『Kinky Week 』Lukadrien

1. Love Bites [Chupetones]

Una noche a solas en casa de su novio, sabía lo que eso podría significar. En especial después de tantas semanas en las que no habían podido tener un momento juntos y a solas.

—Luka...~ Al menos vamos a tu habitación

Susurro el rubio, mientras luchaba por quitar la chamarra del cuerpo de su pareja y dejándose hacer por el mayor.

No habría sido la primera vez que lo hacían en la sala del hogar del guitarrista, pero está vez quería disfrutar de la intimidad que les daba una habitación, así como de la noche que era siempre su mejor aliada.

Un beso logro callar la voz en su interior, esa voz que le pedía ser razonable y prudente, pues al día siguiente tendría una sesión de fotos temprano; en cambio su juicio se veía nublado por el placer que le daba sentir la calidez de los labios opuestos sobre su piel.

—Solo... déjame disfrutar de ti un poco más aquí

Luka era experto en desviar la atención de Adrien y después de unas semanas llenas del vacío en su cama, no planeaba dejar ir al chico sin una marca de aquella noche.

—Luka, por favor~ Prometo quedarme toda noche para compensar lo que ambos deseamos...

Tomándo sin previo aviso a Adrien por los muslos, lo acomodo en sus brazos para cumplir la única petición que le estaba haciendo por el momento y fundiéndose en un nuevo beso se encamino hasta su habitación.

La ventaja de vivir en un barco era que ningún vecino podía escuchar lo que pasaría a continuación y el velo de la noche los ayudaba a que ningún transeúnte viera a Chat Noir entrar por su ventana con demasiada frecuencia.

Si bien tenían citas o encuentros como cualquier otra pareja al inicio, ellos gozaban de una ventaja que los demás no, pues después de una serie de sucesos en la vida de ambos y que la identidad de Adrien como el héroe de París fuera descubierta por su pareja, esa carta fue comenzando a usarse a su favor.

—No sabes cuánto te extrañe estos días Adrien...~ El verte por llamadas, no es lo mismo...

Susurro sobre los labios de su chico, dejándolo caer sobre la cama y provocando que un suspiro escapara de sus labios.

Era una imagen con la que había soñado varias veces. El carmín adornando las mejillas del rubio, haciendo resaltar el color de sus esmeraldas en la oscuridad de su habitación, tenía sus prendas desacomodadas y Luka no pudo evitar morder su labio inferior ante el deseo que su imaginación provocaba.

—Hoy estamos solos y París no necesita a Chat Noir, ¿No crees que deberíamos aprovechar en grande está oportunidad?

La voz de Adrien había sacado de aquella lasciva ensoñación a Luka, acercándose de nuevo al chico y buscando continuar con aquel beso previo, dejándose llevar por su deseo y explorando con su lengua la boca opuesta, hasta que ambas lenguas de entrelazaron en un juego.

Ambos chicos estaban ansiosos, guiandose instintivamente buscaron quitar toda la ropa que les estorbaba y en cuanto Luka termino de quitar las prendas superiores del rubio, comenzó a dejar un camino húmedo de marcas que serían visibles por la mañana, desde el cuello hasta su abdomen, sonriendo para si mismo al escuchar los jadeos que escapaban de Adrien.

—Luka... No dejes tantas marcas~

—Solo fueron un par en tu cuello, pero se que has descubierto como cubrirlas a la perfección

El calor de la boca de Luka se concentro en los pezones del rubio, provocando un par de jadeos escapando de su boca y endulzando así el ambiente que los rodeaba.

Esa melodía de sonidos es lo único que necesitaba escuchar el mayor, siguiendo con esa labor mientras preparaba a su pareja. Era algo que habían hecho incontables veces ya y apresar de todo, lo seguían disfrutando como si fuera la primera vez.

—Mgh~ Luka... Te extrañe~

—Y yo a ti Adrien...~ Ya deseaba... Te deseaba~

La noche les parecería corta, ambos lo sabían y pensaban aprovechar todo el tiempo que tuvieran.

La sinfonía de sonidos que hacían al estar juntos era la música favorita del guitarrista y Adrien era la musa de muchas de sus canciones.

Las marcas en el cuerpo de ambos sería el único registro que quedaba de aquel momento pasional, siguiendo de esa forma hasta quedar satisfechos, abrazados al otro hasta dormirse.

Pero el manto protector de la noche los dejaría y sería el momento de separarse... Al menos por ahora.

El primero en despertar fue Adrien, pues el sonido de las personas en la calle le anunciaban que ya era más tarde de lo que imaginaba. Sin embargo, al ver el apacible rostro de Luka a su lado, no pudo evitar quedarse embelesado pensando en la maravillosa noche que habían tenido juntos.

Era un paisaje perfecto, la imagen que desearía tener todas las mañanas al despertar. Dando un suave beso en los labios de su amado, se dispuso a despertarlo, sonriendo al ver cómo esos ojos azules lo veían con cariño.

—Hey~ Buenos días querido Adrien

Una caricia en la mejilla del rubio era lo más sencillo para hacerlo suspirar, tomando con suavidad aquella mano y dando un beso en ella; era hora del momento que menos esperaba, tener que regresar a casa.

—Yo quisiera poder quedarme más tiempo aún, pero podría buscar una excusa para vernos por la tarde hoy

—Eso me encantaría y podríamos salir en una pequeña cita, yo invito las palomitas ¿Que te parece?

—Lo que sea es perfecto si puedo pasar tiempo contigo

Sin mucho ánimo, Adrien se separó de aquel abrazo que lo había mantenido cálido mientras dormía, tomando su ropa que estaba por todo el suelo y comenzando a colocarsela.

—Por ahora debo correr, pero...

—¿Pero hay algo que desees contarme, Adrien?

Los brazos de Luka envolvieron la cintura del rubio, dando un par de besos en aquella zona.

Luka había notado algo extraño a Adrien en las llamadas que habían tenido los días anteriores, lo conocía tan bien, pero no le gustaba presionarlo y sabía que debía darle su espacio para pensarlo, hasta que le diera la señal de estar listo.

Aunque el mayor sabía cómo jugar con su chico para que hablara más rápido y logrará estar tranquilo de nuevo.

—Hoy deberás ser cuidadoso, alguien podría preguntar por estás marcas en tu cuerpo~

Susurro aquello de manera suave sobre la blanca piel del rubio, haciendo un par de marcas más, logrando provocar que aquella piel se erizara.

—Luka...~ Quisiera que viviéramos juntos

Debía admitir que no era algo que esperaba y separandose lentamente de Adrien, se limito a verlo con curiosidad.

—¿Estás seguro de eso? Digo... Sería algo fantástico, pero aún así, ¿Cómo...?

—No puedo darte muchos detalles aún, pero quiero poder despertar junto a ti todos los días y no preocuparme por ocultar ciertas marcas en mi cuerpo todos los días que bajo a desayunar...

Una pausa pequeña adorno ese momento, así como el carmín en las mejillas de Adrien demostraban cuanto había pensado sus palabras.

—Además así podría disfrutar de más noche como la de ayer, sin que nos preocupemos por nadie.

Poniéndose la camisa de nuevo, Adrien volteo a ver a Luka una vez más, dándole una pequeña sonrisa antes de negar con su cabeza al darse cuenta de lo que había propuesto.

—S-si quieres no pienses mucho en ello Luka, es algo que dije sin pensarlo mucho y...

—Claro que me encantaría vivir contigo Adrien