—Hey, arriba LessMe levante de la cómoda cama y encare a quien me estaba hablando.
—Eres real, no fue un sueño.—sacudi mi cabeza tratando de despejarme.
—Te explicare todo...
—Vale, adelante.
—Lo primero que te preguntaras es ¿Quién soy?, ¿porque estoy de una manera casi holografica y porque no estoy loca?
Tengo 45 años, soy Alessa Vryzas Fotsis, he pasado por muchas cosas a lo largo de mi vida, soy escritora, pero... por una cosa u otra nunca llegué a escribir un libro completo, me sometí a una operación y simulación de mis recuerdos de toda mi vida sin descanso, tratando de recordar todo.
Pero...a medida que fuiste avanzando yo decía un par de cosas como ; "lo bueno que no tenías apetito ¿no?" y lo más asombroso es que tú me respondías.
Tomabas decisiones propias, eres otra versión mía... Esto es increíble porque te di vida propia, eres mi creación.
Tal vez la loca soy yo, porque veme aquí, yo estoy acostada dentro de una cabina donde millones de pantallas me rodean y mis signos vitales se escuchan, estoy aquí mirando todo lo que tu haces, y si eso no es
suficiente te di vida propia.—termino ella mirando al suelo con un semblante serio.Trato de asimilar tanta información pero me es imposible.
—¿Yo no existo?.—Pregunté
—Vives en el 2019, yo estoy en el 2046, aunque eres la misma persona, misma universidad y demás, hiciste tu propia historia. — me quede pensando...
—¿Y cuando desaparece de tu mente?.—frunci los labios, yo quiero tener vida propia.
—Cuando mueras.—aseguro
—¿Estas dispuesta a estar acostada en esa cama por más años?. —definitivamente esta loca.
—Yo ya he perdido todo, no me queda más que hacer en este mundo, tu sigue con tu vida, yo te observare cuando me necesites solo llamame y ahí estaré.
Su sonrisa me parece espléndida, pero yo tenía demasiado sueño, y volvi a caer a la oscuridad
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Vidas cruzadas
Science FictionLa fría noche me acariciaba mientras sentía mis mejillas mojadas a causa de mis lágrimas, mis manos tenían esa sensación de tocarte... Sin embargo, ya no estabas . Caí de rodillas en el suelo y solté el teléfono para después escuchar las gotas de ll...