My Cat Is In Your House 「Hyunho」

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Unos dos años más o menos pasaron desde que Minho obtuvo a los gatos, Soonie, Doongie y Dori, tres lindos gatitos que ya eran medio-adultos.

Un día, cuando Minho llegó de comprar unas cosas, notó que uno de ellos, Dori, ya no estaba. Le buscó por toda la casa pero no había ni rastos del felino, comenzó a entrar en pánico hasta que empezó a ver por las ventanas (que aún no tenían rejas) y ahí le encontró, en casa de su vecino quien se había mudado hace dos semanas. ¿Ahora cómo recuperaba a su mascota?

La forma de cómo Dori había entrado en la casa del vecino de Minho, Hyunjin, era que fue por pura curiosidad y este le encontró ahí cuando fue a sacar a Kkami, su perro, así que se quedó un rato con el peludo gatito, acariciándole y jugando un rato para después darle un poco de comida, lo que hizo que el gato se quedara ahí unos minutos más, los suficientes para que su dueño le viera desde la ventana.

Nervioso fue hasta la casa de Hwang, y se pensó mil veces  el tocar la puerta. No conocía a ese chico, sería raro que las primeras palabras que dijera era "¿puedo entrar para sacar a mi gato de tu patio?" Dejó todos esos pensamientos de lado y tocó la puerta, la cual fue abierta por un chico bastante alto y bonito, debía admitir.

— Ehm, hola, soy Minho, vivo al lado. Mi gato se metió a tu casa, ¿puedo entrar a buscarlo en tu patio?

Para su sorpresa Hyunjin le dejó pasar, mandando a callar a Kkami quien no dejaba de ladrar. Acompañó a Minho hasta su patio para que buscara a su mascota, pero resulta que esta ya no estaba.

— ¡Pero estaba aquí! — Recalcó Minho entrando en pánico por su desaparecido gato.

— Quizás salió otra vez a tu casa, no lo sé. — Intentó calmarlo el más alto, poniendo una mano en su hombro.

Extrañamente ese toque hizo que Minho sintiera cosas raras en su estómago.

— Está bien. Muchas gracias... — Hizo un silencio, esperando que el contrario dijera su nombre.

— Hyunjin. Hwang Hyunjin. Un gusto, Minho.

Ambos chicos se despidieron y el mayor volvió a su casa y, efectivamente, Dori estaba ahí. A regaños el animal entró en la casa y Minho se sentó en el sofá, pensando en qué rayos había pasado cuando su vecino que acababa de conocer le tocó.

(...)

No es por nada pero ¿saben lo incómodo que es ir a sacar a tu animal del patio del vecino? ES LA WEA INCÓMODA JAJAJA. TODAS LAS MAÑANAS DEBO SACAR A MI GATO DEL PATIO DEL SEÑOR QUE VIVE DETRÁS DE MÍ Y ES BASTANTE INCÓMODO, MÁS PORQUE DEBO ESPERAR A QUE EL SEÑOR SALGA DEL BAÑO PARA QUE ABRA LA PUERTA Y YO ENTRAR A SU PATIO Y RESULTE QUE MI GATO YA NO ESTÁ AUNQUE LO VI HACE 3 SEGUNDOS.

Aveces me arrepiento de tener a ese gato. Pero ya tiene un año y algo conmigo ¿qué voy a hacer? Lo tkm, he's my baby.