Red thread. ||Wigetta. | Rubelangel.||

Una Pequeña Tormenta.

Pude ver caminar a Guillermo bajo la lluvia, se estaba dirigiendo a la cafetería para comprar un café antes de dirigirse a la universidad dónde estudiaba animación en 3D. Para su sorpresa, allí estudiaba Rubén, el chico que había visto días atrás persiguiendo a un par de tíos. Él era una persona perspicaz, y bastante inteligente aunque a simple vista no lo notes. Guillermo sabía que Rubén podría parecer un tío con falta de materia gris, pero era sólo una imagen para poder disfrazarse y parecer sólo un simple idiota.
Rubén actualmente vivía con Miguel Ángel, el tío que tenía el otro extremo del hilo que junta el destino.

Volviendo con Guillermo, él se refugió dentro del local y avanzó hasta el mostrador, dónde se dirigió hacia la chica de pelo recogido en una coleta alta. Él le pidió un simple café para llevar aunque se vaya a sentar en alguna mesa de allí dentro hasta que la lluvia cesara. Cuando tuvo el vaso de cartón en sus manos se dirigió hasta la mesa más escondida del lugar, pero éste se llevó un libro con sigo.

Por instinto se agachó para tomarlo en manos «Diccionario de términos médicos».

-Lo siento- Se disculpó.

-Está bien, chaval- Habló la voz que estuvo rondando durante las noches en la cabeza de Guillermo.

Cuando levantó la cabeza lo observó con el libro en las manos.

Vamos, Guille, es tu oportunidad de hablarle.

Sus torpes manos soltaron el libro, dejándolo caer una vez más al suelo. Automáticamente se volvió al piso y lo volvió a levantar.

Por el otro lado, Samuel, el chico de la camisa lavanda lo miró algo extrañado por esa actitud, pero aún así le sonrió.

-¿Estás bien?- Le preguntó el mayor.

Guillermo no contesto, sólo dejó el libro sobre la mesa y se hundió en la silla más alejada de Samuel posible.

¿Qué rayos había sucedido?

Él miró sus manos que transpiraban del nerviosismo, y luego a la mesa de Samuel que tenía su vista centrada en una hoja impresa blanca.

Al parecer no le dio más vueltas al asunto del libro y se dedicó a terminar de leer sobre primeros auxilios.

Mientras que el otro se hacia la cabeza por haber actuado como un idiota. Suspiró y metió una mano dentro de su mochila y sacó su cuaderno y un bolígrafo negro. Abrió el cuaderno y con el bolígrafo escribió sobre una de las hojas rayadas.

«¿Quién es él? Sólo un chaval que estudia medicina que viene cada mañana a tomar un café antes de ir a la universidad. Incluso, parece que hace lo mismo que yo, pero sólo que él si estudia. He estado esperando el día en el que pudiera dirigirle la palabra, pero aún no me atrevo. Tengo pocas agallas.
¿Quién es él para hacerme hacer el ridículo sin intención alguna? Tal vez he nacido para eso; para hacer el ridículo.
Aún no es invierno, pero aún así llueve.
¿Quién es él y por qué invade mi cabeza? Sólo lo he visto tres veces, pero lo he pensado tres centenares. Incluso se atreve a dirigirme la palabra y a sonreírme.
Él parece ser una persona bastante sonriente, aunque nunca he oído su risa. Ha de ser melodiosa. Voy a anhelar el día que la oiga.»

Cuando Guillermo terminó de trazar aquellas letras, Samuel se levantó de la silla, recogió todas sus pertenencias y empezó a caminar bajo la insistente tormenta. Guillermo lo siguió con la mirada y suspiró una vez más antes de darle un sorbo a su café mientras aún lo miraba.

Hola, ¿cómo están? Espero que bien.
En fin, yo sé que es algo corto, pero tenía ya escrito un capítulo pero se me borró, de hecho lo perdí. Traté de recordar como era pero bueno. Si siguen me blog, van a saber que pasó.
Recuerden que pueden hablarme o dejar ideas en la caja de comentarios y les podré créditos :)
Espero que voten y comenten.