JHS

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Desde pequeña fuiste muy insegura respecto a muchos aspectos de tu vida. Eso provoco que te volvieras alguien extremadamente introvertida y solitaria.

Tu madre tenia un novio que la mayoría del tiempo trataba de agraciarte, pero no te importaba. 

No te llevabas bien con el mundo. 

Mucho menos lo harías con las personas a tu alrededor. Eso no estaba a discusión.

Ya llevabas años de terapia psicosocial, ya saben, sesiones individuales, grupos de apoyo, múltiples profesionales analizándote, puras pendejadas.

Mas y mas tonterías que aunque si habían disminuido tus crisis de ansiedad, aun no te arrebataban del todo el amor, algo .. digamos .. obsesivo por la comida.

Si, comida.

Pero vamos ¿A quien no le gustan los bocadillos después del almuerzo o la cena?

No conocías a nadie o bueno si. A Haneul del grupo de apoyo. 

Ella tenia anorexia y estaba muy delicada de salud, se podría decir que eran amigas, aunque ella no pudiera salir por estar con internación permanente, aun así la visitabas y podían hablar de temas confidenciales.

Como tu creciente atracción por los chicos.

Vaya, tus hormonas si que estaban alborotadas, fantaseabas con actores, modelos, cantantes, idols, compañeros de curso, profesores, en resumen, cada persona que tuviese pene.

Cuando pequeña, a los 9 años mas o menos, fue la primera y única vez que tuviste un noviecito. 

Aunque a esa edad en lo único que pensaban era en salir a las tiendas de videojuegos, parques de diversiones y locales de caramelos. Si fue un noviazgo, porque habían besos de por medio, además de una petición de su parte para serlo, la cual aceptaste.

Todo respecto a aquel chico lo habías escrito en tu diario. Allí llevabas registro de cada detalle y situaciones de tu vida.

Te lo habían recomendado en las terapias y ahora considerabas que de algo servia. Al menos tenias con que desahogarte, ya que tu madre no te entregaba apoyo alguno y por mas desgracia que suerte, eras hija única.

Cada día te levantabas por la mañana y sacabas de tu armario la ropa mas ancha que lograbas encontrar.

Metros y metros de tela que cubrían tu cuerpo de la vergüenza. 

No estabas obesa, tampoco flaca, tu cuerpo era proporcional, uno convencional para una chica de 17 años. 

Si habían pechos, digo, eras chica, también trasero, un tanto mas voluminoso y formado que tus compañeras de curso y colegio entero, en una circunstancia donde amarías tu cuerpo, se podría decir que tenias uno envidiable, con uno que otro kilito y rollito de mas, pero hermoso, como todos los cuerpos.

Pero tu te considerabas poco mas y una gran vaca de pelo castaño y que ¡Sorpresa! Podía hablar. 

Que gran espectáculo. Una vaca parlanchina. 

Sarcasmo, claro, no hablabas con nadie fuera de Haneul, unas cuantas palabra con tu madre y personas relacionadas a tu trastorno y con ello las terapias.

Una vez que habías escondido tus inseguridades bajo el sin fin de tela, tomabas tu mochila y caminabas al colegio. 

Estaba a 4 cuadras, suficiente para ahorrarte el autobús escolar y con ello a los molestosos del salón.

-¡Hola Dumplin!

-¡Miren todos! ¡Llego fuckT/N! ¡Saluden!

Y allí estaba en parte la raíz de tus miedos y crisis de angustia. 

-Imagina con BTS- (Pedidos Abiertos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora