•8. El duelo•

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Cambio realizado el 22/02/2021

Nota: Lo que no está entre paréntesis se oye en OFF. Los paréntesis describen lo que están viendo en la pantalla.

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La mañana siguiente todos se levantaron de muy buen humor. Severus para inaugurar su nueva amistad con los merodeadores compartió cuarto con ellos. Pasaron la noche hablando de todo lo que se vio. Los cuatro decidieron que los Dursley no se iban a ir de rositas. No tendrían piedad. Se pasaron la noche planeando su venganza. El resultado fue cuatro adolescentes con insomnio, pero con una sonrisa satisfecha al ver todo lo que tenían preparado para aquellos animales. Al sentarse en el gran comedor, se atiborraron de café para así evitar quedarse dormidos.

Todos se sorprendieron al ver a Severus junto a los merodeadores. Aquello era surrealista (no saben que la escritora está en 2020 y que ya nada le sorprende, estoy editando la historia 2021). Los profesores sonreían contentos. Quizás el que más feliz estaba era Albus al ver como hay alumnos que están abandonando la oscuridad, el odio y el rencor para comenzar de nuevo.

Los señores Evans miraban a su hija y su amigo con una gran sonrisa. Les gustó ver que los jóvenes volvían a ser amigo como antes. Los Potter miraban a sus hijos con orgullo. Fueron capaces de reconocer sus errores y aquello era muy importante.

Narcisa y Regulus miraban aquella escena con anhelo. Ellos también querían abandonar la oscuridad y volver a acercarse a su familia.

Scarlett miraba emocionada a su familia. Aquello era con lo que siempre soñó.

- Bien hecho, pequeña – Le felicitó Charlie mirándola con admiración. Charlie quería sentarse con su pequeña. Ya no aguantaba más. Necesitaba sentirla cerca. Todavía recuerdo como estuvo a punto de besarla aquel día. Ya no puede más. Quiere besarla, quiere declararle su amor y estar con ella. Solo esperaba que ella correspondiera a sus sentimientos.

- Yo no hice nada – Dijo Scarlett.

- Sí, hiciste créeme. Tú eres capaz de traer luz al lugar donde vayas – Dijo Charlie mientras acariciaba el cabello de Scarlett quien se sonrojó.

Lily miraba sonriente a su hija y aquel joven que parece tan enamorado de su pequeña. Necesitaba tener una charla con su hija para que le contara sus sentimientos. Sin embargo, había cinco personas que no estaban nada felices con dicho acercamiento. Cuatro de ellos se estaban planteando torturar al pelirrojo por acercarse a su pequeña niña, mientras que otro sentía que un fuego crecía en su interior. Él amaba a Scarlett y soñaba con que ella fuera suya algún día. No obstante, sabía que, si ella no le llegaba a amar, él no la abandonaría ni se alejaría. Estaría a su lado como siempre le prometió.

- Señores, creo que será mejor que retomemos – Anunció Albus Dumbledore.

Draco abrió los ojos asustado. Su madre definitivamente le matará. Decidido a salvar su vida, besó a su novia como despedida y se fue a sentar junto con Scarlett.

- Con permiso – Dijo antes de sentarse al lado de Scarlett.

Los de la segunda generación miraron divertidos a Draco mientras intentaban contener sus risas. Los de la primera generación estaban sorprendidos. Narcisa miraba a su hijo con los ojos entrecerrados. ¡A saber qué perlitas habrá soltado su hijo para alejarse de ella!

- ¿Tienes miedo, dragón? – Preguntó Scarlett. El rubio asintió.

Charlie, al ver que había poco espacio, sentó a Scarlett en su regazo. Si las miradas mataran, el domador de dragones ya estaría fulminado en el suelo. Scarlett estaba totalmente sonrojada. Molly se fijó en aquel gesto de su hijo. ¿Tendría algo con Scarlett? La mujer ya estaba ilusionada con un posible romance entre su bebé y aquella pequeña pelirroja a la que llegó a tener tanto cariño en tan poco tiempo. Lily también los miraba con ternura. Ella estaba segura de que esos dos tenían sentimientos el uno por el otro.

La historia de Scarlett Potter || Fem HarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora