Serendipia | ZaintSee

Capítulo X - Recuerdos

Tranquilidad. Eso era todo lo que Saint podía percibir de la vida en manada, era algo tan diferente a su estilo de vida, aun así, por alguna razón le causaba nostalgia.

Suppapong no estaba acostumbrado a una vida pausada y serena, podía recordar que siempre ha tenido un ritmo de vida algo agitado yendo de un lado a otro, trabajando, buscando la forma de poder retribuir todo el amor, amabilidad y cuidados que había recibido de sus padres.

Si toda su vida había vivido entre edificios, entonces ¿Por qué el estar en ese lugar le parecía familiar?

—Dime ¿desde cuándo desconectaste con tu animal interno?

La pregunta lo saco de su nube de pensamientos. El chico frente a él le observaba esperando una respuesta, pero a pesar de que Saint había salido de su estado ensimismado, aún estaba distraído observando a los cachorros que correteaban y se transformaban de forma repentina.

—Yo... a decir verdad no lo recuerdo –logró hablar al fin. –Mis padres nunca han mencionado cosas como esas tampoco.

—Bien –contestó el contrario dando un suspiro. Saint predijo que no era nada bueno. –Supongo que será difícil, cuando se pierde la conexión a temprana edad es complicado hacer que el resentimiento de un lobo desaparezca.

"Entonces quizá esto sea en vano" pensó Saint.

—No importa, lo intentaré, necesito hacerlo.

Con esa resolución comenzó su entrenamiento.

...

Los sentimientos eran tan profundos, tristeza, enojo, frustración... Saint era abrumado por tantas emociones a la vez que apenas podía permanecer un par de minutos meditando, tratando de conectar con su lobo.

"Por favor, responde" hablaba Saint dentro de sí, pero cada vez la llamada era rechazada.

—Tranquilo Saint, respira –escuchó casi a la lejanía la voz de quien lo estaba enseñando, esa era su señal para regresar.

Saint abrió los ojos con lentitud y se percató de la cara preocupada de Mean. Suspiró, era consciente de lo mal que lucía en general, así que podía imaginarse como de peor se veía cuando entraba en trance.

—Creo que vamos progresando, estas conectando bien con las emociones de tu "lobo" –dijo su entrenador, Jimmy, alentándolo.

Saint pasó la mano por su rostro notando que estaba húmedo, realmente había comenzado a llorar.

—Me habías dicho que eras adoptado ¿sabes algo de tus padres bilógicos? –preguntó Perth, que estaba detrás de Jimmy.

Saint negó.

—No sé nada, mis padres tampoco lo saben, es un asunto complicado y siempre tenemos más preguntas que respuestas.

—Preguntaba porque, parece que las emociones que tu lobo guarda son de un dolor profundo y eso puede estar relacionado con tu pasado, puede que "él" lo recuerde aunque tú no lo hagas –dijo con un tono suave, pero que denotaba preocupación.

Saint lo pensó por unos momentos, él realmente no podía decir nada acerca de ello ya que poco sabía sobre su lobo.

—Debo preguntar si quieres continuar con esto, si hay algo escondido en tus recuerdos que sea doloroso y que se va a desbloquear cuando conectes con tu lobo entonces quizá no sea tan buena idea continuar –continuo Perth.

Saint negó nuevamente. Ahora tenía diferentes cosas en su mente, si su lobo estaba escondiendo algo, si estaba guardando un dolor que deberían compartir entonces seria egoísta y cruel dejarlo todo solo por temer a ese dolor, además también estaba el problema sobre Zee.