Tras el descubrimiento de uno de los hijos del sabio de los seis caminos, emprendió el viaje a una de las tantas villas del lugar, en busca de aquel fragmento de chakra que había quedado de la tan devastadora lucha entre la primera Ootsutsuki y su padre.
Se encontraba cerca de una gran montaña, de la cual caía una cascada de aguas cristalinas—Indra ¿Es este el lugar?.— Pregunto el menor con duda.
El mayor asintió levemente, ambos entraron a aquella cueva donde la oscuridad reinaba sobre todas las cosas. Conforme avanzaban las bellas piedras en distintos colores alumbraban el camino.
—Quizas sea está, si es está.— Agarró una roca de un tono rojizo, el mayor negó y mostró otra piedra, un tanto parecida.
—Claramente es está.— Aseguro el mayor.
—Lo dudo, ¡Vamos son idénticas!.— Exclamó con enojo Ashura.
Ambas piedras se juntaron, formando un destello. Los dos hombres fueron segados por la luz blanca.
Abrieron lentamente sus ojos, el aire golpeaba sus caras y al bajar su mirada notaron en la complicada situación que estaban. Si, estaban apunto de estrellarse contra el suelo.
En un rápido movimiento Indra logro agarrarse de una rama y poder caer de pie, mientras que Ashura cayó sobre algo o alguien. —¡Auch! Deberías fijarte por dónde andas.— Grito un rubio, muy adolorido por el golpe.—¡Tu deberías fijarte por dónde andas, nunca sabes cuándo alguien caerá del cielo! Idiota.— Exclamó Ashura igual de adolorido.
—¿Quienes son ustedes?.— Cuestionó la ojijade con un dejé de curiosidad.
—Eso no te incumbe.— Murmuro el pelo castaño algo molestó. Miro atentamente a la mujer, logrando recordar a alguien. —¿Dónde estamos? ¿Cómo regresamos a la villa principal?.
—Eso no te incumbe.— Respondió de forma burlona la mujer. El rubio y el castaño, quienes habían olvidado su pelea comenzaron a reír.
El mayor soltó un bufido y antes de partir la voz de la mujer lo hizo quedarse.
—Konoha, estamos en Konoha.— Sonrió Sakura.
—¡Wa! ¡¿Tu no estabas de viaje?!.— Exclamó Ashura con una risita. —¿Ya has estado aquí? Shio.
La pelirosa los miró confundida.
—Indra estuvo muy preocupado.
—¿Indra Ootsutsuki?.— Cuestiono el rubio, a su mente los sucesos de la 4ta guerra ninja llegaron, así como aquellas palabras de parte del sabio de los seis caminos, hablando sobre los hermanos en lucha, “Ashura e Indra”. —Soy Uzumaki Naruto y ella es Sakura.
—Shio. . .— Murmuró por lo bajo el mayor. Aquel chico no apartaba la vista de aquella mujer que ciertamente le recordaban los sucesos de antaño.
—Haruno Sakura.— Soltó unas risitas nerviosas. —Quizas deberíamos ir con Kakashi-sensei.— Añadió al notar el silencio incómodo que los rodeaba.
—¿Kamashi? Que nombre más extraño.— Dijo Ashura.
—No, Kakashi, el es el sexto Hokage.
Los cuatro jóvenes comenzaron a caminar en dirección de la torre Hokage. Una vez que habían llegado fue Sakura quién pidió el permiso para entrar. —Pasen.
—Kakashi-Sensei.— Saludo Sakura. —Ellos son Ashura e Indra Ootsutsuki.— Una mueca se formó en sus labios al ver qué su Sensei no notaba la indirecta.
Después de algunos minutos, los dos jóvenes faltantes entraron, viendo por fin al tan nombrado Sexto Hokage. —Como ya habrán notado, no son de está época.— Ambos asintieron. —¿Cómo llegaron aquí?.
—¡La piedra! ¡¿Indra donde está la piedra?!.— grito con histeria Ashura.
—Tal para cual.— Murmuró Kakashi. —Bien, creo que tu puedes quedarte con Naruto y tú con Sakura.
—¡¿Conmigo?!.— Pregunto con nerviosismo la pelirosa.
—Veras Sakura-chan, ti vives sola en una casa espaciosa y Naruto ya está comprometido y próximamente a tener un hijo. —Naruto se puso de todos los colores ante la insinuación. —Necesita su espacio. Tómalo como una misión.
—Hai.
—Por eso eres mi alumna favorita.
—¡¿Que?! ¡¿No soy yo?! ¡Es un traicionero!.— A grandes pasos Naruto se marchó junto a Ashura.
Sakura caminaba junto a Indra a lo que sería la próxima casa del mismo. El silencio era incómodo y de cierta manera le recordaba a su viejo amor.
—Llegamos.— La pelirosa abrió la puerta y seguida de ella entro el castaño. —Puedes dormir en esa habitación. Siéntete cómodo.— Asintió.
Al recostarse noto lo cómoda que era, cerró sus ojos y lentamente cayó en un profundo y bello sueño.
—Indra, ¿Estás bien?— pregunto una pelirosa.
—Shio, solo estaba durmiendo, ¿cuando llegaste?— el castaño tallo sus ojos.
—uhm, hace una hora, pero estabas tan cómodo que no te quise despertar, dormías como un lindo bebé—el anterior nombrado se sonrojo levemente.
—Deberiamos comenzar a entrenar.
—¿Eh? Hoy es sábado Indra, hay que disfrutar— el mayor tocó su mentón y comenzó a pensar.
—Solo por qué tú me lo pides, Shio— la pelirosa se sonrojo levemente y asintió —¿Cuál es tu plan?.
—Eh..¡Un picnic!, Sería maravilloso—
—aja, claro— El ootsutsuki río pues su amada no tenía nada en mente.
—¡De que te ríes Indra-kun!— la Haruno se molestó e hizo un puchero.
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Holaaa, quizás antes ya leyeron la historia, pues fue la primera que hice y publique, pero aquí estoy retomando esta historia y actualizando la, espero les guste❤️
Besos y recuerden usar cubre bocas y no a la persona que les gusta✨Publicación: 28 de Noviembre de 2020.
Actualización: 8 de Julio de 2021
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En tu mundo «SasuSaku»
FanfictionTodo comienza cuando dos personas inesperadas llegan a Konohagakure, causando conflictos sentimentales a cierta pelirosa. 🚫Prohibida su adaptación. 🚫Prohibido su uso sin autorización.