El Rechazo De El Lobo.

capitulo 10

Doble actualización, porque sí.

Narra Olivia Blue.

Mí cuerpo entero dolía y mí conciencia estaba difusa, porque de alguna forma sabía que ya no era yo sola, que ahora había algo más que habitaba en mí menté, algo más fuerte y salvaje que deseaba hacer todo por un mero impulso. Éramos tan diferentes, pero era yo misma, un mismo cuerpo con una misma conciencia.

Tan contradictorio.

Un frío helado me estremeció sin poder evitarlo, mis ganas de ir al colegio en mí forma animal me tentaban, pero sabía que eso solo aliviaría mis nervios por un instante. Era un día nuevo y yo tenía pensamientos completamente distintos a los de ayer a la tarde, como si de un día para otro todo haya cambiado.
Mí rutina actuó por si sola, mí menté estaba en otro lugar completamente distinto. Tenía miedo y distintos escenarios se generaban en mí menté, cosa que provocaba cierta valentía de enfrentar a aquel Alfa que dice ser mí compañero, provocaba que la bestia en mí interior se removiera con furia. Mí puño impacta contra la mesa sin poder controlarlo y una vez más siento que mí cordura se pierde lentamente.

-¿Oliv?- me llama su voz aniñada.

Rápidamente volteó hacia él y noto como sus ojos irradian curiosidad.
Me apresuró a terminar de combinarlo y sin ponerme a pensar mucho en lo que me depara del día, sigo con mí día, como si fuese como cualquier otro.

Siento un nudo en el estómago justo ahora, frente a la institución a la cual viene por años y lo odió, odio sentirme de está forma, odio no saber que hacer o como actuar ante esto.
Doy un paso en falso y casi caigo, pero un brazo toma el mío con fuerza.

-Te dije que no estabas sóla- murmura la voz de mí amigo.- aunque quieras hacerlo sola.

Casi se me escapa un suspiro de alivió, pero lo contuve y dejé que él me llevará dentro del lugar donde encontrarnos a Giovanna en un pasillo.

-¿Cuál es el plan?- susurra ella.-¿Lo ignoramos o lo enfrentamos?-

Ambos me miran preguntando que es lo que hay que hacer y eso me hacer encogerme en mí lugar.

No tengo ni la más puta idea de que debo hacer.

Así que simplemente decidimos seguir con el día, como si se tratara de cualquier otro, pero entonces, antes de mí última clase pasa algo que no esperaba y era encontrarme con Elliot a la vuelta de una esquina.

-¿Me estabas evitando?-

Lo observó por un momento, me mantengo expectante a que la magia del lazo haga efecto, sin embargo, seguía viéndolo como lo que es; un imbécil.

¿Tan importante te crees?

Me trago mis palabras y mantengo mí vista fija en sus pies.

-No, alpha- susurro.

Mí cuerpo entero se petrifica y mí corazón se exalta del miedo cuando lo tengo tan cerca, olfateando con desesperación mí cuello.

-Voy a hacer las cosas sencillas- murmura embelesado por mí olor.- a partir de mañana vas a vivir en la mansión y para ese momento vas a dejar de ir a cualquier lugar, vas a convertirte completamente en algo de mí propiedad, solo mía...-

Un nudo se crea en mí garganta y las lágrimas quieren salir, siento unas inexplicables ganas de vomitar. Siento como si todo me diera vueltas, pero entonces, me detengo en el momento en el que se aleja de mí, que desaparece. Miles de pensamientos cruzan por mí mente, pero ninguno parece coherente. Por primera vez veo las cosas con claridad y era que no había escapatoria, no había lugar al cual huir. Las normas son claras y no se puede huir del lazo más respetado en todo nuestro mundo, de una u otra forma la ley estaba de su lado.

¿Que va a pasar con Alex ahora?

Arrastró mis pies y con tranquilidad vuelvo a la casa. Me siento exhausta, como si mis energías hubieran sido drenadas y entonces, veo al pequeño a mí lado acompañándome a la casa.

-Nunca vas a dejarme, ¿Verdad?-murmura levantando la cabeza.

-¿Por qué preguntas?- suelto extrañada.

El levanta sus hombros y mantiene su vista fija en el suelo.

-A veces no es tan simple-murmuro con derrota-Pero nunca, escúchame bien, nunca voy a permitir que te pase nada, nunca-recalco- aunque no esté presente, quiero que sepas que te amaba demasiado como para que sufras consecuencias que no te corresponden, ¿Está bien?-asiente lentamente, intentando comprender lo que significaban mis palabras-¿Que hiciste con la mamá de bo?-

Su carita de ilumina y la felicidad desborda de sus ojos.

-¡Habian demasiados juguetes!-exclama-y Emily es súper buena, me dio galletitas de chocolate, me ayudó a bañarme y me llevo a la escuela, después me vino a buscar Dana-el entusiasmo en su voz lo entendía, alguien hizo el papel de madre que yo nunca podría hacer-aunque prefiero cuando vos me venís a buscar, cuándo comemos el helado los viernes-

Sonrió con cierta tristeza, sabía que era ésto, aunque no lo quiera admitir, está era nuestra despedida y aunque él no lograba entenderlo del todo, todo dolía, cada palabra, todo.

Cuando llegamos a la casa, todo estaba exactamente como lo dejé y a la noche papá no apareció por la casa, entonces, no pude despedirme de él como quería, no pude dejarle en claro que no me iba porque quería.

No dormí en toda la noche con intención de guardarme cada gesto que hacía él mientras dormía, lo suave que respiraba y como entre sueños buscaba mí brazo para aferrarse a el.
Suspiro y me lamento por como sobrelleve la situación, quizás antes podría haber hecho algo, pero ya era demasiado tarde.

-Vas a estar bien mí pequeño guerrero- murmuró envolviendo mis brazos sobre su pequeño cuerpo-te voy a extrañar mucho más de lo que puedas imaginar-

Lo bueno es que pude tener esa última vez y eso para mí fue suficiente.

Nota de la autora: dejó esto para los que están leyendo la nueva actualización; no se guíen por lo que dicen los comentarios porque estoy cambiando muchas cosas, osea que no van a tener sentido y también paso a agradecer a los que leen y piden que actualicé, de verdad gracias por el apoyo.💜🖤