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Descansar y relajarse es tan importante como lo es la acción y la productividad. Y cuando hablo de descanso no solo me refiero a la actividad del sueño para descansar el cuerpo. Es necesario que también demos el debido descanso y relajación a nuestras emociones y pensamientos, y que nos demos espacios durante el día para oxigenarnos.

En buena medida el estrés proviene de la forma en que reaccionamos ante las situaciones de nuestra vida. Sin embargo todas nuestras actitudes provienen a su vez de nuestra forma de pensar y de lo que sentimos. Si, por ejemplo, pensamos siempre lo peor de los demás, es normal que nuestra actitud hacia ellos sea defensiva. Y si siempre estamos a la defensiva, es lógico que experimentemos el rechazo de los demás. Irónicamente, mientras más rechazo sentimos más pensamos lo peor de los demás, y el ciclo se repite en un bucle sin fin, y esto aplica para muchas situaciones cotidianas.

Cuando caemos en ese tipo de ciclos negativos nos estresamos, y toda la sobrecarga emocional y mental nos mantiene en estado de alerta la mayor parte del tiempo. ¿Sabes lo que es el estado de alerta? Es cuando estamos a la defensiva, alertas por si pasa algo que pueda perjudicarnos. Es cuando nos preparamos en exceso para los malos momentos, o cuando repasamos todo una y otra vez por si algo sale mal, tratando de evitar situaciones desagradables. En el peor de los casos, es esperar constantemente lo negativo, sin darnos la oportunidad de creer que el resultado de cualquier situación será bueno para nosotros.

Aprender a descansar y relajarse no es un proceso que ocurra de la noche a la mañana, especialmente si estamos habituados a sentir ansiedad, a pensar demasiado, a estresarnos o a enfadarnos con facilidad. Sin embargo, todo se puede conseguir si estamos decididos a mejorar nuestras condiciones de vida.

Descansar mente y emociones es dejar de pensar durante un rato en los problemas que te aquejan. Es apagar unos minutos las preocupaciones y centrarnos en el momento presente. Para hacer esto, podemos echar mano de técnicas de mindfulness. Esta práctica está basada en la escucha activa y en centrar nuestra mente en el momento presente: escuchar para comprender y no para responder.

El mindfulness te llevará a ser más consciente de ti mismo y a sentir mayor comprensión de quién eres, qué deseas y hacia dónde quieres ir. Es una forma de vida que enseña a descansar y relajarse. A continuación te enumero algunos ejercicios de mindfulness que puedes realizar para relajarte y conectarte contigo mismo.

Amor PropioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora