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Despertó por el olor de la pizza, no la había probado hace mucho. Se había estado alimentado de sopa instantánea los últimos días. La pizza sonaba bastante bien justo ahora. Estuvo a punto de gritar el nombre de su hermano para que se la trajera a su habitación porque se sentía demasiado débil para levantarse cuando abrió los ojos.

Esta no era su habitación. Esta no era su casa.

La sabanas eran grises, las paredes eran grises, era una habitación bastante deprimente. Reviso que toda su ropa estuviera en su lugar pero solo se encontró con un pijama que no era suyo, ni siquiera coincidía en la talla...

¿Donde demonios estaba?

Trató de recordar que había pasado pero termino estornudando sintiendose aún más débil.

-Mierda, estoy enfermo - Jiang Cheng odiaba estar enfermo.

-Ya estás despierto - Se sobresalto al escuchar la voz y luego más al ver a su maestro. ¿Que mierda? El recuerdo de lo que había hecho le llegó de pronto, pudo sentir su cara ponerse roja en un instante. Le dio la espalda al hombre mientras murmuraba maldiciones para sí mismo.

-Mierda. Mierda. Mierda. ¿Que demonios te pasa Jiang Cheng? ¿Te volviste loco?

-¿Quieres comer? - Se dio la vuelta por reflejo y por hambre, sí que quería - Solo haz dormido un par de horas y pedí pizza porque no pude cocinar. ¿Te gusta? - Jiang Cheng no sabía que responder, aún estaba avergonzado - Yo, por cierto, lamento lo de tu ropa. Estaba mojada así que...

-¿Usted me desnudó? - Se encontró preguntando antes de pensar, quiso cubrirse con las sabanas de inmediato.

-No, no, no me atrevería. Mi vecina lo hizo, ella es enfermera. También te revisó, dijo que estarás bien si tomas tus medicinas lo más pronto posible.

-Yo... - El alivio lo inundó, ya era suficiente que estuviera en casa del mayor.

-Ya las compré, solo come antes de tomarlas. Te espero ¿Esta bien? - Jiang Cheng asintió luego de un largo rato. No vio al otro irse pero pudo sentirlo.

Todos decían que Lan Xichen era el mejor maestro del mundo, Jiang Cheng se aferró a esos comentarios, sin embargo solo comería y luego se iría a su casa... Donde nadie estaba esperando por él.

.・゜゜・

Lan Xichen quería hacer muchas preguntas pero se contuvo, trato de comer con normalidad y no mirar tanto a su alumno. Algo que lo aliviaba es que no presentaba daños físicos, le había pedido por favor a Xuan Lu que lo revisara y su amiga le contestó que todo estaba bien, eso era un gran alivio. Entonces algo más pasaba... Xichen se encargaría de ayudar a Jiang Cheng. Eso ya lo tenía claro.

-Profesor - Fue dicho muy bajo, si Xichen no hubiera estado prestandole atención no lo habría notado. En cambio si que lo estaba haciendo así que respondió de inmediato.

-¿Que necesitas? - El rostro de su alumno de contrajo y sus mejillas se sonrojaron.

-Lamento que.. Yo, lo de hace rato. Bueno, fue... Lo siento - Dijo avergonzado, Xichen lo evaluó sin saber que responder.

-Quiero ayudarte - La vergüenza de Jiang Cheng fue suplantada por molestia.

-Ya le dije que no se meta - Fue señalado con la pizza y no pudo evitar reír. Nunca un alumno lo había tratado con tanta confianza, se sentía bien. Jiang Cheng lo miro con más molestia.

-¿Por qué dejaste el proyecto de primavera? - La pregunta descoloco al menor.

-Nadie irá a verme - Parecía una respuesta sincera y simple.

-Yo iré - El rostro del menor volvió a sonrojarse, Xichen se preguntó cómo se verían de esta forma. Estaba siendo inapropiado - Soy tu maestro, estaré orgulloso de lo que hagas - Las manos de Jiang Cheng temblaron, miro a Xichen con intensidad - Quiero ayudarte.

-¿Puede conseguirme un trabajo? - Había cierta desesperación en su voz, Xichen evaluó a su alumno... Luego asintió.

-¿Tienes 18? - Jiang Cheng asintió de inmediato - Necesito a alguien que organice un almacén, voy a pagarte y solo debes ir cuando tengas tiempo pero debes tener listo para dentro de unas semanas ¿Crees que... - Jiang Cheng asintió sin dejarlo terminar, su mirada estaba más calmada de cierta forma.  Terminaron de comer en silencio pero mirandose de vez en cuando, no era incómodo pero tampoco era cómodo... - Te llevaré a casa - Le dijo al mismo tiempo que le entregaba sus medicinas.

-No.

-No voy a dejarte ir solo a estas horas Jiang Cheng.

-He estado...

-Por favor no discutas y dejame llevarte - Le ofreció su mejor sonrisa y trato de imponerse un poco, no pensaba dejar al menor irse así y ya. Jiang Cheng fue insistente pero al final termino subiendo al auto de Xichen - Gracias por aceptar.

-Usted prácticamente me obligó - Xichen solo le sonrió. Ahora el menor ya llevaba su ropa seca y como nueva.

Llegaron casi 20 minutos después. Las luces estaban apagadas y habían pocas personas caminando por esa calle.

-Deberías llamar a tus padres para que te abran... - El cuerpo de Jiang Cheng se tensó, fue algo bastante obvio.

-Tengo llave, además perdí mi teléfono... - Xichen asintió ante la explicación, ahora había descubierto algo más. Sujeto a Jiang Cheng antes que se fuera.

-¿Como está Wei Ying? - El rostro de su alumno se suavizó, nombrar a su hermano estaba bien.

-Bien, aunque el idiota no deja de llamar. Cualquiera pensaría que siempre estaría ocupado - Xichen volvió a reír ante sus palabras, el menor parecía no darse cuenta de los términos que usaba.

-¿Ustedes hablan muy seguido? - Jiang Cheng se relajó en su asiento.

-Si, aunque últimamente... - Se calló y volvió a perderse en sus pensamientos por unos segundos - No importa.

-¿Tienes más hermanos? - Xichen ya sabía la respuesta, los había visto en los eventos de la escuela. Un detalle paso por su memoria, había visto a los hermanos acompañados pero nunca a sus padres.

-Mi hermana mayor, fue a la Universidad - Eso significaba que Jiang Cheng estaba solo. Xichen no estaba seguro los progenitores  contaban...

-¿Y hablas muy seguido con ella? - Jiang Cheng volvió a relajarse, pero su expresión fue de tristeza.

-No, JieJie si esta ocupada, me llama solo una vez a la semana. La extraño - Pareció a punto de hacer un berrinche, a Xichen le gusto esta nueva faceta.

-¿Cuando volverán?

-No lo sé ¿Navidad?

-¿Que hay de tus padres? - Jiang Cheng no lo miro pero Xichen supo que algo había cambiado en su mirada.

-Ya debo irme.

-Te veo en clase - El otro asintió y salió del auto con rapidez, Xichen no se fue hasta que lo vio entrar.

¿Nuestras estrellas coinciden? [Xicheng] #PGP2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora