𝐎𝐁𝐄𝐃𝐈𝐄𝐍𝐂𝐄 [𝟣𝟪+]

Jueves

—No es cosa seria, la tubería está dañada y debo reemplazarla.

Joohyun escuchaba con atención lo que el plomero le decía. Para su mala suerte, el conducto debajo del lavadero de la cocina le estaba dando lata. Por la mañana había estado limpiando los platos como normalmente lo hacía y había ocurrido un pequeño accidente.

La señorita Kang en cuanto notó el problema no dudó en llamar por el servicio. Después de eso, Joohyun se encargaría de todo eso porque era precisamente su "trabajo". Asegurarse que todo en la casa estuviese bajo orden.

—¿Cuánto tiempo cree que tome?

—Eh, bueno.. Primero necesitaría conseguir el material nuevo y luego instalarlo.

—¿Es todo?

—Sí.

—¿Y tiene el material?

—Evidentemente no, señorita.

Joohyun hizo una pequeña mueca. No tenía ni la menor idea sobre cosas de plomería y desde luego no quería molestar a la señorita Kang sobre ello. Llegó a un acuerdo con el plomero de que él se encargaría de conseguir el material nuevo y en una hora más aproximada, estaría de vuelta en la casa. Listo para instalar la nueva tubería del lavabo.

Pan comido.

Joohyun pudo relajarse.

Cuando el plomero dejó la casa, se puso a limpiar el desorden que había ocasionado el agua alrededor del suelo de la cocina. Se encargó de limpiar hasta el rincón más pequeño de la cocina y cuando terminó, sonrió para sí misma orgullosa de tener una cocina tan pulcra.

Pasaron algunos minutos de que hubiese acabado de limpiar la cocina, la señorita Kang ya había tenido su respectivo almuerzo y se había encerrado en su oficina. Cómo solía hacer. Joohyun aprovechó para fregar el piso de la sala principal, así como aspirar las alfombras del suelo.

Ding dong.

Sonó el timbre.

Inmediatamente, Joohyun fue hacia la entrada principal sin ni siquiera mirar antes por la pequeña pantalla a un lado de la puerta. Suponía que era el plomero así que abrió la puerta.

Se llevó una no tan grata sorpresa cuando vislumbró en la entrada a una mujer esbelta, alta, de cabello negro y con un color de pinta labios rojo pasión. La chica vestía un vestido naranja holgado largo y en su rostro se reflejaba una suave sonrisa.

—Hola.

Fue lo único que pudo decir Joohyun al verla. Estaba segura que nunca había visto a esa mujer antes entrar a la residencia. Es más, estaba segura que la señorita Kang raramente invitaba a personas a su casa y aquel rostro era desconocido para ella.

—¿Es la residencia de Seulgi?

Seulgi. Ah, claro. Tuteándola. ¿Qué le pasaba a esa mujer?

—Sí, es esta.

Joohyun se congeló por un momento y vio la extrañeza reflejarse en el rostro de la chica.

—Soy Sooyoung, Seulgi me ha citado aquí... justamente a las 4 pm.

Oh. ¿Una cita?

—Acompáñeme, por favor.

Joohyun encaminó a la señorita Sooyoung hasta la oficina de la señorita Kang. Tocó antes y luego de que escuchó el permiso de su jefa para ingresar, abrió la puerta. La señorita Kang la ignoró completamente cuando estaba a punto de decirle quién había llegado, pues la chica a su lado se había apresurado a entrar a su oficina y el rostro de su jefa cambió completamente.