Él no sabía donde estaba, tampoco sabía como había llegado, mucho menos quien era ese niño que decía ser él. Pero, lo que en verdad lo extrañaba, era que no sabía quien era, o de donde era.
¿Quienes eran esas personas a las que de pronto quería llam...
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—Quiero hacer algo.
El niño lo mira cuando dice eso, después de haber visto el recuerdo de su mamá, había estado sentado callado, tratando de repetirlo, pero ahora estaba... Aburrido, le parecía que esa era la palabra.
—Podemos jugar, antes jugabas en tu habitación.
—¿Que es una... Habilación?
—Habitación —El niño se levantó y lo miró con una pequeña sonrisa—. Tenía paredes... Creo que eran azules y una cama, también habían juguetes.
—Oh —Él cerró los ojos, tal vez podría recordar eso de habitación.
Se concentró y lo vió, cuatro paredes de color azúl cielo, una puerta café y una ventana con cortinas cafés. Una cama pequeña, pero perfecta para su tamaño y una caja llena de juguetes, un mueble donde estaba su ropa y en el cieloraso, muchas estrellas pintadas.
Pudo verse jugando allí, sonrió un poco.
—Mira —le volvió a decir el niño, y así como cuando descubrió lo de la Mamá, su habitación estaba alrededor de él.
Pero algo andaba mal, la puerta se abrió, y aunque solo se veía el blanco del otro lado, entró alguien allí. A la chica de piel clara la reconoció como Vanessa, la Hermana mayor. Su rostro se veía más blanco y estaba hecha mocos.
—El monstruo del miedo —dijo el niño en un susurro, arrinconándose con la piernas en el pecho.
Se preguntó si de verdad las personas como la Hermana mayor, que podían ahuyentar al monstruo del miedo, podían también ser atacadas por él.
En lo que a mi respecta, el capítulo de "Mamá" y los que vienen después de este son mis favoritos. Bueno, el miércoles sabrán más de nuestro niño desconocido. Una pista... EL NOMBRE.
