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“El alcohol y las malas decisiones no deberían pasar tanto tiempo juntos.”

”

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Suspiro enojado mientras movia sus pies avanzando por las calles,  sentía unas molestas punzadas en su cabeza que habian estado matándolo desde hace dos días.  Luego de la fiesta de Naruto,  el joven Hyuga se habia despertado en su cuarto con un horrible dolor de cabeza sin poder recordar nada de la noche anterior.

O al menos eso es lo que les dijo a todos.

Si bien no recordaba casi nada luego de haber bebido esas cervezas con Akari,  había un único recuerdo que lo estaba atormentando.  No era idiota,  sabia muy bien lo que habia hecho,  pero aun asi no se sintió capaz de contarle a su novia lo que hizo mientras ella iba al baño.

No pudo contarle que beso a Kame.

Porque si,  Neji recordaba demasiado bien el momento en el que se acerco a la bonita chica bicolor y junto sus labios,  sin que ella se lo pudiera esperar. No obstante eso no era lo que mas lo perturbaba,  haber besado a su mejor amiga era un problema?  Tal vez,  pero lo que realmente le asustaba era que...

Le habia gustado.

Y en esos momento queria darse la cabeza contra la pared por siquiera desear volver a besarla,  es que era inexplicable la sensación que tuvo al hacerlo.  Era como si toda su vida hubiera estado vacio,  y con solo tenerla bajo sus brazos ese vacio era completamente llenado.

Y le asustó saber que ese sentimiento no solo aparecía cuando la besó.

Era un completó estúpido por haberse dado cuenta tan tarde,  porque ahora él tenia una mujer a la que queria muchísimo,  pero tuvo que besar a Kame y engañar a su novia, para darse cuenta de lo que estaba haciéndo mal.

Neji adoraba a Akari,  pero no la amaba.

A quien en verdad amaba era a esa amable chica de orbes grises. 

Y sinceramente su maldita resaca, que parecía no quere irse,  no ayudaba mucho a su sentir.  Aunque en realidad fue gracias a los síntomas después de esa borrachera,  que él pudo quedarse en cama y pensar con claridad lo que sentia.

Ahora que tenia todo en claro, debia pensar en que hacer.

Pero por el momento,  lo único que estaba y queria hacer era ir a la farmacia del centro, comprar unas malditas pastillas para su malestar e irse a dormir un dia enteró.  Por eso es que el castaño se encontraba caminando por las calles de Konoha cuando el destino quiso jugarle una mala pasada.

-Oh!  Hola Neji-san! -Saludó la muchacha  de cabellos mitad blancos y mitad rosas.

Sus ojos perla-lila rapidamente se dirigieron a la dirección donde escuchó esa tan conocida voz,  mientras que por dentro trataba de calmar esos repentinos nervios que aparecieron con solo oirla. 

Disimuló la sorpresa que sintió al ver que su mejor amiga no se encontraba sola,  de hecho estaba abrazada al brazo del joven Nara que la acompañaba. Una punzada en su pecho,  y un irracional enojo le advirtió que por el momento,  aunque tenga miles de dudas,  debia mantener su distancia.

-Kame,  Shikamaru. -saludo de forma seria,  pero casi gruñendo el nombre del chico que se encontraba tan pegado a la Nakamo.

Quién demonios era Shikamaru para pasearse por las calles de Konoha junto con Kame? 

-Hola -saludo de forma vaga el pelinegro.

-Qué hacen?  -Pregunto repentinamente el Hyuga luego de unos segundos en un incómodo silenció.
Pero antes de que la muchacha pudiera responder algo,  el chico de ojos avellana se adelanto a contestar.

-Estamos en una cita

Dudo en creerle,  él sabia muy bien que el Nara era inteligente y que seguramente notó que había visto, por mucho tiempo, el agarré que mantenia la joven en el pelinegro. Pero esas dudas se disiparon con el fuerte sonrojó que se apodero de la bicolor,  seguido de algo que la chica susurró en el oído de Shikamaru.

-Que fastidio... -comentó con pereza el Nara- Nos vemos Neji,  debemos irnos. 

Seguido de ese saludo,  el Hyuga se quedó parado en medio de la calle mientras veia a sus amigos irse en su "cita".

Ahora sabia que no solo debia comprar su medicina,  sino que también debía pedirle a su prima algun té para calmar sus celos.

long life [Neji Hyuga]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora