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"Tenía la belleza de un
Ángel, pero la atracción
peligrosa de un Demonio"


Hierro

    Hace unos minutos había aterrizado mi vuelo y ahora estaba listo para encontrarme con Castillo aún no caía la noche.

Entro a una oficina donde están reunidos varios inspectores entre ellos Castillo realmente esta mujer tenía a todos así pienso luego una secretaria se acerca.

—Buenas tardes informaré al inspector Castillo que ya está aquí espere un momento por favor... Inspector ya está aquí el Funcionario Antonio Hierro.

—Bien! que pase. — mientras estrecha la mano a todos los que estaban. —Eso es todo gracias por vuestra colaboración.

—Hierro toma asiento!. —me siento a la par de una inspectora al parecer de alta confianza de Castillo. —Bien por dónde empezar , realmente esto es muy importante lo entiendes no Hierro?.

—Si! lo sé.

—Eh estado detrás de esta hija de puta todo el tiempo está vez pensé que sería difícil dar con ella y solo estaba a la espera de un mínimo error, dude por un momento que lo cometería, ¡porqué joder estamos hablando de alguien muy inteligente!.

—¿Y que pasó?. — Estaba demasiado impaciente quería saber más de ella.

—Llamó a un médico logramos localizar la llamada pero no podíamos dar con el sitio en específico, pero sí sabíamos en que país estaba, así que investigamos casi a todos los doctores de aquí y dimos con uno, sólo que la descripción que me daba de Zulema no concordaba, menos el estado en el que atendió a la mujer, concordaba con otra, Saray Vargas era de esperarse estaba embarazada. —hablaba mientras leía un informe. — Esta tía los puede intentar sobornar con mucha pasta, no dudo que la tenga, pero antes de que eso pase les volará la cabeza.

—¿Y cómo la van a trasladar desde aquí?

—¿Que cómo trasladar a Zulema Zahir desde la República Dominicana?. —resopla y nos ve a ambos. — Habéis visto king Kong la película, antigua la de blanco y negro, pues lo mismo yo la narcotizaria, la ataría de pies y manos y la metería en una jaula y aún así tendría mucho cuidado con esa hija de puta.

—Como si fuera Hannibal Lecter? —pregunto con risa nerviosa casi sin creer lo que estoy escuchando.

—Peor — responde mientras mira hacia el escritorio. — Zulema Zahir es mucho peor.
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(Dos horas después)

Zulema

   Bajo del auto mientras dos imbéciles me quitan las esposas de los pies a la vista de mucha gente, ni siquiera sabía que me llevarían así como si fuese un puto espectáculo y aún sentía un poco de dolor por la herida de bala, fuera del auto estaba una inspectora y un hombre nunca los había visto que pretende ahora el gordo cojo.

Abordo y detrás venía esta inspectora y si Castillo no estaba en su lugar es porqué seguramente el hijo de puta ya estaba aquí dentro. Sigo caminando trato de analizar cada detalle y a lo lejos veo a un niño que no deja de mirarme "joder" con el gordi, me indican mi lugar no pensé que iría sola, realmente me subestiman. — mientras me siento mis ojos se posan sobre un arma. — Ni te hagas ilusiones es de última generación y solo funciona con mi huella dactilar —dice en tono de burla. —Esta tía cree que eso me puede detener.

Y de repente veo entrar al mismo hombre que estaba anteriormente, de piel algo bronceada, cabello castaño bastante alto, no pensé que vendría aquí no le había prestado atención hace unos minutos pero por alguna razón mi mirada se fue directo a el, empieza a hablar con una de las azafatas y dudo por un momento en que Castillo sea tan gilipollas para mandarme a este tío pero parece que si lo es, se acerca y me toca el hombro para que me mueva al otro asiento...

Adicto a su venenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora