I'm an alpha || Yizhan

I

- ¿Por qué tú hermana es tan ruidosa? Aish. - Preguntó un ya harto YuBin de la situación que estaban viviendo en estos momentos, o más bien, escuchando.

- Está en Celo e igual su novio. No es mi culpa. - Contestó el menor alzando y dejando caer sus hombros en una clara señal de "No me importa".

Ambos adolescentes se encontraban en la enorme y espaciosa habitación del más joven, sentados en la cama de este último, mientras jugaban videojuegos. A pesar que YuBin había subido casi todo el volumen de la plasma, seguían escuchando los jadeos - o gritos, según YuBin - de parte de su hermana y el alfa con el que estaba.

Sin contar poco a poco las feromonas iban entrando a la habitación de Xiao Zhan al estar justo en la habitación de alado.

- Mgh. Maldita sea. - Se quejó Yubin poniendo pausa al juego para seguido taparse la nariz con su mano derecha. - A-Zhan, está apestando horrible a feromonas. Creo que es mejor que me vaya. - Dijo, levantandose de la cama de Zhan dispuesto a salir de la habitación, más el más bajito fue más rápido al detenerlo.

- ¿Por qué te vas? No es la primera vez que pasa esto. Ha habido peores, YuBin. - El pequeño lo miró con el ceño fruncido a lo cuál su amigo le respondió con un suspiro.

- Lo sé Xiao Zhan, pero sabes que desde llegó mi celo hace unos meses... Ya no es igual. - Comentó Yubin. - Antes hasta podía dormir tranquilo a tú lado sabiendo la cantidad de feromonas en el aire. Pero ahora ya no, tengo miedo de lastimarte y eres mi mejor amigo.

- E-esta bien... Te acompaño a la puerta. - Respondió Xiao Zhan frunciendo sus labios para seguido salir de la habitación, cruzando aquel enorme y reluciente pasillo blanco que era conectado con las escaleras de la misma calidad.

Una vez llegaron a la puerta, Xiao Zhan despidió a Yubin con un leve movimento de mano y con una sonrisa un poco forzada, para seguido cerrar la puerta y quedarse "solo".

Xiao Zhan bajó la mirada un poco desanimado mientras caminaba a la cocina, pensando en que su amigo tenía razón. Meses antes que el mayor cumpliera los dieciocho años, tuvo que realizarse la prueba de género, teniendo como resultado lo que todo el mundo esperaba y lo más obvio.

Alfa masculino.

Y lo confirmó aún más con la llegada de su celo hace apenas unos meses. A Xiao Zhan no le sorprendió para nada, puesto que al igual que los demás, ya se sabía el destino del mayor , ya que desde más chicos, a la edad de quince años, - cuando Xiao Zhan ni siquiera alcanzaba el metro setenta y cinco de altura - Yubin estaba a casi nada de llegar al metro ochenta y su cuerpo comenzaba a tornearse digno de un alfa, en conjunto de su masculina voz y forma de ser.

En pocas palabras, Yubin ya tenía escrito su futuro desde que nació, puesto que toda su familia - inclusive sus antepasados- todos, absolutamente todos, son alfas.

Pero, ¿Entonces por qué él aún no se presentaba como alfa? La familia Xiao, al igual que la familia Yu siempre ha estado compuesta de grandes hombres y mujeres alfa.

Sus hermanas presentaron ser alfa a los diecisiete, joder. Esto era tan frustrante para él, estando a punto de cumplir los dieciocho, ni siquiera ha llegado al metro noventa de altura... ¡Media un metro ochenta y tres, maldita sea!

"¿Cómo es eso posible en un alfa? Porque eso era lo más obvio que saldría en los resultados" Se decía a él mismo mientras se encontraba tomando un vaso de cristal para poder servirle agua.

Mientras esperaba que el vaso se llenara, la preocupación volvió, atormentandolo con ciertos comentarios que venía escuchando de un tiempo para acá...