Claro

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Tobirama dio sus clases normales a los demás grupos, intentaba no pensar en lo que había ocurrido pero le era imposible, lo estaba mortificando.

-Tobirama-sensei, ¿usted encontró un celular por aquí?- Preguntó una chica de cabello verde.

-Sí, ¿por qué preguntas?- Preguntó mirando a su alumna Fuu.

-Que bien, es que Hinata-sempai me pidió buscarlo y como no lo encontraba me comenzaba a preocupar- Explico la chica.

-Ya veo. No hay de que preocuparse, yo lo guarde- Aclaró el sensei.

-¿Me lo podría dar para yo entregárselo?- Consulto extendiendole la mano.

-Disculpa, pero solo se lo puedo dar a la dueña, es protocolo- Exclamo Tobirama-sensei. No era verdad, realmente el ni siquiera se tenía que dar a la tarea de guardar un celular y menos entregarlo, a principio de año los encargados firmaban un permiso donde se aclaraba que los celulares y demás dispositivos electrónicos eran de completa responsabilidad de los estudiantes pero necesitaba hablar con esa chica para que no esparciera el chisme.

-Entiendo sensei- Dijo con una reverencia.

-¿Te dijo algo más?- Preguntó intentando ver que expresión ponía la chica.

-No sensei- Aclaro Fuu confundida y se marchó a su asiento.
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Los alumnos salieron a almorzar y las chicas se sentaron en su habitual mesa en la cafetería.

-Odio matemáticas- Decía Ino en un suspiro.

-Vamos Ino, no es tan difícil, solo es concentración- Ánimo Sakura a la rubia.

-Hina, ¿y tú teléfono?- Pregunto Temari curiosa.

-Etto... Cuando llegue Tobirama-sensei estaba ocupado hablando con Gengetsu-sensei así que decidí no molestar, pero le pedí a Fuu buscarlo por mi- Expuso Hinata a las chicas.

-Alla viene, ¡Fuu!- Gritó Tenten para atraer la atención de la peliverde.

-Hinata-sempai, que bueno que la veo. Tobirama-sensei lo tiene pero me explico que solo puede entregárselo personalmente a usted- Explico la chica llegando a la mesa.

-Vamos Hinata, después puede que esté más ocupado- Dijo Temari poniéndose de pie y caminando con Hinata hasta la clase de Tobirama-sensei.

La azabache se sentía más tranquila, no estaba sola, así que posiblemente no sería tan incómodo, no podía ni verlo a la cara después de ver aquella escena.

Toc toc

-Pase- Exclamo una masculina voz del otro lado de la puerta.

-Disculpe la molestia sensei, Hinata ha olvidado su teléfono aquí y vinimos por el, ¿se puede?- Expuso Temari para ambas mientras la peliazul miraba hasta el piso.

-Aqui lo tengo- Dijo haciendo una seña para que se acercaran.

Lo que faltaba, esa estudiante había traído a una de sus amigos y no podría explicarle lo que había visto en el receso, era su única oportunidad para aclarar todo y ahora no podía.

-Gracias Tobirama-sensei- Exclamo la ojiblanca cuando se le entregó el artefacto.

-Que pena vernirlo a molestar sensei, es que Hina vino en el receso pero dice que usted estaba muy ocupado para atenderla- Solto Temari, a esto el sensei miró fijamente a Hinata con mirada retadora ¿será que ya había dicho algo?

-Sí, estaba hablando con su compañera Shion- Hizo énfasis en la palabra hablar.

-¿Shion? Hina, ¿no me dijiste que era con Gengetsu-sensei?- Preguntó Temari confundida.

Ética profesionalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora