¿Crees que es fácil cuidar niños? Para _________ no lo era, ya que nunca en su vida había cuidado uno.
¿Pero qué tal si tiene que cuidar a cinco chicos? ¿Y si son todos adolescentes? ¿Y si le comienzan a gustar los cinco a la vez?
No, ella nunca i...
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«¿¡Cómo?!»
Ese encantador chico, que no me conocía ni hace dos minutos y apenas sabía mi nombre, quería salir a tomar algo y "quitarse la timidez".
«¿A qué se refiere con eso?»
-Ah... Disculpa pero yo no tengo intenciones de... Nada, en realidad.
-¿Fui muy directo? -preguntó Johnny preocupado borrando su sonrisa-. Ay, no, lo siento, no fue mi intención. Solo quería ser amable...
La verdad no entendía muy bien qué estaba pasando pero Johnny se veía sincero. Se estaba rascando la mejilla con nerviosismo y había apartado la mirada rápidamente.
«Debo admitir que cuando está serio se ve mucho más maduro».
-Discúlpame a mí -dije sintiéndome mal por su reacción-. Estoy... Algo alterada, es todo.
Miraba al suelo mientras mis piernas me llevaban de camino a casa.
-Te ves algo disgustada, ¿pasó algo en especial?
-Sí, pero no tengo ganas de hablar de eso -dije desanimada.
-Es entendible. Yo tampoco le contaría a un completo desconocido algo que haya pasado en mi casa.
-¿Quién te dijo que pasó en mi casa? -pregunté confundida pero algo sorprendida mientras lo miraba con atención.
Levantó los hombros sin dejar de caminar.
-Lo supuse, y al parecer acerté.
-Sí...
-No te voy a obligar a que me cuentes nada. Pero estoy aquí si necesitas ayuda...
-Gracias.
Ya a unas dos cuadras de casa nos encontramos con Yeonjun que venía mirando hacia su alrededor como buscando algo. Cuando me vio, se apresuró en cruzar la calle que nos separaba.
-Al fin te encuentro -suspiró Yeonjun mirándome con preocupación.
-¿Me estabas buscando? -pregunté confundida.
-¿Quién es él? -preguntaron los dos chicos a la vez mientras se miraban con escepticismo.
-Ah... Yeonjun, él es Johnny, el hermano de Jaemin.
-¿El cartero? -preguntó él levantando una ceja con superioridad.
-Sí, el único -sonrió Johnny con el mismo aire que Yeonjun.
-¿Cómo va tu trabajo? Como ahora las cosas se hacen por teléfono supongo que no tienes que cumplir mucha demanda -se burló el chico cruzándose de brazos.
-¡Yeonjun! -reproché.
-Bueno... Al menos yo sí tengo trabajo -murmuró Johnny.
