Capítulo VII

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Me dolía la cabeza un montón, normal si no he descansado

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Me dolía la cabeza un montón, normal si no he descansado.

Me pare de mi escritorio y reorganize la información donde saqué la conclusión que solo tendría 2 oportunidades más para regresar acá.

Dado que mi cuerpo sufre 36 voltios al momento de ingresar y los mismos de volver, note que el cuerpo humano solo resiste 220.

Entonces me quedan dos más, y ya esta, porque también me estoy sacrificando yo, me inyectan suero y los demás nutrientes...

Esto es tan difícil de asimilar, Alessa joven no podrá vivir su vida a causa de que yo moriria.

Entonces si, me quedaré sin libro y nada de lo que he querido hacer...

Creo que podré hacer algo, y ustedes lo verán mas adelante, recuerdan a Alyssa ¿no?...

Me dirigí de nuevo a mi tinta y papel donde veía rastros de mucho esfuerzo y empeño.

Ya casi esta listo, aun abunda mi terrible dolor, les haré saber esta inquietud recorriendo mi hogar.

Vayamos primero a la sala de estar, al entrar por la puerta ustedes pueden observar el enorme cuadro y el efecto acuarela que le dio mi difunto esposo a nuestro cuadro de bodas.

Sonreí al instante, si bajamos un poco la mirada había dos sofás para nosotros dos y los demás para la visita, nunca tuvimos hijos, una lastima.

Todavía permanecía su aroma, su colonia era una mezcla de limpio con un toque masculino, como si se tratara de un bosque, me hacía suspirar al primer instante.

Lo conocí en la universidad, y cuando nuestras miradas chocaron no hubo más salida, fue nuestra prisión.

Y ahora que mi compañero de celda no está, extraño reír por sus ocurrencias.

Seguí pasando por el pasillo, algunos cuadros colgaban de las paredes, algunos estaban hechos por mi esposo, otros eran míos pero de notas vagas.

Sentía esa opresión en el pecho, mire el gran pasillo, aún me faltaba para llegar a la habitación, suspiré la parte más difícil va a llegar a mí.

Mire hacia arriba reteniendo las lágrimas, el gran candelabro me recuerda a cuando el me menciono...

Recordando

Bonita, ¿no crees que le falta una gran iluminación a esta parte?.

—Mmmm, a mi me agrada mas así, que este oscuro. Pará así ponerle luz a los cuadros y se iluminen, aparte que dejara más impresión ¿no?. —incline mi cabeza en modo de pregunta.

Vidas cruzadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora