana.

Rusia:-frío- Bien hecho Perú. Vámonos.

Ambos caminaban por las calles de la isla. Habían vendedores de cualquier tipo. Ya parecía un mercado. Rusia solo pensaba en encontrarse con Alemania e idear un plan. Por otro lado Perú solo lo seguía sin decir nada hasta que vio como la vida de Rusia bajaba de poco en poco.

Perú: em... amo. No es por ser chismosa o algo parecido pero, usted a comido algo?

Rusia empezó a recordar. No había comida algo desde él almuerzo.

Rusia: no y que importa. Debemos llegar al centro rápido.

Perú: mi señor creo que debemos descansar y comprar algo pa...

Rusia: estoy bien! -escucha rugir su barriga y se sonroja por la vergüenza-

Perú: -se aguanta la risa- podemos comprar un pan ahí. Tal vez así le baje el hambre.

Rusia solo asintió y se fue a comprar un pan. Él escogió uno pequeño para no gastar tanto dinero. Cuando volteo a ver a Perú está se quedó viendo al pan.

Rusia: que te pasa?

Perú:-reacciona- p-perdón. Yo solo... -ruge su pancita.

Rusia: tienes hambre verdad?

Perú: y-yo lo siento. No es necesario que... -atrapa un pan que Rusia le dio-

Rusia: toma.

Perú vio el pan con alegría para luego ver a Rusia. Este se sonrojó al verla con esa sonrisa tan tierna.

Rusia: Entonces que? Te lo vas a comer o que?

Perú: así. Muchas gracias amo. -muerde su pan-

Rusia: Rusia. Solo llámame Rusia. Es incómodo que me llames amo.

Perú: oh... perdón a. Digo Rusia.