Entre Besos Y Balones.

Simplemente.

Resumen: Shirabu jamás lo admitiría, pero a veces simplemente necesitaba un abrazo de su novio.
Pareja: Yamagata Hayato x Shirabu Kenjirō «YamaShira».Género: Soft, fluf.

Todos podían joderse. Ese era el pensamiento de Shirabu mientras caminaba hasta su cuarto. Su día solo había sido una mierda tras mierda. Primero, se había despertado tarde, Taichi no se molesto en levantarlo y apago su alarma, llego tarde al entrenamiento matutino ganando un castigo y le toco dar el doble de vueltas, luego, en la cafetería, un imbécil había chocado con él y su pulcro uniforme se fue a la mierda, y como si eso no bastaba, cuando le ayudo a Goshiki a abrir su soda esta exploto manchando aun más su uniforme. Un desayuno de mierda, simple.

Al irse a los dormitorios para poder quitarse la pegajosa ropa, no se percato de la hora y termino llegando tarde a su case ganando un regaño teniendo que estar parado toda la clase, la siguiente hora fue una mierda, eso sin contar que tuvieron examen sorpresa y estaba tan estresado que todas las respuestas se fueron, sería suerte si llegaba a aprobar. Por otro lado le había tocado asistir a la enfermería porque las alergias de su tonto amigo habían aumentado, maldito Taichi, debía dejarlo morir por no haberlo despertado.

Gruño con frustración mientras se dirigía a su habitación, una bolsa con medicamentos en una de sus manos. Toco la puerta avisando su entrada aun siendo su propio cuarto y luego abrió la puerta. Kawanishi estaba acostado en su cama, una caja de pañuelos a su lado, la nariz roja y los ojos llorosos. Shirabu le tiro la bolsa de medicamentos.

—Muere de una vez idiota —dijo.

—Kenjirō también te amo tanto —la voz del mayor sonó ronca y áspera—. ¿Iras a la práctica?

—Debo de, llegue tarde a la mañanera —se quejo—. Muere rápido —comento por ultima vez antes de salir de regreso de su habitación.

En el camino casi se cae por las escaleras, unos idiotas lo empujaron y casi choca con un maestro, maldición, todo iba de mal en peor. Llego al entrenamiento y agradeció no tener a su mejor amigo detrás de él jodiendolo, sin embargo, le pareció extraño no ver a Yamagata, quitándole importancia se dirigió a los vestidores dispuesto a cambiarse de ropa. Ingreso al gimnasio solo para que un balón se estrellara en su cara.

—¡Lo lamento! ¡No fue intencionado! ¡Perdón! —Goshiki se disculpo de manera rápida, en su voz se notaba el arrepentimiento.

Shirabu dio una gran respiración, tomo el balón que estaba por sus pies y todos pensaron que se lo estamparía en la cara a Tsutomu, pero el chico simplemente se acerco al menor de todos y le puso el balón en las manos.

—Mejora tu recepción —fue el único comentario.

Todos lo miraron aun más asustados de que no le gritara a Goshiki, pero en ese momento Shirabu estaba tan harto de todo que simplemente quería que ese día se acabe para poder llegar a su cuarto a dormir, si es que lo lograba porque cuando las alergias de Kawanishi empeoraban tenia que cuidarlo además que jamás dejaba de estornudar molestando su sueño, simplemente perfecto.