❝When the sun comes down❞；❨✧ Chensung ❩

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『 Chenle 』

Llegamos a Shanghai sin problema alguno y fuimos directamente al hospital donde se encontraban mi hermano, su esposa y mi sobrino. No nos dejaron ingresar a todos al mismo tiempo, así que nos dejaron a Renjun, a mi hermano y a mí afuera. Mi hermano nos contó que casi se desmaya al ver al bebé salir y nosotros nos reímos bajito. Se notaba que estaba feliz, la sonrisa no se la quitaba nadie. Menos a mis padres, que salieron de la habitación con una sonrisa de oreja a oreja. Nos dejaron pasar a Renjun y a mí y ahí estaba mi cuñada, semi-recostada en la camilla mientras sostenía a mi sobrino. Nos acercamos para saludarla y felicitarla y nos dejó cargar al pequeño. A mí me costó un poco, pero a Renjun no le costó para nada. 

Por suerte traía mi cámara instantánea, así que le pedí permiso a mi cuñada para sacarle una foto a Renjun con el bebé. Incluso ella se ofreció después para sacarnos una foto a los tres, después de todo éramos los menores de la familia. Luego Renjun le devolvió al pequeño, y ahí aproveché de sacarle una foto a ella. Guardé todas las fotos en mi bolsillo, antes de despedirme y salir junto a Renjun cuando la enfermera nos dijo que era hora de que el bebé descansara.

Mis padres habían planeado quedarse hasta la semana siguiente y nos dijeron que tenían todo arreglado, así que no habría problema con ello. Volvimos a nuestra casa anterior y limpiamos todos juntos, como solíamos hacer. Yo estaba barriendo cuando escuché mi teléfono sonar. Renjun estaba más cerca, así que le pedí que respondiera. Los únicos que llamarían eran los chicos del instituto y aún si Jisung se decidía a llamarme, Renjun ya sabía todo.

—Es un facetime de Nana. Y nosotros llenos de polvo. —Lo escuché reírse y levanté la mirada del suelo para verlo arreglarse el cabello antes de contestar y ponerlo en altavoz—. Hola, Nana.

—Bien, bien. Excelente ahora que te veo. —Podía apostar a que Nana le había guiñado un ojo a Renjun justo después de decir eso. Y también podía jurar que el quejido que se escuchó después fue el de Jeno—. ¿Está Chenle contigo ahora mismo?

—Sí. —Y Renjun se dio la vuelta, dejando así a Nana que me viera. Le saludé con un movimiento de mano y me apoyé en la escoba.

—Genial. Bueno, quizás no es tan genial. Uh... —Noté que la voz de Nana había pasado de ser la animada y amistosa de siempre a una más seria y tranquila—. Bueno, estamos en el hospital. Jisung tuvo un accidente.

Cuando escuché eso sentí un vacío en el estómago. ¿Jisung sufrió un accidente? Me acerqué rápidamente hasta donde estaba Renjun.

—Siento darles esta noticia cuando recién llegaron a Shanghai a conocer a su sobrino. —Nana se escuchaba totalmente sincero, casi podía ver el arrepentimiento en su rostro—. Pero tenía que avisarles... Avisarte a ti, Chenle. Después de todo es a ti a quien le gusta Jisung y quien más ha hablado con él este último tiempo.

—Entiendo, Nana. Gracias por avisarme. —Sonreí. Sonreí como si eso me ayudara a camuflar la tristeza y la preocupación que estaba sintiendo en esos momentos—. No vamos a volver hasta la próxima semana, así que ¿podrías decirme cómo está cada que lo veas?

—Te mantendré informado. ¡Los vamos a extrañar, chicos!

—Solo es una semana, no exageres, Nana. —Lo detuvo Renjun, sacudiendo la cabeza—. Tenemos que seguir limpiando. Hablamos luego. —Y Renjun se encargó de colgar, antes de darse la vuelta y abrazarme. No me dio ni tiempo de dejar la escoba a un lado.

—Renjun, estoy bien. ¿Por qué me estás abrazando? —Reí bajito, intentando disimular. Pero eso no hizo que Renjun me soltara.

—Sé que no estás bien, Chenle. No te preocupes mucho, ¿sí? De seguro no fue nada tan grave. Volverás a verlo. —Y Renjun me soltó antes de darme unas palmaditas en el hombro.

No me quedaba más que creerle y seguir limpiando.

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¡Hola! Mi propuesta esta vez es hacer capítulos cortitos. Espero que aún así les gusten. <3