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Narrador//

Zulema estuvo toda la mañana en su celda tratando de evitar a cualquier reclusa que quisiera pasarse de lista a causa de su escape, le tenían más ganas que nunca, necesitaba tener su cabeza fría, caminaba de un lado a otro, en esa diminuta celda.

Por otro lado Hierro trataba de aclarar sus pensamientos, mojaba su rostro una y otra vez, aún podía sentir el sabor de sus labios, el peso de su cuerpo cuando la tenía acorralada contra la pared a pesar de que ya habían pasado horas..... veía su reflejo en el espejo, nunca sé había involucrado con una presa, fuera de eso mantenía sexo casual con mujeres nada importante para el. -No es nada Antonio, es una presa más que cree controlarlo todo.-murmuraba para sí mismo mientras se secaba el rostro con una toalla, dispuesto a salir y seguir vigilando.

Pov//Zulema

mierda mi cabeza daba vueltas, que coño había pasado, estaba apunto de follarmelo, quería jugar un rato, pero se salió de mis manos -pienso. Perder el control nunca es una opción para mí, pero había algo en este tío que me gustaba provocar, joder Zulema esto no es importante ahora, y deja los juegos para después. -me reprendo a mi misma, mientras observo el hueco en el que estoy metida otra vez era muy irritante, me provocaba cierta claustrofobia estar así, necesitaba encontrar a la frijolita, me habló de fugarse y era lo único en lo que quería pensar ahora, necesitaba un plan y ella era mi mejor aliada, nada que perder y con las mismas ganas de ser libres, lejos de esta mierda...

Salgo a pasos lentos, aún era observada, así qué no me dejaré en evidencia...Y allí estaba ,la tomo del brazo mientras la acorralo contra la pared.

-¡Que pasa chingada! ¿Cómo nos fugamos?- enciendo un cigarrillo y la observo con muchas expectativas. -Las cosas sin planear no salen bien y planeadas tampoco - reímos ambas al mismo tiempo.

-¿Sabes cuánto tiempo fuí funcionaria en esta cárcel? Siete pinches años, me conozco todo, cada pasillo, cada cámara, los protocolos de acción en caso de incendio, de motín, de pelea, de fuga. -resopla mientras camina y la sigo realmente era mi mejor aliada. -Puedo escapar fácilmente, con unos tornillos, más la ventana que da al vestidor la fuga perfecta cabrón.

-¡Sí coño!. -era excitante para mí escuchar hablar de fuga.

-¡Pero! - ve alrededor y vuelve su mirada hacia mí. -Solo funciona una vez y para una sola persona!. -que mierda me estaba diciendo la miro anonadada. -Y tú no vienes. -quería golpearla. -Necesito que me ayudes a escapar y luego vengo por tí.

-¿Estas de Coña, no? Yo no confío ni en mi sombra!

-Tendrás que hacerlo.. ¡Mora! Es nuestra única opción hasta ahora y lo sabes!

-Que puta zorra tía, que puta zorra.
¿Y que tengo que hacer, si logro confiar en ti claro?-entrecierro los ojos, esperando la respuesta.

-Eh visto a ese nuevo funcionario buscarte con la mirada todo el tiempo que llevamos aquí. -dice mientras ve alrededor. Y ahora mismo te está viendo!.

-¡Ese es su trabajo! No recuerdas que nos escapamos las dos y además soy la favorita de aquí me observan todo el tiempo.. Al grano. -Sabía a quién se refería.

-!Pinche mora! no te hagas, sé cuándo un funcionario está detrás como un perrito, te está viento sólo a ti, además escuché que es la mano derecha de Sandoval es una ventaja, tienes que distraerlo, la manera en que lo harás será tu problema, después de la hora de almuerzo te doy la señal. -quita el cigarro de mis manos y se va.

(...)

Zulema se dirigía al comedor, pensando en toda la información de Altagracia, confiar completamente en ella no era una opción, pero era la única salida que tenía ahora.

Adicto a su venenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora