Rojo [LEVIHAN/Historia completa]

9- Bonnie & Clyde

Solo habían pasado algunas semanas desde aquella velada romántica en que Zeke había pedido la mano de Petra para convertirla en su esposa.

Hasta aquel momento de su existencia, la vida parecía bastante predecible, así como aburrida. Habiendo crecido en el seno de una familia en apariencia perfecta, el mundo parecía esperar demasiado de Petra.

Hija única, buen colegio, lindo rostro y un futuro prometedor.

Ahora Petra se entretenía revisando el catálogo de vestidos de novia y debía de admitir que era demasiado tedioso decidirse por alguno, aunque estaba más que segura que cualquiera que usara se le vería estupendo, no por nada llevaba años entrenando en el gimnasio para conseguir aquella figura envidiable llena de buenos atributos a costa de su propia dedicación.

Sobre su trabajo, Petra no tenía nada que acotar. Le gustaba lo que hacía pese a que quizás hubiera preferido hacer otra cosa. Sin nada de esfuerzo, había conseguido gracias a su padre un puesto en la fiscalía que le ayudó a posicionarse socialmente.

Una afortunada, dirían algunos.

El compromiso con Zeke se había dado casi como un cliché novelesco. Se conocieron una noche en la barra de algún bar, de seguro Zeke quedó flechado por su belleza y entonces se acercó gentilmente hasta ella para conversar, lo que finalmente terminó de manera escandalosa en algún hotel.

Era de esperar que Petra pareciera a simple vista una persona conformista por simple conveniencia. Sin embargo, sus días completamente iguales, dieron un vuelco cuando cierta mujer apareció.

***

Desde que Levi se había marchado, Eren se había tomado la molestia de revisar algunos expedientes e incluso le pidió a Armin que buscara lo que fuera sobre Levi. Para su sorpresa, incluso Armin no fue capaz de dar con nada que lo vinculara. Era como si Levi no existiera en el mundo virtual, aunque solo pudo encontrar en el registro social del gobierno su ficha de nacimiento y gracias a eso pudo enterarse de los primeros años de vida del ahora fiscal. Eren por desgracia, no vio nada raro en que un huérfano de niño se convirtiera en un adulto al servicio de la ciudadanía.

Por alguna desconocida razón quizás ligada a su intuición, Eren no era capaz de confiar completamente en Levi. Sin embargo, debía de mantener la cortesía mientras estuviera trabajando con él, lo que sería particularmente difícil dado al irritante carácter del fiscal.

—Eren, no creo que se trate de una mala persona. Debió ser difícil para él la etapa de su niñez. —Le comentó Armin mientras continuaba arduamente revisando su historial.

—Armin tiene razón. —Añadió Mikasa para desgracia de Eren.

Eren los observó a ambos por un instante. Él confiaba plenamente en el buen juicio de las dos personas que más estimaba, pero había algo que continuaba inquietándole sobre Levi y no podía permanecer quieto sin saber qué era en realidad.

—Si no es una mala persona, ¿entonces por qué no aceptaste su invitación a salir con él? Sin mí. —Dijo Eren recalcando lo último con cierto desdén.