La historia de Scarlett Potter || Fem Harry

•La segunda generación se presenta•

Dumbledore, al ver que todos se instalaron, puso al día a los invitados explicándoles el contenido de la carta y anunció el comienzo de las presentaciones.

- Ahora, vamos a dejar que nuestros invitados del futuro se presenten.

El primer encapuchado se puso delante de la mesa de los profesores y comenzó a presentarse....

Cuando el chico se quitó la capucha, se pudo ver a un chico alto, guapo y musculoso. A pesar de tener unas cicatrices en su cara, las chicas no pudieran evitar suspirar al verlo. Molly comenzó a prestar mucha atención, sabía que aquel chico era su hijo, pero, le preocupaban aquellas cicatrices.

- Hola, pasado. Yo soy William Arthur Weasley pero todos me llaman Bill. Tengo 29 años y trabajo en Gringotts como rompedor de maldiciones. – Molly apretó la mano de Arthur, a su hijo no se le podía ocurrir profesión más peligrosa. – Lo siento, mami pero amo mi trabajo. – La mujer sonrió resignada – Bien sigo, cuando estuve en Hogwarts fui Gryffindor, fui premio anual y prefecto.

La casa de Gryffindor aplaudió emocionada. Los hermanos Prewett llevaron una mano a sus pechos escandalizados haciendo que Molly pusiera los ojos en blanco y Arthur soltara una carcajada. Los del futuro vieron aquella interacción con tristeza, sobre todo, George quien echaba mucho de menos a su gemelo.

- Sobrino, ¿tienes novia? – Preguntó Fabian guiñándole un ojo.

- Hmmm, novia no – todas las chicas se emocionaron. Cierta rubia embarazada gruñó. – Tengo esposa y la amo – Todas las chicas que se habían alegrado se desanimaron. - Bueno creo que eso es todo sobre mí.

- Cielo, ¿cómo te hiciste esas cicatrices? – Preguntó Molly.

- Se sabrá por qué las tengo cuando veamos los recuerdos. – Se limitó a responder – Ahora que pase el siguiente.

El siguiente chico también era igual de apuesto y guapo como el anterior. Tenía el pelo pelirrojo, unos bellos ojos azules y un cuerpo fornido y atractivo. Se podían ver algunas quemaduras en sus brazos.

- Hola a todos, yo soy Charles Weasley pero todo el mundo me llama Charlie. Tengo 25 años y soy ... hmmm cuidadordedragones – Dijo con rapidez.

- ¿Cómo? – Preguntó Molly confundida al no entender lo que su pequeño anunció.

- Soy cuidador de criaturas mágicas, especialmente, cuido de... hmmm... dragones. – Eso bastó para que Molly se desmayara. Tras unos minutos, en los que varios ayudaron a Molly a despertar, esta por fin abrió los ojos. – Pero ahora ya no trabajo eso. Así que tranquila. – Le intentó tranquilizar Charlie mientras la abrazaba.

- Me queréis matar – Dijo Molly mientras intentaba respirar bien. Las madres presentes la veían con pena. Ellas se preocupaban mucho por sus hijos y entendían la reacción de la mujer al oír sobre cómo su hijo escogió un estilo de vida tan peligroso.

Un chico del futuro le dio un golpe a Charlie.

- Auch – Se quejó el cuidador de dragones.

- Como sigáis así, no vamos a nacer – le susurró George a su hermano mayor. Molly estaba embarazada de nuevo, esta vez de gemelos. Uno de ellos estaba ahí esperando su turno para presentarse sin saber cómo justificar la ausencia de su hermano y sin saber cómo su madre se tomará la muerte de su alma gemela cuando llegue el momento.

Cuando Molly se tranquilizó, el chico siguió su presentación.

- Cuando fui a Hogwarts, fui Gryffindor. También jugué en el equipo de Quidditch de mi casa como buscador, en mis últimos años fui capitán del equipo. – Anunció haciendo que la mesa de los leones le vitoreara sobre todo James. Charlie sonrió, el chico se iba a llevar una gran sorpresa. – Bueno eso es todo sobre mí. ¡Qué pase el siguiente!