En tu mundo «SasuSaku»

Capitulo IV; problemas y más.

Habían pasado ya dos semanas desde la llegada de los ootsutsukis e Indra pasaba la noche en casa de la Haruno.
El día estaba comenzando y unos gritos despertaron al castaño. Se levantó de aquella cómoda cama y camino en dirección a la puerta.
Al abrirla vio a la pelirosa mirando a la puerta de entrada.

–Sa-sasuke-kun– tartamudeo la mujer muy sonrojada e impresionada.

–Sakura– hablo un azabache.

–¿Cuando regresaste de tu viaje?–

–Hace unas horas, ¿Quién es el?– miro al castaño el cual estaba parado en el marco de la puerta.

–Soy Indra, Ootsutsuki Indra– dijo su nombre el castaño –Voy a salir, Shio– camino por un lado del Uchiha y se perdió en el pasillo de aquel departamento.

–¿Shio?– pregunto extrañado el azabache.

–Me a estado llamando así estos últimos días, preguntas ¿por como me llama, pero no por que el está aquí?– pregunto la pelirosa.

–Kakashi me contó todo cuando llegue, espera– miro a la pelirosa. –¿Estos últimos días?–

–¡Sasuke teme!– grito un rubio corriendo por el pasillo y entrando a la casa de la Haruno sin preguntar.

–hmp, dobe–

–¿Cuando llegaste que no me viniste a ver?– lloriqueo el Uzumaki.

–No soy tu novio como para ir a verte, dobe–

–¿¡Significa que Sakura-chan y tú están saliendo!?– pregunto alarmado el rubio y ante lo dicho la Haruno se sonrojo hasta más no poder.

–No me refería a eso, o ¿Acaso todavía te gusta? Eh dobe–

–Eso sería extraño– se unió la pelirosa a la conversación.

–¡Claro que no me gusta Sakura-chan!, Ella es como una hermana para mi– comenzó a abrazar a la Haruno sin consentimiento alguno de esta.

–¿Por qué viniste aquí? Sasuke-kun– pregunto la pelirosa extrañada por su inesperada visita.

–Vine a ver a Indra, Kakashi me mandó para intentar mandarlo a su tiempo–

–Claro, por Indra– hablo decepcionada la Haruno –Como verás ya se fue–

El azabache asintió y sin despedirse salió de aquel lugar en busca de Indra, el rubio le siguió, Sakura se quedó en la puerta sin mirar un punto fijo, solo vagando entre sus pensamientos y el como ella había creído que Sasuke había venido a verla a ella por qué la amaba.
Se aventó a su cómodo sofa rojo, pegando su cara a la almohada de decoración.

–Vaya persona la que te gusta– hablo alguien desde la ventana.

–¿Cuánto llevas ahí?– pregunto la pelirosa sin mirarlo.

–No mucho, solo lo suficiente para saber que en verdad amas a ese tipo, que me recuerda a mi hermano– el castaño menor entro a aquella casa –Espera, ¿Por qué lloras? Shio– se sentó junto a ella al verla lloriquear.

–¿Por qué me llaman así?, Mi nombre no es Shio, soy Sakura–

–Lo siento, es solo que eres idéntica a sensei, tú cabello, tus ojos, el cómo lloras, ella era muy llorona, pero también era una mujer fuerte– dijo Ashura –¿Por qué lloras? Sakura– pregunto nuevamente.

–Es solo que– comenzó a llorar aún más–¡Estuve esperándolo estos últimos años y el solo no me nota!, Yo pensé que tocar mi frente significaba algo para el, pero ya veo que no– sus lágrimas no paraban pues el amor que sentía la Haruno por el Uchiha era demasiado.