ｌｏｎｇ ｌｉｆｅ [Neji Hyuga]

[40]

“Sin duda la llegada más inesperada fue la tuya.”

-Aaah Boruto-chan es tan lindo~

Hinata río ante el comentario de su prima-cuñada,  quién sostenia en sus brazos al pequeño bebé de rubios cabellos.

-Boruto-chan,  pronto tendras un primita con quién jugar!  -chilló la bicolor esparciéndo besitos en las mejillas del ojiceleste.

Derrepente se oyó un gran estruendo que venia de la parte trasera de la casa,  esto hizo que ambas mujeres quienes descansaban sobre el sillon se inclinarán un poco hacia adelante para ver,  por la ventana,  a los culpables del ruído.

-Naruto te dije que lo sostengas.  -se quejó el castaño.

-Eso intentaba! -chilló el rubio.

Las dos muchachas se miraron y rieron bajito al oir como sus esposo discutían,  al parecer el armar un cantero para flores era más difícil de lo que pensaban.  Pues habian notado que ambos jóvenes,  quienes eran realmente fuertes a la hora de luchar,  estaban tardando mucho en terminar el cantero,  el cual empezaron durante la mañana y ya era pasado el mediodía. 

Ese sábado Neji y Kame habian ido a visitar a la pequeña familia Uzumaki, pues Hinata los habia invitado a almorzar juntos. Apenas llegaron lo primero que notaron fue que el rubio mayor se encontraba sentado en el suelo con varias herramientas y tablas a su alrededor, luego de intercambiar un par de palabras los Hyuga supieron que el joven Uzumaki intentaba armar un cantero para su esposa.

"No es tan dificil crear uno." fue lo que habis contestado el de orbes perla-lila para luego arremangarse las mangas de su camisa y acercarse a las herramientas intentando ayudar al menor. Pero la realidad es que ya llevaban dos horas tratando de darle forma a esas maderas.

Por eso ahora ambas mujeres decidieron dejar su charla para ayudar a los varones que no lograban armar ese bendito cantero.

-Boruto-chan, estudia mucho para no llegar a ser como esos dos. -comento la mitad pelirosa mitad peliblanca entre risas.

-No crei que seria tan dificil armarlo, creo que hubiera sido mejor comprar uno. -comento preocupada la peliazul mientras veia a su esposo y primo quienes al parecer se habian rendido.

-Tonterias! -rio la bicolor.- Es solo clavar unas tablas, nada de otro mundo.

Al oir eso ambos jovenes que estaban sentados en el piso la miraron de mala forma, segun ambos ese cantero era la mision mas dificl que habian tenido.

Por otro lado Kame entrego al bebé que cargaba en sus brazos a su madre, para luego acercarse a las hereamientas. Tomo dos tablas de madera, algunos clavos y el martillo.

-Kame-chan que harás? -cuestiono Naruto mirandola con curiosidad.

-El cantero. -respondio con simpleza.

-Suelta eso, no puedes hacer fuerza. - la regaño su esposo quien miraba su vientre de ocho meses.

-Shh -chisto.- Soy una Kunoichi, puedo hacer lo que sea. -sonrio.

Solo le tomo un par de minutoa lograr clavar esas cuatro tablas, creando un cuadrado perfecto, para luego agregarle una especie de patitas las cuales obligo a los muchachos a clavar en el suelo donde colocarian el cantero.  Cuando término Hinata aplaudió emocionada al ver lo bonito que se veia,  y comenzo a pensar que flores podria sembrar allí.

-Kame-chan haces magia!  -comento el rubio al ver lo que la muchacha habia hecho.

-No era tan difícil.. -río mientras miraba el rostro serio de su marido.- que pasa cariño?  Te gano una embarazada?  -bromeó.

-Ha ha ha.  -Rio falsamente el Hyuga.

-Oh vamos!  Admite que estas orgulloso de mi.  -río mientras se acercaba al castaño para abrazarlo.

-Tal vez.  -comentó para luego dejarle un beso en la coronilla de su cabeza. 

La muchacha bicolor iba a refutar,  pero enmudeció apenas sintió un líquido caer entre sus piernas.  Miro hacia el suelo notando que que de la falda de su vestido caian unas gotas del liquido admiotico,  rapidamente alzo la vista viendo con panico a los presentes que hablaban sobre que sabe quien.

-Chicos. -llamo la atención de los presentes.- Se me rompio la bolsa.