𝐎𝐁𝐄𝐃𝐈𝐄𝐍𝐂𝐄 [𝟣𝟪+]

Residencia Kang

Nota: Este capítulo lo escribí escuchando Jades Future de La Femme, alto temazo por si la quieren escuchar.

[Un año antes.]

—No hay mucha demanda estas últimas semanas, estamos a cierre de año y la mayoría de los clientes ya cuentan con sus empleadas domésticas.

La mujer estaba sentada frente a la computadora buscando en la lista de solicitudes en línea. Joohyun se sentía inquieta porque la mujer no paraba de mascar ruidosamente la goma de mascar en su boca, sumado al hecho de que se sentía realmente desafortunada por el hecho de que no tenía oportunidad alguna.

Joohyun tenía una larga historia pero contarla para ella era a menudo muy difícil, se remitía a decir que no tenía padres, que estaban muertos cuando la realidad era completamente diferente. Su historia era una más: una pequeña niña a la que sus padres, por razones del cruel y egoísta destino de los adultos, no habían querido criar. Su madre había sido una pésima madre para ella y su padre... su padre estaba muerto para ella. Había soportado bastante tiempo viviendo con ellos y cuando cumplió 19 años tuvo la oportunidad de escapar con la única persona que la había apoyado en toda su vida, su abuela, sin embargo falleció después de tres años.

—¿Puede volver a checar, por favor?—La mirada de Joohyun suplicaba a la mujer desinteresada frente a ella.

—Querida, lo he checado dos veces y no hay vacante alguna.

—Pensé que las agencias de trabajo siempre tenían vacantes.

—En cuanto llegue una nueva vacante, te lo haré saber. No esperes mucho de nosotros a estas fechas. Ve con Dios y disfruta la navidad.

Joohyun hizo una mueca de disgusto. No podía más con la indiferencia de aquella señora frente a ella. Tomó su pequeño bolso y se levantó molesta, saliendo de la oficina. Tragó saliva en el momento en que salió del edificio y vio la cantidad de gente circulando por las calles, la mayoría de ella eran familias y trabajadores. Joohyun sentía una impotencia dentro de sí; sabía de antemano que la vida de la demás gente no era perfecta pero a diferencia de ella, ellos tenían una familia, tenían estabilidad, tenían un trabajo y sobre todo, la calidez de un hogar. La única opción que le quedaba era regresar a casa de sus padres pero volver a convivir con una drogadicta y un hombre abusador no estaba en sus planes. Nunca lo estuvo.

—Escuché que la residencia Kang está buscando nueva sirvienta pero no han enviado la solicitud de trabajo en la agencia.

Joohyun se había acercado a la esquina del edificio en donde había diferentes panfletos de búsqueda de trabajo y le había sido inevitable escuchar la conversación de dos señoras, supuso que se trataba de dos empleadas domésticas con experiencia.

—¿La residencia Kang? ¡Ni de loca iría a ese lugar! Escuché que la paga era bastante mala y la casa es demasiado grande.

—¿En serio? Pero si el señor Kang es un hombre importante, ¿qué tan tacaño sería ese hombre?

—No lo sé. Mi Yerim trabajó para él y escuché que había dejado el lugar por esa razón. Desde que le heredó la casa a su hija el trabajo no fue el mismo. Despacharon a mucha gente sin decirles por qué. No me fío de esa familia y sus socios desde entonces.

—¡Qué egoísta!

—Y que lo digas.

¿Residencia Kang? ¿Paga mala? ¿Familia importante? A esas alturas, a Joohyun le importaba poco si el trabajo que pudiese conseguir tenía una paga mala. Mientras pudiese conseguir cogida en una casa, trabajar y ahorrar lo suficiente le bastaba. Todo era mejor que ese diminuto cuarto y sucio que rentaba. Terminó por unirse a la conversación de ambas señoras y aunque, desconfiadas de ella, al final de todo accedieron a darle indicaciones de la residencia Kang a la que se referían. Sabía por la dirección que se trataba de una casa ubicada en las zonas pudientes de Seúl, lo sabía porque antes había tratado de conseguir trabajo en una casa de aquella zona pero le habían declinado la oferta por no tener la suficiente experiencia y ser muy joven. Joohyun no batalló para encontrar la dirección de la residencia Kang pero se sintió un poco desalentada cuando se dio cuenta que tenía que caminar al menos medio kilómetro subiendo hasta llegar a dicha residencia.