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Todos odian los lunes.

¿A quién le gustaría despertarse temprano para ir al colegio y ver a sus irritantes compañeros?

Pues Ink, después de todo, era el que irritaba a sus compañeros.

Hoy como otro lunes cualquiera iba al colegio tarareando una canción mientras comía una tostada untada con mermelada de fresa.

El cielo estaba despejado, el sol bien radiante, una suave brisa mañanera movió ligeramente su pelo y su característica bufanda, sí, un día muy agradable.

Cuando estuvo en la entrada del colegio, saludó a sus queridos compañeros, algunas veces fue correspondido y otras olímpicamente ignorado.

—¡Hola, Error!

—Muérete, basura.

Y también insultado.

Bueno, era pan de todos los días, ya se había acostumbrado.

—Maldita sea, cuánto lo odio —Susurraba el azabache viendo receloso al tipo que más repudiaba en su vida hasta que dejó de mirarlo al notar que casi choca con alguien— Ah, hola Dream.

—¿Andabas distraído por estar maldiciendo a Ink, verdad?

—Sí —Afirmó de inmediato, se ofendería consigo mismo si no lo hiciera cada mañana, después de todo, era una rutina que debía seguir.

—Dejen de comportarse como niños, en serio —Aconsejó cansado de todo esto, en cualquier momento se meterían en un pleito y al de baja estatura no le agradaría ser parte de ello, tenía una reputación que cuidar.

—Eso dile a ese fenómeno que tienes como amigo —Resopló molesto volviendo a ver a ese, uhg, ni siquiera era capaz de decir su nombre.

—Se lo diré, no te preocupes...

Dream hubiera seguido hablando con el contrario, pero sus ojos captaron la llegada de su otro amigo.

Iba a acercarse para saludarlo, mas este al parecer tenía otros planes.

—¡Blue, hola! ¿Cómo estás? —Preguntó sonriente el de bufanda marrón.

Todos lo que recién venían o se quedaron conversando en la entrada del colegio observaron en silencio como Blueberry se llevó arrastrando a Ink hacia los baños.

—¿Crees que deberíamos...? —Preguntó discretamente el azabache, no le importaba lo que le pasará a Ink, pero otra cosa era Blueberry.

—Nah, déjalos ser, además no es como si fueran a matarse o algo —Rodó sus ojos indiferente para después caminar hasta su salón.

•••

La puerta del baño de hombres se abrió abruptamente, asustando de tal manera al único chico que estaba ahí.

—¿Nos puedes dejar solos?

—Ah, sí... —Se retiró sin decir una palabra más.

Ink no entendía nada.

—¿Qué hacemos aquí? —Se atrevió a preguntar sin mostrar ninguna muestra de temor por lo que podría pasar.

—Ink, tenemos que hablar —Habló serio y sin previo aviso sujetó del cuello de la chamarra al mencionado.

—Por esto mismo te he dicho que no te juntes mucho con Error, ya estás actuando como él —De forma suave puso sus manos sobre las del contrario y las alejó, consiguió por suerte que lo soltarán.

—¿Por qué le diste mi número a Reaper?

—¿Uh, lo hice?

—¡Sí, lo hiciste! —Le dio un pequeño golpe al brazo del más alto.

—Ouch, eso dolió.

—No me importa y no vuelvas a darle mi número a un extraño.

—¿Por qué estás tan molesto? ¿Pasó algo con Reaper?

—Eh, no... —Respondió desviando la mirada para otro lado, no es como si el sábado hubiera tenido una cita con él— ¡Pero en serio, si me enteró que haz hecho otra tontería como esta, te mató!

—Vamos, no hay que necesidad de amenazas.

—¡Pues parece que es la única forma que lo entiendas! —Se acercó al contrario y lo acorraló en la pared— Y lo último que quería decirte es que le devuelvas las cosas que Error te prestó, iba a convertirse en el chico de los plumones si no fuera por ti que le quitas todas sus ilusiones, eres un maldito.

—Okey, okey, haré lo que tú dices...

Cuando lo deseaba, Blueberry podía dar un tremendo miedo, incluso más que el hermano de Dream.

—Bueno, confiaré en tu palabra esta vez —Dijo cruzándose de brazos.

—¿Y qué hiciste el fin de semana? ¿Algo interesante?

—Tarea —Mintió sin tomarle mucha importancia, era mejor que nadie supiera de su "cita".

—Puff, qué aburrido, podrías haber salido con Reaper o algo, es un chico muy divertido cuando se lo propone.

—No, gracias —Respondió poniéndose discretamente su capucha para ocultar su rostro.

—Vamos, sería como una salida de amigos, ni que fuera una cita, además es mayor que nosotros.

—Uh, sí, como sea —Quiso huir, mas no pudo.

—Blue, sabes que no podemos usar la capucha en el colegio... ¿Estás bien? Tienes roja toda la cara.

—Es que vine corriendo al colegio.

Era obvio que Ink no le creyó nada y terminó contándole lo del sábado aunque ocultando varios detalles.

De igual forma, esperaba no arrepentirse de habérselo dicho.

Esperaba...

•••

—Y eso pasó, Dream ¿Qué piensas al respecto?

—Uhm, ya veo, con razón está así —Señaló a Blue, quien estaba desparramado en la mesa— Tranquilo, todos tienes gustos diferentes, sí te gustan los mayores está bien —Le dio pequeñas palmaditas a la cabeza del contrario como señal de apoyo.

—¡Ya les dije que no me gusta Reaper!

—¿Entonces por qué estás sonrojado?

—¡Es una reacción normal del cuerpo cuando uno siente vergüenza! ¡Dejenme en paz!

Debería considerar mejor quienes son sus amigos.

¡Solo fue una cita! ››Reaper x Blueberry‹‹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora