Conversación ~ClassroomOfTheEliteXOregairu~

Conversación 3

-Te vez más desanimado de lo normal –"Aunque siempre te vez así" pensó el peliazul–

-Y que lo digas... –el pelicastaño suspiró–

-¿Ocurrió algo interesante? –para el peliazul, era muy obvio saber que su Kouhai se metía en situaciones muy particulares–

-La profesora Hiratsuka –respondió sin más–

-Ya veo... –debido a su experiencia con su profesora, Hikigaya lo había entendido todo con tres simples palabras– ¿Qué te dijo... o hizo...? –preguntó curioso–

-Pues... –el pelicastaño simplemente le contó lo que ocurrió con la profesora Hiratsuka–

"Veamos que le hizo a esta oveja descarriada" pensó el peliazul mientras trataba de averiguar por sí mismo las cosas que le había dicho o hecho su profesora a Ayanokouji.

-¿Entonces...? –la profesora levantó una ceja esperando a que el pelicastaño empezara a hablar–

-¿Entonces qué? –miró confuso a la profesora, quien poco a poco empezaba a desesperarse–

-Ya no es tan solo Hikigaya... –suspiró– Parece que esta escuela es cuna de peligros a la sociedad... –se tocó la frente preocupada–

-¿Debería ofenderme?

-Eres muy listo, Ayanokouji... –le ignoró– Respondiste correctamente cincuenta preguntas de cien que había en cada prueba del examen de admisión... –la adulta observó inquisitivamente al pelicastaño, quien no cambiaba su expresión–

-Tan solo fueron 4 coincidencias... –se trató de excusar–

­-Para ser tan listo, eres un poco torpe... –volvió a suspirar– ¿Debería integrarte al club de ayuda? –pensó en voz alta–

-Ya estoy en un club –respondió sorprendiendo a su profesora–

-¿Perteneces a un club? –el pelicastaño no respondió, por lo que la pelinegra entendió que era un "sí"– Vaya... –"No es tan parecido a Hikigaya" pensó mientras buscaba cerciorase de algo– ¿Puedes nombrarme a 7 personas con las cuales has hablado hace aproximadamente 6 horas? –le preguntó a un confuso pelicastaño–

-Kuruizawa, Horikita, Sakura, Ichinose, Hikigaya, Sakayanagi y Haruka –la profesora se sorprendió al no ver duda en Ayanokouji, además de nombrar a seis mujeres–

-Ya veo... –se aclaró la garganta–

-¿Eso es todo? –preguntó mientras se levantaba de su asiento–

-No –el pelicastaño volvió a sentarse– Necesito que hagas algo con tu forma de vivir la vida... –leyó unos cuantos informes– Tus profesores dicen que no participas de las clases, pero tienes notas que están en el promedio... también dicen que pareces ausente la mayoría de las veces... –continuó leyendo– Y que pareces no prestarles atención, pero como tienes buenas notas, no te pueden decir nada... –suspiró rendida–

-Entonces no hay ningún problema –la profesora forzó una sonrisa mientras levantaba su puño– O tal vez si lo haya... –se rindió–

-No es que seas un problema para la sociedad... –pensó en voz alta la pelinegra– Pero creo que se puede hacer algo con tu actitud... –continuó pensando en voz alta– ¿Qué piensas de la juventud? –preguntó curiosa por su respuesta–