Soulmate [Hwang Hyunjin]

Capítulo XV Una linda Noche

  La noche era algo fría y la luna había salido más temprano el día de hoy, iluminaba la acera con su hermosa luz que ayudaba a caminar mejor en las oscuras calles, las cuales, aunque eran iluminadas por las farolas que se encontraban en la calle, la luz de la luna llenaba el lugar. Pateaba de vez en cuando las pequeñas piedras que me topaba camino a casa al mismo tiempo que jugaba con el anillo que de encontraba en mi mano derecha, justo en el dedo anular.

   Mis manos metidas en los bolsillos de mi sudadera en donde trataba de agarrar calor en medio de el frío que recorría mi cuerpo, el humo que salía de mi boca cuando decía alguna palabra y las pequeñas estrellas que decoraban el cielo, hacían que fuera una noche muy hermosa a decir verdad.

+Entonces, ¿Eres amigo de mi hermano? -preguntó Myeong mientras caminaba a mi lado-

  Myeong hizo de la suyas y me convenció para acompañarme hacía casa, me negué varias veces pero al final ella fue muy insistente así que no me quedó otra que aceptar, aunque la idea de que ella se fuera sola no me gustaba del todo.

  Cuando la vi entrar a la casa mis nervios volvieron y sentí como mi cuerpo se tensaba hasta que ella sonrió saludandome y preguntando la razón de mi presencia en su casa, le comenté que soy amigo de Seungmin que venía a visitarlo porque teníamos mucha tarea que hacer. Quería decirle la verdad, pero tenía vergüenza de decirle que venía porque necesitaba clases particulares para pasar mis exámenes de matemáticas.

  La miré mientras caminábamos y asentí ante su pregunta

+Sí, él y yo somos amigos desde que llegué a la escuela

+Debí suponerlo, él comentó que había llegado un chico nuevo que estaba con él y su grupo de amigos -me miró- pero jamás me comentó que era un chico tan raro

  Sonreí mientras negaba con la cabeza

+¿Piensas que soy raro? -pregunté haciendo un pequeño puchero-

  Myeong soltó una pequeña risa mientras asentía y dirigía su mirada hacía en frente

+Eres raro, pero eres divertido, me agradas -volvió a mirarme-

+Entonces, ¿Somos amigos? -pregunté tímidamente, me ponía nervioso el saber su respuesta-

+¿No éramos amigos ya? -se cruzó de brazos-

+¿Oh? Ah, sí! Di-... digo -bajé la mirada avergonzado ante mi reacción provocando que Myeong comenzara a reír, sonreí y la miré- yo...yo pensaba que no lo éramos, no sabía si querías ser mi amiga

+Mmm, ser amiga del chico que me tiró encima una sustancia de laboratorio y me salvó de ser atropellada por un carro -me miró- suena tentador

  Se giró hacía mí y extendió su mano, saqué inmediatamente mis manos de mis bolsillos y tomé la suya la cual estaba helada gracias al frío, fruncí levemente el ceño e hice el intento de quitarme mi sudadera para dársela pero ella tomó fuerte mi mano evitandolo. La miré y ella estaba negando con la cabeza mientras me regalaba una pequeña sonrisa que se curveaba en la comisura izquierda de su labio.

+No lo hagas, estoy bien -asintió- ¿Amigos?

+Amigos -asentí sonriendo mientras acariciaba su mano- tu mano está muy fría -la atrajé hacía mí por impulso y tomé su otra mano, las rodeé con las mías y traté de darles calor-

  Al principio Myeong se veía muy sorprendida al ver como la atrajé hacía mí sin su consentimiento y pude sentir su tensión al ver como tomaba sus manos y las rodeaba con las mías para darles calor. La miré y sonríe para calmarla dándole a entender que no tenía malas intenciones, ella me miró nuestras manos durante unos segundos hasta que comencé a soltar lentamente sus manos después de unos minutos al sentir que ya el frío no era lo que las rodeaba, si no el calor que mis manos pudieron darle.