ᴘᴇqᴜᴇñᴏ ʏ ᴛɪᴇʀɴᴏ ᴇɴᴀɴᴏ | Moscú x Tucumán

⇾07: Paseo

Buenos Aires jalo a la provincia del norte hasta un lugar donde ellos dos podrían hablar sin interrupciones. Tucumán prestaba atención a lo tan 'importante' que su hermano iba a decirle.

— ¿vos y Moscú son amigos?. —preguntó mediante vigilaba que nadie los siguiera o escuchara.
Tucumán no estaba del mismo modo de paranoico que el más alto.

— bueno, ponele que intercambiamos algunas palabras pero de que somos amigos, no creó. —contestó con simpleza.
El de coronilla de laureles miró a la replica más chica de su nación con colores al revés detenidamente.

— entonces, ¿puedo pedirte un favor?.

— mandala noma'. —Buenos Aires suspiro para calmar los nervios dentro suyo; miró por segundos a un punto distinto que el de los ojos de su hermano.

— ¿me harías la gamba¹ con Moscú?.

Es obvio que el norteño quedo bastante sorprendido con aquel pedido; no tardó en largar las primeras risas descontroladas provocando el severo sonrojo en las mejillas de la Capital principal de la nación argentina.

— dale boludo, dejate de hacer el canchero, ¿me ayudas sí o no?. —exigió mediante empujaba un poco al más chico. Aquello no detuvo las risas del tucumano, las incremento aún más.

— ¡chango!, ¡¿tas' loco?!, digo... ¡¿Moscú?!, ¡yo te hacia novio de C.D.M.X.! —dijo provocando que bonaerense bufara seguido de una risa falsa.

— ni a gancho con él.
Dale negro, haceme el aguante con Moscú. Serás la persona que más admire en el mundo mundial. —exageró seguido de que casi y se pone de rodillas frente al blanco y celeste.

— deuna', te ayudo con el ruso si.. —alargo la 'i'; hacerle esté favor no le iba a salir para nada barato— me compras tres cajas de alfajor.

— vos decime la marca y ya te los traigo. —aseguró.

Hasta ahora el plan que Rusia y Argentina habían armado estaba yendo bien. Según ellos. Moscú no vio cambios en la actitud del tucumano con él, seguía estando alejado. Debía de hallar la forma de poder acercarse a él y entablar una mejor charla; dice la libreta que los tucumanos son muy charlatanes, les sobraba cosas de las cuales hablar. Aunque algunas estaban prohibidas, como la charla de política y fútbol, estaba escrito en rojo que todo argentino debatía muchísimo estos temas.