"Llantos, suspiros y ayes escuché
resonando en el aire sin estrellas
y por eso a llorar allí empecé."Dante ALIGHIERI, Divina Comedia. Inferno. CANTO III.
Me encontraba prácticamente en los límites de la propiedad cuando lo oí. Un grito sordo de dolor cortó el silencio de la noche. Me paré en seco y me giré. Intenté hacer oídos sordos a los gritos, pero no pude.
Eché a correr hacia ellos tan rápido como pude.
La altura de los hierbajos me impedía localizar correctamente a la persona que gritaba, pero supe que era un hombre y que estaba relativamente cerca de donde me encontraba.
Entonces lo vi.
Una de esas cosas se revolvía inquieta a unos metros de mí. Supuse que trataba de alcanzar al dueño de aquel grito desesperado. Agarré con fuerza el mango de la azada que había rescatado del granero y corrí hacia allí. Cuando estuve lo suficientemente cerca pude reconocer a la persona que forcejeaba desesperada con esa criatura: Dale. Sin pensarlo mucho me lancé hacia ellos, alejando a aquel ser de una de las pocas personas que había sido amable conmigo.
Me incorporé rápidamente y, con fuerza, clavé el filo de la herramienta en el cráneo de esa cosa.
Su sangre putrefacta salpicó mi rostro.
—Qué cojon... —El tío que había estado en el granero esa misma tarde se encontraba frente a mí. Apuntándome con una ballesta. Genial. Ni siquiera le había oído llegar. Sin dejar de apuntarme miró mis muñecas vendadas—. ¿Cómo...?
De nada servía mentir ya. Estaba jodida.
Solté la azada y alcé las manos en señal de derrota.
—Estaba fuera de la finca cuando le he escuché gritar. —Miré a Dale, quien seguía tirado en el suelo. No había llegado a tiempo. Su estómago se encontraba abierto en canal y la sangre cubría su cuerpo—. He llegado lo más rápido que he podido. Lo siento...
En cuestión de segundos estábamos rodeados de personas.
Identifiqué a algunos de ellos, pero otros me eran totalmente desconocidos. La mayoría no habían reparado aún en mi presencia, aunque sí lo habían hecho Rick, quien me miraba como si fuese un fantasma; aquel tío de la ballesta, que seguía apuntándome a la cabeza; y otro de apariencia militar. No me hizo falta ninguna presentación para saber que se trataba del famoso Shane.
—¡Hershel! ¡Qué alguien vaya a buscar a Hershel!
Los gritos de Rick se escuchaban desesperados, mezclándose con los llantos de muchos de los presentes.
Me aparté de la escena, ya que me sentí fuera de lugar. Ellos eran familia y yo solamente era la chica del granero.
A lo lejos vi cómo Hershel corría hacia nosotros completamente desencajado.
—¿Qué ha ocurrido? ¿Estáis todos bien?
Se quedó paralizado ante la escena que vio al llegar. Apartó a una mujer rubia que se encontraba llorando junto al cuerpo de Dale. Este último seguía consciente y nos miraba a todos con una desesperación frenética.
—Tienes que operarle de inmediato. Le llevaremos a dentro.
Hershel miró con pena a Rick ante sus palabras.
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É S T I G E [LIMOS #1]| The Walking Dead
FanficEl mundo ya no es lo que era. Preocupaciones tan mundanas como llegar a fin de mes con dinero en el banco o estudiar para un examen han quedado en el olvido. La única preocupación ahora es sobrevivir. Aunque para ello haya que hacer cosas horribles...